HEREDEROS DEL PARAÍSO

Capitulo doce: Algo urgente.

¿Qué era él?, ¿un fantasma?, ¿un maldito espectro enviado para hacer que se volviera loco?, su voz, sus ojos, todo era exactamente igual, incluso la manera en que apartaba su pelo de la cara, incluso esa manera de moverse, ¿estaba alucinando? tenía que ser él, pero Fluke estaba muerto, Fluke había muerto hace cuatro años, ¿Quién era ese chico?, ¿Quién era?, ¿Por qué de pronto estaba ahí?, ¿Por qué decían que era el hijo de ese hombre?, ¿Por qué decía que se llamada de otra manera?

— Deja de mirarlo, Ohm. —Nathan Ritprasert le tomó la cara para hacer que lo mirara.

— ¿Vas a negar que se parecen mucho? —Preguntó. —¿Acaso crees que puedo dejar de mirarlo cuando se parece en todo a él?

— No, claro que no, pero ¿acaso no viste las fotografías y recuerdos?, ese es el hijo de Henry, no es Fluke Kelly. —Dijo su padre visiblemente enojado.

— Tengo que hablar con él...

— Deja la tontería, es mejor que vayas a casa, no creo que sea buena idea que te quedes, no debí insistir que vinieras a esta fiesta.

— No, no debiste. — Dijo sin poder dejar de mirar cada movimiento de Natouch. —¿Dónde vas? — Preguntó su padre cuando vio que se encaminaba hacia sus anfitriones.

— A despedirme...

— Me despediré por ti.

— No es necesario, padre.

Natouch se dio la vuelta antes de que él incluso llegara a su lado y además de extenderle aquella sonrisa hipócrita con la que hablaba con todo el mundo, tambien dio un paso atrás, como si le molestara su presencia y la cercanía de todos en realidad.

— ¿Es usted el hijo del señor Ritprasert?, ¿Ohm si no me equivoco? — Preguntó él.

— Así es, Ohm. Lamento la confusión anterior, quiero decir... —No lamentaba nada, estaría loco si no hubiera notado el parecido.

— Oh, si..., ya me han dicho que me parezco mucho a... ¿Fluke Kelly?, ¿verdad? — Su tono era tan despreocupado que Ohm dudo por un segundo que estuviera fingiendo, pero es que esa expresión en su rostro, esa expresión cuando mencionó a Fluke, cuando pronunció su nombre.

— Idénticos...

— Me hubiera gustado conocerlo, me han dicho que perdió la vida en un terrible accidente, de verdad lamento si mi parecido con él le hace recordar malos momentos, señor Ritprasert... — Dijo él.

— Usted..., ¿nunca había estado en Chiang Mai? — Natouch le miró fijamente y Ohm casi pudo sentir la sensación de estar ahí junto a Fluke.

— Ohh, si..., pero cuando era niño. — Respondió. — Tengo entendido que usted es médico, ¿neurocirujano?

— Si, así es...

— Papá me dijo que tambien es el director del hospital general, me agradaría poder ayudar en algo, en la fundación quiero decir... — Fluke no sería capaz de fingir así, él no era Fluke, no podía ser él.

— Claro, cuando quiera puede venir. — Dijo perdiéndose en ese par de ojos que tanto extrañaba.

— Excelente, ¿Qué le parece mañana? — él no era consciente de lo que le estaba provocando, tenía tantas preguntas, tantas dudas.