006 - ¿Confianza?

80 6 0
                                    

Salí al jardín de la finca con Tanjiro, siempre transmite esa sensación de amabilidad.
—Vi que aprendiste a convivir con Inosuke.—Mencionó el pelirrojo mientras me miraba sonriente.
—Si...bueno creo que socializa rápido a pesar de que nos ve como sus subordinados.—Le dije riéndome sobre aquello.
—Si bueno...supongo que se acopla rápido, pero no suele ser el primero demostrar interés. Creo que le agradaste desde un inicio.
—Ja, pues el solo quiere pelear y tal vez robarse mi comida.
—Si, es verdad que le gusta demostrar que es el mejor en todo, pero en realidad si se preocupa por los demás, aunque parezca lo contrario. Porque hueles como una buena persona, pero no tienes intenciones de crear vínculos con nosotros ¿No es así?
—¿Eh?...—No supe como responder ni reaccionar a lo que Tanjiro me decía, ¿Cómo podía saber eso? Era verdad, pero no entendí como podía saberlo, solo quería mantenerme al margen y que nadie me metiera en problemas, si bien Inosuke me había generado confianza en a penas un día, temía generar amistad con el o con cualquiera, porque se que nunca llevaremos una vida común.

—No es un regaño.—Interrumpió Tanjiro.—Se que no tienes malas intenciones.
—Ya veo...me agradas Tanjiro, al igual que los demás, pero es complicado querer a las personas cuando se que tendré la preocupación de si viviremos para una próxima misión, si estaremos bien mañana.
—No quiero que te sientas incomoda después de esto y en realidad lo entiendo, solo espero que te acoples mejor.
—Gracias por eso Tanjiro.—Sonreí amablemente mientras Tanjiro se despedia y entraba a la finca.

Sabía que Tanjiro tenía razón, por un largo tiempo estaría con ellos, y se que me encariñare si convivo más, pero me da miedo quererlos y después perderlos.

Entre a la finca recordando que le había dicho a Inosuke que pasaría tiempo con el si me dejaba a solas por un tiempo.
Encontré a Zenitsu en el pasillo, gritándole a una de las chicas que ayudan en la finca, es desesperado y griton, pero es amable.
—Hola Zenitsu, perdon por interrumpir, pero ¿Sabes donde esta Inosuke?
—Hola señorita Sayu!!—Respondía alegre el Rubio.—Supongo que debe de estar en la cocina, siempre está comiendo.
—Gracias, nos vemos luego!—Respondi y me dirigí hacia la cocina.

—Inosuke!!!—Dije alzando la voz, ya que no lo veía cerca.
—Subordinada!!!—Dijo gritando y tirándose a mi espalda como si fuera otro de sus amigos.
—Seguimos con lo del espacio personal. Supongo que tendremos que trabajar con eso ¿eh?
—¿Qué es eso?—Preguntaba Inosuke.
—Es el espacio que una persona tiene para si mismo, y las demás personas personas no deben invadir o será algo incomodo.
—¿Porqué?
—Pues...ellos podrían molestarse.
—¿A ti te molesta esa cosa?
—Ammm...("acepta la felicidad cuando la tengas, no es algo que sobre" algo que alguien alguna vez me dijo) —No Inosuke...
—Entonces eres una mejor subordinada que los demás!
—Entonces quieres pelear o algo así, ya que te prometí algo, o quieres estar solo...—Dije pensando en si en realidad en ese momento el preferiría pasar su tiempo solo.
—No! Quiero comida!—Decía insistente.
—No creo que quieran cocinar de nuevo, aun no es hora de la comida.
—Hazlo tu!
—¿Porque yo? Aunque ni si quiera cocino bien, así que no!
—Porque eres mi subordinada! Debes de alimentarme.
—Pero no soy tu madre!
—Entonces llévame por frutas!
—No creo que nos permitan salir antes de una misión.
—Monitzu salió a no se donde hace un rato! Y dijiste que pasarías tiempo conmigo!—Gritaba el peliazul insistente.
—Bien...
Salimos de la finca después de haber dejado una nota a los demás para que supieran de nuestra ausencia. La finca era un lugar aislado, únicamente rodeado por lagos y campo. Por aquello Inosuke insistía en ir por frutos que probablemente podrías encontrar a los al rededores de la finca.

—Oye Inosuke.
—¿Mhhhm?
—No creo que aunque comieras todo lo que hay aquí llenarias, bueno por lo que he visto de tu apetito.
—¿Eh? Pero es mejor a nada! Tonta subordinada!
—Ey!...Tu eres el tonto, no sabes nada!—Dije sin pensar en como eso podría hacerle sentir.
—Eh...No necesito nada de eso, yo soy el Rey!!!...—Respondía algo nervioso y desanimado por lo que yo había mencionado.
—Lo siento Inosuke...no quería ser grosera contigo, lo dije sin pensar.
—Pfff...No me importa lo que pienses.—Dijo mientras se tiro al pasto recostandose dándome la espalda.
Solo me senté a su lado sin decir nada por un minuto.
—Entonces ¿quieres hacer algo Inosuke?—Dije para romper el silencio que habíamos creado.
—No!—Dijo en un tono aun molesto.
—Mhhhm...entonces supongo que yo regresare a la finca.—Dije intentando levantarme para ver si dejaba de estar molesto.
—No!—Grito el peliazul mientras se volteo de mi lado y me jalo del brazo para volverme a sentar al pasto.
—Qué no seas tan rudo!!—Dije molesta sacándome de su agarre.
—Es que tu eres muy débil...!!!—Se quedo a medias, pensando en como terminar la frase, comos i buscará una forma para llamarme.—¿Tienes nombre?—Pregunto ingenuamente.
—Claro que si! Es Sayu, Sayu Kimura.
—Sayu...
—Vaya ¿Entonces puedes decir un nombre correctamente?—Mencione burlandome.
—Chayu!!
........

🪷 we (can't) be friends -Inosuke Hashibira n lectoraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora