-Lo siento Dali... Pero yo no siento lo mismo-
-Yo.... - sentía un horrible nudo en la garganta, ¿Qué acababa de pasar?, Ian me ha rechazado, eso significa que mi mayor pesadilla se había hecho realidad, aunque una parte de mi ya se imaginaba que esto pasaría.
-¡Dali!! - ahora no mamá... ¿Qué no ves que estoy sufriendo?, solo déjame sobrellevar la pena-¡Daliah!! -
Siendo sincera me da un poco de miedo cuando me llama así, me hace pensar que está furiosa, lo cual es muy probable.
-DALIAH! - Dijo mientras que a su vez me quitaba las sabanas que lograban mantenerme algo calentita.
-Mamá! - así es... Me espanté, pero sólo un poco- Lo siento me quedé dormida-
-Siempre haces lo mismo, llegarás tarde si no te apresuras, así que muévete o tu padre se irá sin ti-
Al menos todo fue una terrible pesadilla, agradecía a los cielos y al universo entero el que haya sido solo eso, una pesadilla y no más.
Me apresuré lo mejor que pude y me fui sin desayunar, mamá siempre ha odiado que haga eso, pero como mencioné, no es algo que me guste mucho de hacer tan temprano, me subí rápidamente al auto y entonces llegamos al colegio.
-Límpiate la baba, ¿quieres? - lo voy a matar, pero antes de que pudiese agarrarlo salió corriendo del auto, lo perdí fácilmente entre la multitud de estudiantes que habían en el pasillo.
-Hola Dali- volteé en cuanto escuché su voz, ¿soy yo o se ve más lindo que ayer?.
-Hola... -
-¿Por qué te ves algo agitada? -
-Bueno es que... - aún agarraba un poco de aire- Perseguía al imbécil de mi hermano, pero olvídalo, no importa-
-Una mañana muy normal, ¿no es así? - asentí entre risas.
Tenía pensado decir que la campana sonó muy rápido, pero entonces recordé que yo era quien había llegado tarde hoy, ya no puedo ver casi a Ian en el colegio y yo solo desperdicio el poco tiempo que tengo para verlo, no pienso volver a levantarme tarde.
-¡Ian! - gritó una chica, oh no.
-¿Esa es... Lidia? -
-Lo es-
-¿Por qué te llama? -
-¿Bueno ahora quién es la curiosa? - carajo, espero no haberme visto muy celosa o algo así, tengo que controlar mis sentimientos- Estamos en la misma clase- eso no me lo dijo, bueno tampoco es como que sea su obligación hacerlo, ¿no?.
-Ya veo- no es que esté del todo celosa, un poco... Pero el verdadero problema es que otra de las cosas que más detesto en este mundo es a Lidia, uno de los peores seres humanos que pueda existir la verdad, solo sabe robar oxígeno, es una chica realmente linda, cabello castaño y ojos verdes, lástima que es horrible como persona.
-No te preocupes, solo me estará llamando para ir a clases- eso me alivia.
-Tranquilo, no necesitas darme explicaciones, mejor ve antes de que se desmaye porque no le prestas atención- de hecho agradecía con toda mi alma el hecho de que él no le prestara atención a Lidia.
-Nos vemos luego Dali- revolvió mi cabello como de costumbre, solo el puede hacerlo.
Al llegar al salón de clases me percaté de que Kelly no estaba, ¿no había llegado o no vino hoy?, le mandé rápidamente un mensaje a lo que no recibí ninguna respuesta, mi suposición es que se quedó dormida, es algo que suele ser habitual en ella, supongo que solo seré yo el día de hoy, la maestra no tardó mucho en llegar y comenzar su clase, siendo honesta las clases sin Kelly son más aburridas de lo que suelen ser, ¿Qué se supone que haga... Prestar atención a la clase?, no quiero.
Comencé a observar todo mi alrededor y de alguna manera terminé encontrándome con la mirada del chico nuevo, Jules, me miraba tan directamente que lograba ponerme algo nerviosa, no porque me guste eh, no lo mal interpreten, pero si me ponía nerviosa, no apartaba la mirada, era como si quisiera que yo apartara la mirada, puede ser que esto era un poco extraño he incómodo, pero tampoco quería dejarlo ganar, que él aparte la mirada, que tonta fui al creer que ganaría, sus ojos color miel no dejaban de verme y al final quien se rindió fui yo, aparté rápidamente mi mirada, pero de reojo pude ver cómo una sonrisa se posaba en el rostro del chico, tiene linda sonrisa, pero eso no me interesa.
-Bueno chicos, necesito que para la próxima clase hagan el taller de Química que les pedí, lo harán en parejas- gracias a Dios, no soy muy buena en química, soy más bien del lado artístico, mientras que Kelly es buenísima en química- Decidiré quienes trabajarán juntos-
Mierda no... No me puede tocar con alguien más que no sea Kelly, solo ella me tiene paciencia, tras un par de nombres al fin me tocaba saber con quién tendría que hacer el trabajo, en este punto ya estaba resignada, pues a Kelly ya la habían nombrado con otra de nuestras compañeras, era más que obvio que me tocaría con alguien más, pero vaya sorpresa que me llevé al saber que con quien me tocaría hacer el trabajo, era Jules, lo miré rápidamente y este me devolvió la mirada, era una mirada realmente intensa, ¿Qué haré ahora?, Kelly me has abandonado cuando más te necesitaba.
La campana sonó y comencé a guardar mis cosas a toda prisa, soy de las que sale inmediatamente del aula de clases, es como si creyera que el apocalipsis ha llegado, caminé entre los pasillos y luego fui directamente hasta la salida, me senté en uno de los escalones ya que tenía que esperar a Dante, le prometí que lo acompañaría a comprar unas cosas.
-No te has ido- mi día de repente era más lindo.
-Espero a Dan- Ian se sentó junto a mí- ¿Qué haces? -
-Espero contigo, me iré después si tanto lo deseas-
-No digas tonterías, solo preguntaba- cada vez que se ríe me enamoro más, ¿Les ha pasado?.
-Oye Dali- dijo una voz profunda a nuestras espaldas, era Jules- ¿Crees que podamos vernos hoy en tu casa? - Ian me Miró inmediatamente a lo que sentí que debía dar una explicación de esto por alguna extraña razón, lo iba a hacer, pero Jules me interrumpió- Solo es para hacer el trabajo, nada más-
-Se llama Daliah- respondió Ian con una pequeña sonrisa, ¿Está celoso?, lo dudo, pero dime que lo estas por amor a Dios.
-Bueno su amiga me dijo que podía llamarla Dali y personalmente creo que suena más lindo así- pero que extraña tensión hay aquí.
-Puedes llamarme así si quieres, pero aún hay tiempo para el taller, ¿seguro quieres hacerlo hoy? -
-Lo digo porque después no podré, tengo algunas que hacer, hoy me queda fácil- bueno viéndolo desde otra perspectiva es mejor hacer el taller lo más pronto posible.
-Si está bien, si quiere podemos irnos juntos- Dios quiero saber en qué está pensando Ian, ¿por qué está tan callado?!, no suele quedarse así de callado.
-Primero debo ir a casa, pero dame tu número y así me mandas tu dirección- no pude evitar notar como Ian desviaba la mirada que antes se encontraba sobre el chico.
Este tipo de cosas me hacen creer que realmente le gusto de esa manera a Ian, pero... ¿Qué se supone que haga?, soy tímida cuando se tratan de estas cosas, le di mi número a Jules y para mí suerte al imbécil de Dante le dio por llegar, me salvó de este momento de pura tensión.
-¿Y tú quien eres? - dijo mi hermano viendo de manera muy seria a Jules, ahora que lo pienso prefería el momento de tensión.
-Me llamo Jules... Bueno nos vemos luego Dali- y entonces se marchó sin decir más, al menos se fue rápido antes de que el interrogatorio de mi hermano comenzara.
-Sabes que aún estas pequeña para novios he Dali-
-No digas estupideces!, ya tengo diecisiete- no le creas Ian, si puedo tener novio, pero sólo si ese eres tú- ¡Y ya vámonos! -
-Vaya que estas agresiva hoy, ni siquiera pude hablar con ese chico- ¿Y como no estar agresiva?!.
-No lo necesitas, ¡Nos vemos luego Ian! - me despedí y tuve que jalar al fastidioso de Dan para que se moviera, Ian por su lado solo me dedicó una cálida sonrisa y agitó su mano en forma de despedida.

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If Only Me
Teen Fiction-¿Y tu que piensas? - -¿Sobre que? - -El chico nuevo de tu salón - ¿realmente le interesaba saber?, detesto hacerme ilusiones y ya hice saber el por qué, pero a veces Ian me lo pone muy difícil. -¿Por qué quieres saber? - mierda, ¿Qué acabo de hace...