𝚓𝚒𝚖𝚒𝚗 𝚌𝚘𝚖𝚘 𝚝𝚞 𝚗𝚘𝚟𝚒𝚘®

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18/04

Un viaje de un día no es lo mejor para mi, por lo que ir en un avión privado es la mejor opción tanto como para mi salud como para el tiempo. Pues estar en México y viajar hasta Corea del Sur es muy pesado para mi.
Así que, medio día antes, llego hasta Corea y soy recibida por la prensa coreana, fans y personal del aeropuerto.

Viajar hasta aquí en esta fecha es más que importante para mí y para los demás. Hoy es el día que mi solecito se va y dejará una grieta en mi corazón, pero me alegra saber que se siente orgulloso de servirle a la nación y eso a mi me llena más de orgullo, antes de aterrizar estuve hablando con él y con Jimin y quedamos en comer en el hogar de Hobi por lo que ir allá en primer lugar es una prioridad.

—Hobi-ah —lo primero que hago es abrazarlo y darle un beso por su hombro— Te ves muy bien con ese corte.

Ambos nos reímos y le toco su cabellito recién cortado, se siente tan picoso pero es tolerable aquella sensación.

—Me alegra que estés aquí, Sun —no iba a perderme por nada del mundo faltar a la despedida, porque tal vez no nos veamos pronto.

—Siempre estaré para todos en este momento —veo el interior del departamento, no veo a Jimin— ¿Dónde está mi novio?

—Está tomando un baño, acabamos de terminar de cocinar así que toma asiento, te serviré algo de tomar.

Cuando Jimin sale y me ve, lo primero que hace es abrazarme y yo corresponderle el abrazo, mientras me llena de besos ambos nos saludamos.

—Hey, hey, no muestras de amor en esta casa, respeten —llega Hobi a nosotros bromeando— Me pongo celoso.

—¿Por Sunnie o por mi? —Hobi estalla de la risa y nos unimos ambos a él.

—Por los dos —voy a extrañar tanto estos momentos.

—¿Ya está la comida? Tengo algo de hambre —pregunto, puesto que no había comido tanto.

—Sí, en unos minutos estará listo, come un poco de fruta mientras está listo —Jimin me pasa algo de uvas y fresa y empezamos a platicar.

Entre los tres recordamos nuestro viaje a Francia y lloramos un poco, nos consolamos y abrazamos entre los tres mientras seguimos recordando y llorando un poco.
Después de recordar y llorar, empezamos a comer, mejor dicho a devorar porque los tres nos moríamos de hambre así que la comida que se tardó dos horas en hacer se tardó cuarenta minutos en acabarse.

—¿Quieren algo de helado? Ayer compré de fresa y de matcha.

—Yo quiero de fresa —le comento, pero luego decido ayudarlo a servir el helado, por lo que dejamos a Jimin sentado en el comedor, viendo su celular.

—Estoy nervioso, tengo algo de miedo, pero sé que pronto estaremos reunidos todos de nuevo, estaré esperando ansiosamente ese momento —verlo tan feliz pero a la ves apagado me estruje el corazón, por lo que me acerco a él y lo abrazo, lo abrazo con fuerza.

—Recuerda que todos estamos contigo, cuentas con todos nosotros, cuentas conmigo, te quiero mucho, Hobi —me separo un poco de él para verlo a la cara y saber que está llorando, por lo que le limpio la lagrimas— Nunca olvides qué hay una chica, bueno, varias, que estarán esperando tu regreso, y que tienes el apoyo de todos nosotros.

Vuelve abrazarme y me da un beso en la cabeza.

—Te quiero tanto, rayito de sol —me susurra en el oído y yo lo abrazo más.

—Y yo a ti, mi esperanza.

Un minutos después, seguimos sirviendo el helado y nos dispusimos a hablar, tomarnos unas cuántas fotos y seguir hablando. No hay tanto de que hablar porque siempre nos mantenemos informados por mensaje, pero mientras salga un tema ya no hay quien nos pare.

Y unas cuantas horas después, ya por fin, llega la hora de ir al centro de reunión donde será la despedida, ir con Jimin y sentir su helada mano me hace saber que no está bien, su mano siempre está caliente pero ahora está helada, pero trato de calentarla sosteniéndola con la mía.

—Seamos fuertes, cariño, que no es un adiós —él me mira y sonríe, se acerca hasta mi y me da un cálido beso, en donde mezclamos nuestros fluidos, es un beso necesitado pero con cariño— Te amo.

—Te amo más, amor.

Cuando el carro se detiene, empezamos a bajar, la lluvia es leve pero hace el momento más sentimental.
Sonrío al ver a la mayoría parados y hablando con Hobi, todos tienen sus ojitos hinchados pero se les ve muy bien.

—Ah~ Sun-ah que linda te ves hoy —Jungkook llega a mi y me abraza.

—Te ves bien, Sun —ahora me habla Namjoonie— ¿Haz adelgazado?

—¿Qué dices? No, nada de eso —sonrío— ¿Cómo están, chicos?

Empezamos a hablar un rato, Jimin no se despega de mí y me tiene agarrada de la cintura, muy cerca de su cuerpo. Aunque a veces se va de mi lado para ir y abrazar a los demás, pero más a Hobi.

—¡Es Jin hyung! —menciona Jungkook y al voltear a verlo lo veo caminando a nosotros, se ve excelente.

—Oh~ Seokjin Hyung —la mayoría hace pose militar y Jin se empieza reír.

—Hola, Jin ¿cómo estás? —me acerco a él y este me abraza, extraño hablar con él.

—Demasiado, es agotador todo pero estoy muy bien —empezamos a hablar un poco— ¿Tú estás bien? Te veo mejor que nunca.

—Estoy un poco bien, ya sabrás porqué. Pero he estado cuidándome mucho.

Seguimos hablando entre todos, y como la vez pasada, le pido al staff que no graben mi rostro.
Aún así, creo que aparezco en pequeños lapsos.

—Extrañaré hacer locuras contigo cuando venga a Corea de nuevo, pero esperemos estar juntos muy pronto —entrelazamos el meñique y nos abrazamos por última, solo que esta vez se me salieron las lágrimas— esperaré con ansias tu regreso.

Después de varías fotos, más despedidas y palabras de aliento, Hobi se va definitivamente.

Hobi🥺