Capítulo 1: Mal comienzo, mudanza y una vida por separado.

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Hace 3 meses a las 9 de la noche.

Todos los recuerdos invaden la cabeza de Sonia. Los buenos momentos con Sergio, la infidelidad mientras estaba en Barcelona, su madre, Javi... Todo ronda por su cabeza y ella lo único que hace es liarse mucho más de lo que estaba. Siente que para ella todo es negro, como hace ya tiempo. Necesita uno de esos abrazos de su padre, que tanto le protegían y le hacían ver que no estaba sola, que él estaba con ella. Aunque en ese caso, no podía ser así, no lo tenía a su lado. Aquella noche, la ansiedad podía con ella, y aunque ella nunca hubiera fumado, esa noche le apetecía echarse un cigarillo a la boca. Dicen que quita la ansiedad, y ella quería comprobarlo.

Salió de la cama y fue a la habitación de Marta en busca de algún paquete de tabaco para poder encenderse un cigarro, pero no hubo éxito. Lo único que encontró fue un paquete de tabaco sin abrir, y no quería empezarlo, aquello tramaría mucho. Decidió volver a su cuarto, y buscar la ropa más sencilla que tuviera para bajar al estanco a comprar uno, pero cuál era el problema que tan solo tenía 16 años, aunque dentro de 2 meses, cumpliría 17. Pensó que no se lo venderían, aun así, lo intentó. Bajó las escaleras, hasta llegar a la salida y dirigirse hacia el estanco, pero en ese momento, tropezó con Ricki, el cuál debería ir con Marta.

-Hola Sonia, ¿qué haces por aquí?

-Voy a bajar a comprar la cena, quiero estar sola.- mintió.

-Vale, como tú veas, si necesitas algo aquí estoy, lo sabes de sobra.

-Gracias Ricki, pero ahora mismo solo necesito estar sola con mis pensamientos. Por cierto, ¿dónde está Marta?- dijo algo preocupada.

- Está con Javi, dice que no quiere volver a España a pesar de la discusión que habéis tenido esta mañana, quiere terminar sus estudios aquí y darlo todo por ti. Así que ha sacado dinero del banco, y a alquilado un piso... Han ido a organizar las cosas, yo he venido a por un par de cosas que se ha dejado Javi, y se las llevo. Espero que te aclares pronto... Yo sé que os necesitáis.

-Mira Ricki, yo no te puedo decir que no lo quiera, porque sería estar engañandome a mi misma. Sé que le estoy haciendo daño, que no se lo merece. Pero quiero aclararme, no quiero hacerle más daño todavía... - dice aganchando la cabeza.

-Sí, te entiendo... Si en verdad haces bien, pero... ¿porqué le trataste así? ¿Porqué le gritaste de aquella manera?

-Sé que en eso me pasé, podía haber sido un poco mas seria y haberme dejado los gritos, pero soy muy impulsiva, y ahora me arrepiento de mis chillidos. Pero... ¿por qué no ha venido él?

-No quiere verte después de vuestra discusión, cree que necesitáis espacio.

-Estará bien... Bueno, te dejo, tengo hambre y tengo que ir por la cena. A la noche nos vemos. Un beso.

-Em, Sonia. Que se me olvidaba, esta noche dormiré con Javi, hasta que no encuentre compañero de piso, no lo voy a dejar solo. Iremos a una discoteca a despejarnos, así que tienes toda la noche para estar a solas con Marta, sé que la necesitas aunque tú pienses que sola puedes con todo. - Y al terminar de hablar, se lanza a sus brazos, y le da un abrazo, un fuerte abrazo.

Mientras Ricki sube las escaleras, ellas va caminando hacia el estanco.

10 minutos más tarde en el estanco.

-Hola, un paquete de Chester, por favor.

- ¿What?

Por lo visto el chico que le atendía no sabía español, así que Sonia tuvo que hablar en Inglés por un momento. Aunque como bien dicen, en todos los empleos debes saber varios idiomas. Pero al parecer, ese no fue el caso.

Entre idas y venidas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora