Capítulo 2: Una noche muy movida.

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Hace 3 meses a las 11 de la noche.
Mientras Sonia y Marta se propusieron ver, 'La vida es bella', Ricky decidió llevar a Javi al nuevo local que habían inaugurado. El cual ellos sólo querían divertirse, Javi y Sonia acababan de terminar la relación, y habían pasado 2 días sin ella.Se le hacía muy raro no sentir sus cálidos labios en su boca, los mordiscos en la oreja o en el labio inferior, sus besos de vaca que estropeaban los momentos bonitos y terminaban en un abrazo de: 'Qué tonta eres, pero eres la tonta más bonita que he conocido nunca'. Todo era una montaña rusa, pero ya era hora de salir y comerse el mundo.

30 minutos más tarde, en casa de Paula.
-Marta, cariño, despierta, te has quedado dormida.

-Ay Sonia, lo siento, puede ser que me durmiera al final de la película. Hoy he tenido un día muy ajetreado, y he caído rendida. 

-Es normal, tía. Ayudar a Javi a trasladar cosas a su nuevo apartamento, con lo flojucha que eres, te habrá hecho sentir cansada.

-¡VETE A LA MIERDA, DESGRACIADA!

-Ven para acá, boba.- Le dice mientras la coge del brazo, y se someten a un abrazo, un abrazo sincero, un abrazo tierno, un abrazo de amistad. Y un: 'Gracias por todo, Marta'- sale de la boca de Sonia.

En ese mismo momento, en la nueva discoteca.

-Madre mía, Ricki, esto está a reventar. Y mira los porteros, ¿crees que nos dejarán entrar?. Ya no lo digo por la edad, si no, por la cantidad de gente que hay en el local. 

-Bah, creo que teníamos que haber venido antes. Si por cualquier cosa, no pudiésemos entrar, en la acera de en frente hay un bar, que aunque no sea una discoteca como esto, está bastante bien y hacen conciertos a veces, podemos asomarnos a ver que tienen preparado hoy.

-De acuerdo, Ricki. Me parece bien. Pues vamos a intentarlo.

Mientras Javi y Ricki están en la cola de la discoteca, viendo a ver si los porteros le permiten entrar. 20 puestos más detrás, se encuentra Gonzalo y un chico. Un chico de esos con dinero, de esos que se cree el ombligo del mundo, de esos que no le puedes mirar a la cara, de esos liantes. Empiezan a oírse ruidos, y Javi identifica perfectamente aquella voz, la voz de Gonzalo. Y aunque no sea un tipo que sea de agradar para él, le fue fiel contando todo lo que había pasado entre él y su ex-novia, para él, su pequeña. Así que, decide acudir.

-Ricki, eh, Ricki. Acabo de escuchar la voz de Gonzalo, y se está montando mucho pelotón ahí detrás. Voy a ver que pasa, ¿te vienes o te quedas haciendo cola?

- No, no te voy a dejar solo para que te pase algo. Me voy contigo.

-Venga, pues vamos tío.Pero, ahora que lo pienso, ¿ no te caía mal?

- Puede que no sea un tío de mi agrado, que tenga cosas que no me gusten, que a veces sea un subido de tono, y vea las cosas desde otro punto de vista que el mío. Pero pese a eso, tuvo respeto, me contó lo de Sonia y él, y si le tengo que echar una mano, lo voy a hacer. Luego me quedaría con el cargo de conciencia de si le pasa algo, y yo que he estado allí no he ayudado en impedirlo, me sentiría mal.

- Te entiendo tío, pues nada, vamos. 

Corren dirección a todo el alboroto que se estaba montando, y de fondo suenan las sirenas. Sí, era una ambulancia. Gonzalo se encontraba desplomado en el suelo tras un fuerte navajazo en el abdomen. Javi decide pasar, y le ayuda a levantarse. Mientras,en ese preciso momento, Ricki ve correr a un chico, justo el mismo chico que peleó con Gonzalo, no sabe los motivos, pero eso no es lo que importa ahora.

-Eh, tú, si tú el que corre. ¿De qué vas, gilipollas?.

- ¿Quién eres tú? ¿Y porqué me insultas?

-Soy el chico que ha visto como escapabas y no sabes dar la cara después de meterle un navajazo a un amigo mío.

-Se lo ha merecido, y corro si me sale de los cojones. Déjame en paz.

Mientras el chico salió corriendo, Ricki aprovechó para echarle una foto. No se le distinguía mucho, pero quizás servía como pista para la policía. Decidió volver al sitio donde se encontraba Javi, ayudando a Gonzalo a ponerse en píe. 

Justo cuando llegó, allí se encontraba la ambulancia, y un coche de policías, Ricki decidió acercarse a uno de ellos y mostrarle quien era el culpable de que Gonzalo haya sido herido, y mientras que trasladaban a Gonzalo a uno de los hospitales más cercanos, un policía le preguntaba sobre el porqué de aquel ataque, qué había sucedido para que aquel chico, hubiese atacado de aquella manera, pudiendo haber conseguido que Gonzalo se desangrara. 

En ese mismo instante, en casa de Marta.

-¡Sonia, el teléfono!

-No es el mío. Es el tuyo.

- Pues se me ha quitado la melodía del teléfono. Ahora la pondré.

-¿Quién es?-dice algo intrigada-.

-Es Javi. ¿Que querrá?

-¿Crees que habrá pasado algo en la discoteca?- dice ahora, más que intrigada, preocupada.

-No lo sé, voy a cogerlo y salimos de dudas. No nos pongamos nerviosas.

-Vale.

Marta le da al botón verde, y coge la llamada.

-Marta, escúchame.

-Dime, dime. ¿Ha pasado algo?.

-Bueno, no justo a nosotros. Pero sí, en la puerta a la entrada a la discoteca, hemos oído barullo y se estaba formando un pelotón. He oído la voz de Gonzalo y he decidido ir a ayudarle, pero cuando he llegado el se encontraba en el suelo, con un navajazo en el abdomen. Necesitamos tu coche para ir a verle al hospital. ¿Nos lo dejas?.

-Sí, por supuesto. Pero nosotras vamos con vosotros. ¿Dónde nos vemos?

- Nos vemos en el estanco, justo al lado del Foster Hollywood. 

-De acuerdo, en 10 minutos estamos allí. Que vamos en pijama. Por cierto, ¿por qué no ha llamado Ricki?

-Está enseñandole una foto al policía del que ha atacado a Gonzalo.

-De acuerdo. Ahora nos vemos. - Y paso seguido, cuelga el teléfono-

Justo cuando Marta hablaba con Javi, Sonia se encontraba en su habitación mordiéndose las uñas. Se sentía culpable de sus gritos, y tenía miedo de pensar que a su Javi, podía haberle pasado algo. 

- ¡Sonia, Sonia! ¿Dónde estás?.

-En la habitación, cielo. ¿Qué ha pasado? ¿Algo malo?.

-No, tranquila. Han atacado a Gonzalo y necesitan el coche. Vamos con ellos, no me fío de que también les pase algo. ¿Te vienes no?

-Mira, Marta. No te quiero dejar irte sola, porque aunque vayas con ellos luego te vendrías sola. Pero creo que no es el mejor momento para ir. Está Javi...

-Sonia, déjate de orgullos. Coge lo primero que pilles y pontelo. Quizás después de casi 3 días el verle te haga bien.

-De acuerdo, vamos.

15 minutos después, salen por la puerta dirección a dónde han quedado con ellos y allí están. Tan guapos como de costumbre. Ni Sonia ni Javi podrían creerse lo que pasaría a partir de aquel encuentro... 




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⏰ Última actualización: Aug 24, 2015 ⏰

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