Día 2

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Llegué esa mañana a la escuela con la sonrisa más grande del mundo, estaba realmente nerviosa... Necesitaba contarle a Sam, mi adorable mejor amiga, lo que pasó ayer, pero desafortunadamente, por alguna extraña conspiración del universo en mi contra, no pude encontrarla durante las dos primeras clases; ¿Sabes lo que es mantener para ti sola el suceso más importante que ha sucedido en tu vida en los últimos años? Aghhhh, estaba a punto de explotar.

Finalmente, a la 3ra hora su maravillosa sonrisa apareció entre la multitud de personas que intentaban llegar a sus casilleros, con la poca expectativa de llegar a tiempo a su próxima clase, que en realidad era casi imposible.

-Dios mío, tengo que contarte la historia más emocionante del mundo" empiezo a hablar -entonces, ¿recuerdas a este chico que trabaja en la cafetería, del que he estado enam-"

-¿Acosando?- Sam me interrumpe.

-Enamorada. No acoso a las personas. Y para acosar a alguien necesitas al menos saber su nombre... ¡Que por cierto, ya lo sé!-

-Espera, ¿qué? ¿Su nombre? ¿El misterioso camarero de la cafetería tiene un nombre?-

-Sí... creo que todo el mundo tiene un nombre Sam jaja-

-Y... ¿Qué estás esperando? ¡Solo dímelo!-

-Vale, vale. No me mates... Trata de adivinar-

-¡Ay, no inventes! No sé... Algo así como muy común, ¿tal vez Jonathan? ¿Pedro? ¡Solo dime, es casi imposible que adivine su nombre!-

-Está bien, jaja, cálmate. Su nombre es Liam, Liam Boehme...-

-¿Boehme? Qué apellido tan raro-

-Lo sé, pensé lo mismo...-

Le conté toda la historia, incluso los pequeños detalles.

-Entonces, ¿tienen una cita hoy?- Me pregunta Sam, haciéndome miradas picaronas, que me ponen más nerviosa y emocionada de lo que ya estaba.

-No... Yo no lo llamaría cita... Sólo me preguntó si iba a ir a la cafetería hoy... Y no estoy muy segura... No creo que sea capaz de manejar el hecho de que ahora sé su nombre y que inevitablemente va a notar mi presencia, aparte, recuerda que mañana tenemos examen de física, y no soy la mas lista en ese tema-

-Tú. Tienes. Que. Ir. Has estado yendo a esa cafetería todas las tardes desde que comenzamos el tercer año, y eso fue hace como 1 año y medio... Así que, si no asistes e iluminas ese lugar con tu presencia, ¡Te juro por dios que te voy a matar!-

Sé que tengo que ir, tengo que hacerlo. Más ahora que sé su nombre y tengo la excusa para poder llegar a conocerlo mejor...

El resto del día se fue volando muy rápido. Sam siguió su camino a casa después de dejarme y asegurarse de que yo entrara a la cafetería.

Me senté en mi mesa, no sé, pero por alguna extraña razón esa mesa siempre está vacía, tal vez porque todos saben que ese es mi lugar, ¡o simplemente porque las estrellas en el universo siempre se alinean y las fuerzas de la galaxia y superiores quieren que yo me siente aquí cada vez! Está bien, estoy exagerando. La razón más probable es que a nadie le gusta esa mesa... Es el rincón más oscuro y está cerca de los baños... Aunque también tiene vista panorámica de toda la cafetería, no solo es buena para ver a Liam, sino para ver a las demás personas, me gusta observar e inventar las historias detrás de cada rostro... Es una costumbre que tengo desde muy pequeña.

Bueno, yo estaba ahí con mi libro, como siempre, cuando (por fin) llegó Liam y me sirvió una taza de café, luego se dio la vuelta y se alejó, esperaba que al menos me dijera 'hola' o algo así... Tengo que admitir que fue un tanto grosero...

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⏰ Última actualización: Apr 22, 2023 ⏰

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