— Jiminie — su voz resonó muy débil
— mi amor, ¿como amaneciste hoy?
— Jimin, ya no siento a mi lobo — susurró triste
Jimin se quedó paralizado por aquella confesión, que su lobo ya no se hiciera presente no era buena señal pues eso solo significa que su cuerpo y todo de él estaba listo para irse... luego de tantos su lobo había dejado de luchar y aceptado que ya era hora de partir.
— tranquilo mi omega, veras que con los nuevos tratamientos todo mejorara
— aún no encuentran un donante ¿verdad?
— ya habrá uno bebé, solo aguanta un poco más — le besó la frente
— quiero... quiero ir a la colina Jimin, ¿me llevas?
— no creo que sea conveniente amor
— por favor alfa — suplicó — solo quiero ver las estrellas una última vez
El alfa agunto las lagrimas y asintió, esa noche llevaría a Yoongi hasta las colinas, el omega amaba ese lugar, pues fue donde se prometió amistad duradera con Hoseok y amor eterno con Jimin.
La noche había llegado, Jimin hablo con los doctores sobre la decisión del omega, y con muchas dudas aceptaron, sabían por la falta de un donante al pequeño omega no le quedaba mucho tiempo, pues su lobo ya no estaba y su aroma prácticamente había desaparecido, claro solo Jimin por ser su predestinado tenia la capacidad de aun poder olerlo.
— Llegamos omega — lo ayudo a bajar de la silla de ruedas — con cuidado amor
— Esto es muy lindo — dijo mientras se sentaba en el grass — extrañaba tanto el aire puro — cerro sus ojos y respiro hondo — pase la mitad de mi vida en un hospital, muy pocas veces me dejaban salir, tenían miedo de que algo malo me pasara, pero gracias a ti — miro al alfa — estoy cumpliendo cada sueño.
— Todo por mi precioso omega — le acaricio de manera sueve su mejilla
Tanto alfa como omega se recostaron en el suave grass, se quedaron en silencio, disfrutando del agradable momento, el clima era perfecto, tanto que yoongi podría permanecer en aquel lugar por horas.
-— Las estrellas son mis lindas ¿no crees? — rompió el silencio
— Tu eres mas lindo omega
— Yo… yo sere una de ellas, estaré ahí arriba — apunto al cielo estrellado — cada ves que mires al cielo aunque sea de dia, ahí estaré, porque las luz de las estrellas nunca se apagan, yo iluminare tu camino, estes en donde estes, si te sientes triste solo mira hacia arriba, y ahí estare.
Yoongi sonrio al decir eso, pero se sorprendió al estuchar un ligero sollozo, al voltear se dio cuenta que era Jimin, quien estaba con sus ojos cerrados, mientras lagrimas salían de sus ojos.
— ¿Jimin? — se incorporó sentándose
Jimin imito la acción solo para abrazarlo, sus lagrimas no paraban de salir
— No puedo — dijo entre lagrimas — no estoy listo, no quiero que te vayas, hay tantas cosas que nos faltan vivir, no quiero me dejes omega
Yoongi sonrio en medio de abrazo, se acerco mas al cuello del alfa aspirando su ahora triste aroma, se acercó a su oído para susurrarle.
— Yo nunca voy a dejarte alfa — le beso la mejilla — siempre estare a tu lado
Estuvieron en quella posición por unos minutos hasta que Jimin se dio cuenta de la hora, ya era tiempo de regresar, pues Yoongi no podía estar fuera por mucho tiempo.
Al llegar al hospital, Yoongi volvió a su aburrida habitación, no le gustaba estar ahí, ya que le recordaba cada segundo que pronto se iría y dejaría a todos los que ama
— Descansa mi amor, esta noche me quedare contigo — beso el dorso de su mano
— Buenas noches alfa
— Buenas noches mi hermoso omega
Pasaron los minutos y Yoongi por fin se había quedado dormido, Jimin no podía hacerlo ya que por su mente solo pasaba la idea de que su omega nunca mas despierte, ese era su mas grande miedo. Se quedaría despierto para vigilar que todo este en orden.
Después de un rato Jimin camino hasta la ventana de la habitación, la luna brillaba alto, como aquel dia que le confesó su amor— Diosa luna — empezó a hablar — por favor no te lo lleves, yo se que tu eres muy piadosa, no permitirías que dos destinados que se aman se separen, Yoongi es todo para mi, él no puede morir, que voy hacer sin mi omega — ya no aguanto mas y sus lagrimas bajaron por sus mejillas — si mi omega muere, por favor llévame con él, es lo único que te pido, asi estaremos juntos otra vez, porque los destinados siempre tendrán que encontrarse ¿no es asi? … no quiero esperar mucho para volverlo a ver.
Se que te pido mucho, pero… te lo ruego, te lo suplico, déjame compartir esta vida a su lado… no te lleves a mi omega.Jimin lloro esa noche como nunca lo había hecho, rogando una y miles de veces a la luna que no se llevara la vida de su omega, que el estaría dipuesto hacer todo por el, darle su propia vida si es posible. Lo que el alfa no sabia era que la diosa luna si es piadosa con los predestinados, pero… como una vez se escuchó… una vida por otra, acaso ¿aquel alfa estaría dispuesto a dar su vida por su omega? O habría alguien mas quien se sacrificaría por la felicidad de dos almas predestinadas.
A la mañana siguien todo fue igual, medicinas, quimioterapias y demás cosas de cual el omega ya conocía. Estaba cansado de todo eso, solo deseaba que su dolor por fin acabase, no importara como solo esperaba que pronto todo se terminara.
Jimin como siempre, estuvo a su lado al igual que su madre y su mejor amigo, ellos trataban de hacerlo reir, de hacerle olvidar por un momento su enfermedad. Pero lamentablemente la salud del omega empeoraba cada dia mas, si Yoongi no consigue pronto un donante ya seria demasiado tarde y ni su alfa podría salvarlo.