Mary On A Cross

7 years old

- ¿¡Esa es tu forma real, en serio?! - Aún con emoción Yuji se acerca a la maldición para observar mejor, desde niño las criaturas monstruosas le fascinaron sin alguna razón o recuerdo al que pueda asociar.

Sukuna seguía en silencioso, ¿Era por asombro? No, eso pasó ya hace algunos segundos y su silencio ahora era pensativo, más que nada sobre sus propias acciones, por lo cual mientras el mocoso daba vueltas a su alrededor, repasó los hechos, inicialmente lo trajo para torturarlo un rato en su dominio por diversión, pero ese sentimiento se ha ido.

El silencio era extraño, ni era incomodo pero tampoco era cómodo, claro Yuuji aun daba vueltas fascinado como un niño pequeño que ignoro que al entrar al dominio sus audífonos se habían destruido por caer encima de estos y la música seguía pero ninguno se dio cuenta hasta que la melodía y voz cambiaron por otra.

"Once I was seven years old, my momma told me.

Go make some friends or you'll be lonley"

Igual que la primera vez el sonido y la voz, ahora distinta a la que causó dicho conflicto, era mas suave más calmada, tal vez un poco melancólica, esta saco del trance de Yuuji con respecto a observar el monstruo que era Sukuna.

- Esa suena distinto -

- No todas las canciones, suenan iguales idiota -

- ¿Me acabas de llamar idiota? -

- Sí, te dije idiota -

Sukuna estaba tentado a golpear al chico pero también tenia una curiosidad para con respecto esa cosa moderna que emitía música.

Yuuji en cambio estaba absorbido por la canción, hacía tanto que no la escuchaba que pensó que tal vez la borro pero al oírlo otra vez se vino a la mente la primera vez que la escucho mientras veía unos videos en la vieja laptop de su padre y su abuelo estaba vigilando que no viera nada indebido así Wasuru estuviera hasta arriba de alcohol.

"¡Ja! Que tontería, Yuuji no le creas por más que alguien parezca tenerlo todo y decir que es feliz es una cruel mentira que se dicen para si mismo - un Wasuru con las mejillas rojas por tanto tomar le decía/casi gritaba su nieto - si con todo lo que esa canción de porquería bastará tu abuela no habría necesitado colgarse de ese árbol"

Era un niño en ese momento y ese fue su primer conocimiento sobre el suicidio, nunca le dijo a su padre sobre esa charla en particular pero ese pensamiento volátil que cruzó por su mente hizo girar los engranajes de su cerebro más rápido de lo que su lógica pudiera entender causando que soltara a la maldición la pregunta que si mira en retrospectiva fue la que cambió toda su vida.

- Oye Sukuna, ¿Qué opinaba la gente de tu época sobre el suicidio? - fue directa, sin ninguna pausa o algun silencio dubitativo, solo una pregunta nacida de un recuerdo infantil combinando con una extraña curiosidad hacia el ser milenario ante él y tenía una mirada algo rara en su rostro como si no entendiera la palabra - Ya sabes, el quitarte la vida.-

Incluso el propio Sukuna quedó sorprendido no solo por la pregunta, sino porque el mocoso en serio estuviera preguntando de todas las personas a él, una pregunta un tanto curiosa que le hizo olvidar por completo su curiosidad del aparato moderno.

- ¿Suicidio? ¿Es su nombre moderno? Hmm, algunos lo veían como un acto noble luego de cometer alguna falta, otros como una forma de pagar una sus faltas, algunos incluso lo veían como algo piadoso - Su respuesta fue curiosa, hablaba como si ver o hacer eso fuera su pan de cada día - recuerdo llegar a un pueblo donde había un árbol con una mujer colgada, al parecer su marido descubrió su infidelidad y se colgó.-

- ¿Cómo puedes saber eso? -

- El marido me llamó para quitarse a la maldición que indirectamente su mujer le creo, era una cosa horrible, era como ver a un perro faldero deforme arrastrarse tras el hombre y solo decía "querido" -

- ¿Maldigo al hombre con que siempre estaría atado a él como un perro faldero? -

- Sí, era asqueroso el cómo se aferró a ese hombre -

La canción seguía sonando como un ruido blanco, mientras Sukuna contaba sobre ese exorcismo pero caminando hacia el trono del rey.

- ¿Hay alguna razón por la cual recuerdes está más que otra? -

- Creo porque la primera vez que pensé seriamente en volverme una maldición, sabía la teoría a medias y no sería una maldición patética, junto a mis conocimientos sabía que podría apoderarme de un poblado y tener una buena vida - dice Sukuna al llegar a su trono y toma su kiseru para fumar.

- Espera... ¡¿Decidiste volverte una maldición por tu propia cuenta?! - Dice Yuuji sorprendido por la revelación.

- Sí, no grites por cierto mocoso idiota, gracias al marido supe todo el proceso que pasó su mujer luego de colgarse y ser descubierta, por lo cual solo necesitaba algo en mayor en escala - la maldición comenta y cuando estaba por usar sus manos inferiores para preparar el kiseru, lo sintió, el como su cuerpo se volvía pequeño, como sus brazos se retraen hacia su costado hasta desaparecer, en un parpadeo volvía a tener la forma de su vasija - tch, necesitó que comas más dedos mocoso, mínimo quiero estar en mi dominio pareciendo yo y no tú, aunque al menos no me quejo del tamaño inferior, aunque esa cosa de metal no sé porque te la pusiste - comenta casual mientras recoge el objeto caído para fumar.

Yuuji esta por decir algo cuando Sukuna termina mencionando su piercing haciendo que se ponga colorado hasta las orejas por la vergüenza de que alguien supiera eso causando que se calle, en cambio solo mira como la maldición enciende el kiseru y da unas caladas para luego expulsar el humo.

- Como decía, al ya tener una idea puse en marcha mi plan, me dirigí a un pueblo donde me contrataron con regularidad, era muy querido por ellos, llegue en una noche de festival, muchos fueron directo a recibirme, los rebane con mis tecnicas, me asegure lo mejor que pude de no cortar ninguna cabeza, quería que me odiaran lo suficiente para darme poder al morir - da otra calada y expulsa el humo antes de seguir su relato - queme todo a mi alrededor, a los niños por esa vez fui misericordioso y les di una muerte rápida, pero cualquier joven me asegure de que se fueran de este mundo odiandome - su mirada está un poco ida recordando esa noche como si hubiera sido ayer - deje vivo a un maestro de Jujutsu viejo, para que llenó de rabia, acabará con mi vida, lo hizo muy bien, también creo que se dio cuenta porque lo elegí, su mirada de terror cuando acabo con mi vida fue divertida - al recordar eso la maldición no pudo evitar reír.

- Y de ahí te volvis.... -

- Trame algo del mundo moderno y enseñame como usar esos aparatos y te contare como sigue mocoso - dice la maldición mientras expulsa al mocoso de su dominio rebanando su cabeza, si quería conocimiento del mundo moderno debería chantajear a su vasija, después de todo, ¿Cómo sabrá el mocoso si está mintiendo o no?