Capítulo 15.

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** 2 años atrás ***

- Te arrepentirás de todo esto, Alex... - dice el desde el suelo, su brazo sangraba y cada vez se debilitaba más.

- No creo, Marcus - digo cerrando la puerta de aquella casa en California.

- Estúpido que eres, hiciste todo esto sólo por una chica, caíste bajo, pensé que te había criado mejor hijo.

- Yo no soy tu hijo, esto lo deje de ser en el momento que tu mataste a mi madre.

** Presente **

Habían pasado exactamente una semana desde la noticia, no hablaba con nadie que no fuera Michael, me encerraba en mi cuarto y algunas noches no cenaba. No tenía miedo de nada, más bien tenía miedo de algo, algo que me dolería con el alma. Que Marcus tocará a Ariana, era lo más apresiado que tenía y no quería que el la encontrara, me vigila y lo sé.

Desde la noticia no eh hablado con ella, me ha llamado e incluso perseguido por el Instituto, la e ignorado como el propio idiota, pero prefiero mil veces que la lastime sin tocarla, a que Marcus la lastime. Por qué de algo si estoy seguro, sí Marcus se entera de que ella existe y es importante para mí, le hará daño, la lastimara, no sólo mental, también físicamente y es capaz de todo y lo que más me aterra, es que pase a los estemos, específicamente, que la viole.

Me prometí a mi mismo que no dejaria que le pase nada, y si eso llegase a pasar, no me lo perdonaría, que ella pase por el resto de su vida yendo a un psicólogo por mí culpa, jamás lo permitiría. Se que ella debe estar en estos momentos confundida por no haberle dado ninguna explicación razonable de mí forma de actuar, no se que decirle, y como soy un cobarde, decidí alejarme.

Volviendo al presente, hoy es Martes, nueve de junio de dos mil quince , se puede decir que ya no queda nada para verano, por parte estoy agradecido que ya terminen, esas benditas evaluaciones. Mis padres ya se largaron gracias a Dios, por asuntos de trabajos y llegan dentro de un mes. Ahora me encontraba en la cafetería con Michael que me estaba diciendo sobre cosas de Matemática, si el muy estúpido le va bien en matemática, un perfecto promedio de diecinueve, claro nadie lo sabe menos yo.

- ¿Alex? ¿te encuentras ahí? - Pregunta Michael molesto, levantó la mirada de mi comida y lo encuentro a el con una hoja en la mano, puedo apostar que es de ejercicios.

- Sí.

-¿En serio? ¿Qué fue lo último que dije? -dice este levantando una ceja.

- Que el profesor de Matemática dio mal los últimos resultados. - dije tranquilamente, gracias a Dios que le hize caso en lo último, por que sino estuviera inventando.

- Umm, te pasa algo, ¿Sigues...? - lo interrumpo

- Cierra la boca. - el suelta un suspiró y se rasca la nuca.

- Alex... Esto está mal, estas más fastidioso que antes, no toleras a nadie, no puedo hablar porque me interrumpes. - la furia se apoderó de mi cuerpo, esto era malo, cuando me molesto nada sale mal, mis poderes reaccionan por si solos.

- ¡¡ALEX CUIDADO!! - ¿Qué? Mierda, tenía cuchillos en el aire y justo al frente de la cara de Michael, levanto la mano derecha y muevo los cuchillos en dirección contraria, lo dejo en su lugar y me volteo a ver a Michael con cara de estúpido, típico.

- ¡Si te molestaba mi opinión me lo fueras dicho! ¡No era para que me matarás! - dice furioso.

-¡¡CÁLLATE!! - Digo tratando de calmarme. - Sólo vete de una buena vez.

Sorpresas ocultas [ Editando ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora