Necesito 400mg de cafeína por día, para seguir adelante, para no mirar atrás, mi corazón late rápido, como si fuera a estallar, es un veneno que me mantiene vivo, me hace olvidar el dolor, la tristeza y el vacío.
Aunque sé que es peligroso para mi corazón, voy al borde del filo, no puedo parar, porque sin ti, mi vida se desmoronó, cuando te fuiste, todo se volvió gris y monótono, y ahora busco en la cafeína, la fuerza para seguir.
Pero a veces, siento que no es suficiente, que necesito más, que mi cuerpo ya no responde, que aunque tomo 500mg, no puedo revivir, el amor, la pasión y la felicidad que contigo viví.
Aún así, no puedo olvidarte, no puedo superarte, porque aunque te fuiste, me dejaste una huella imborrable, me enseñaste a amar, a cantar, a reír, me diste la vida, que ahora sin ti, no puedo sentir.
Mi corazón anda con falta de ritmo, desde que te fuiste, no ha vuelto a ser igual, y aunque la cafeína lo acelera, ya no hay nada que pueda hacer.
Creo que al final, eres la dosis letal, la que me destruye por dentro, la que me hace recordar, el amor que se fue, la que me hace sentir, que sin ti, no hay nada que valga la pena.
Pero aunque mi corazón sufra, aunque mi cuerpo ya no responda, sé que debo seguir adelante, que debo vivir, aunque sea sin ti, que debo encontrar, un nuevo camino, que me haga sentir, que la vida aún tiene sentido.
