𝐄𝐑𝐎𝐒 [Karchez X Tú]✓

ep.30

Después de algunas horas bastantes pesadas y de un dolor en mis piernas por saltar tanto decidimos salir de aquel lugar

Estábamos a punto de salir hasta que me dí cuenta que había olvidado la botella que me había regalado

—Esperame aquí.— pedí y me miró sin entender —Olvidé algo, ya vuelvo.—

Karchez solo asintió con una pequeña sonrisa y volví a dónde había estado entrenando, justo ahí estaba mi botella

—Pero mira que linda, yo pensé en quedarmela.— otra chica tomó la botella antes de que yo lo hiciera

—¿Disculpa?.— cuestioné sin entender, ella solo rió un poco —¿Te conozco?.—

Su cara se me hacía un tanto conocida pero no podía reconocerla, en algún lugar la había visto

—No tenemos el gusto de conocernos personalmente.— aclaró, yo estiré mi mano para que me diera la botella pero ella negó —Soy Abby.—

Ahora me cuadraba, la había visto pocas veces en clips y con algo de maquillaje, igual me sentía mal por no reconocerla en primer lugar

—Si me dieras mi botella te diría que es un gusto.— me crucé de brazos y ella volvió a reír —Bueno, creo que tú y yo no tenemos nada bueno que hablar, quedatela.—

Me dí la vuelta para irme pero ella rápidamente se acercó a mí para poner su mano en mi hombro

—¿No te preguntas que hago aquí?.— murmuró

—Realmente no me importa.— exclamé sin darle importancia —Tal vez vienes a entrenar.—

Ella también estaría en la velada, quizás el mundo era tan pequeño como para que acabaramos en el mismo gimnasio

—Psique alejate de él.— se acercó a mí oído —Es lo mejor para ambos.—

Me alejé y la miré sin entender, ella solo tenía una sonrisa arrogante

—Estás loca, métete en tus asuntos.— dije y me alejé

Caminé de nuevo a la entrada, ahí había dejado a Karchez. Antes de que pudiera llegar aquella chica de puso delante de mí bloqueando mi camino

—Solo está jugando contigo.— y seguía —¿Acaso no tienes dignidad?.—

Fruncí el ceño, debía fingir que no sabía a lo que se refería pero su actitud empezaba a molestarme

—Él no juega conmigo, déjame en paz.— dije intentando avanzar de nuevo pero seguía impidiendomelo

—Biyin le ordenó manipularte.— exclamó

¿Debería sentirme agradecida porque me lo dijera? Sus intenciones no eran buenas y si yo no lo supiera sin duda me habría desmoronado

—Mentiras.— hablé, quise seguir en mi papel

—Eres la burla de todos dentro del mundo de los streams.— atacó

—Estoy empezando a creer que me tienes envidia.— suspiré cansada —Para que me sigas atacando intentando que me aleje de alguien es porque me estás dando suficiente importancia ¿acaso eres mi fan?.—

Ví como hizo una mueca de molestia y reí

—¿Soy la única que te ha dicho lo de Biyin y así me tratas?.— se cruzó de brazos

—Es que es mentira.— sabía que no lo era —Y si fuera verdad ¿por qué me lo dirías? claramente tus intenciones no son buenas.—

Ambas manteniamos la mirada fija en la otra

—Como sea, debo irme.— avisé, al parecer ella me dejaría pasar por fin

—Pronto todo lo que quieres me va a pertenecer.— indicó y la miré confundida —Deberías estar preparada.—

—Ya veo que eres peor que una fan.— me burlé un poco —No entiendo muy bien que es lo que quieres pero está bien, quitamelo.—

Ella simplemente sonrió arrogante y me dió por fin mi botella

—Es mejor que no lo entiendas, cuando lo pierdas será una sorpresa para ti.— dicho eso se alejó

Empezaba a creer que este encuentro había sido una locura completamente, me sentía atacada sin hacer nada.

Seguí mi camino y pude ver a Karchez recargado en la pared esperándome

—Tardaste mucho.— sonrió cuando me vió —¿Todo bien?.—

—Si, solo no encontraba mi botella.— mentí riendo un poco

Empezamos a caminar de nuevo, sentía que no podría decirle lo que acababa de pasar, quizás no sería importante para el futuro

—¿Te invito a desayunar?.— ofreció

—Es mi turno de pagar.— exclamé —Así te agradezco por la botella, es muy linda.—

—No puedo negarme a una invitación de tu parte.— dijo, sonaba alegre

Seguimos caminando un rato mientras yo no hacía más que quejarme por el dolor que sentía con cada paso, estaba tan adolorida por el ejercicio

—¿Puedes parar de quejarte?.— se burló y negué

—Creo que lo mínimo que puedes hacer es escucharme.— dije riendo un poco

—Te quejas como si pudiera hacer algo para calmar tu dolor.— rió y se detuvo —¿O es que quieres un masaje?.—

Sentí mis mejillas arder y rápidamente le dí un golpe, él seguía riendo

—Es triste que mientras yo me muero de dolor tú solo te burles.— dramaticé

Ví como acomodó la pequeña mochila que traía con sus cosas y se agachó frente a mí, yo lo miré sin entender

—Sube, te llevaré.— exclamó y negué rápidamente

—Estaba bromeando, esto no es necesario.— dije intentando que se levantara

—Vamos Psique, este transporte solo es exclusivo para ti.— intentó convencerme —Así llegaremos más rápido a desayunar.—

Sonreí, esto era un lindo detalle de su parte y yo debía aprovecharlo

—Solo esta vez.— aclaré subiendo a su espalda

Él se levantó conmigo encima y se acomodó mejor para empezar a caminar. Yo simplemente me aferré a su cuello para no caerme, sentía bastante paz estando con él