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AVISO, USO DE LÓGICA GACHA, ESTÁN EN ITALIA PERO IMAGINEN QUE EN ITALIA TODOS HABLAN ESPAÑOL.

-Iván se bajo del auto con un bolso, un poco harto de escuchar a Rodrigo, su mejor amigo, quejarse de cualquier cosa que ocurría.-

ㅡCallate un rato, Ro, fue tu culpa...-Pateó una pequeña piedra.-Ahora por tu culpa estamos aquí, en medio de Italia, en una escuela militarizada.

ㅡA vos se te ocurrió quemar ese auto, no a mi.

ㅡ¡Pero yo no sabía que era de la vecina, vos si!

ㅡ¿Te crees qué lo se todo? ¡no se todo, no soy tonto como vos pero no por eso voy a saber todo lo que ocurre!-Le lanzo su bolso.-¡Peleemos!

ㅡ¡Bien, te golpeare tan fuerte que llorarás!-No, no era capaz, pero Rodrigo si.-

ㅡ¡Toma, salame!-Se tiro arriba suyo comenzando a golpearlo mientras Iván trataba de apartarlo.-

-De repente un hombre vestido como un general apareció y los separo a los dos, tomandolos de una oreja y metiendolos dentro de la institución. Otro hombre, vestido como militar, tomo los bolsos y se dirigieron hacía una habitación, a la que minutos después, los llevarían.-

ㅡBien... Así que, ustedes son Rodrigo e Iván... Buhajeruk y Carrera, aquí, o cadetes.

ㅡSi... Somos nosotros, y nos enviaron aquí por error, ¿nos podemos ir?

ㅡClaro que no, ahora pónganse los uniformes que están en sus camas. Recuerden esto para siempre porque no volveré a repetirlo, esto es una escuela militar, y van a tener que aprender a comportarse o les puede ir muy mal, aquí nadie regula los malos tratos, y si hace falta, el látigo sigue en mi oficina. Aquí no habrán postres, ni televisión, o agua caliente para que se bañen, se conformaran con la vida que llevarán desde ahora... Y nada de ver señoritas a escondidas.-Se fue de la habitación, caminando como si fuera un soldado.-

ㅡEsta loco...-Cerró la puerta con seguro.-Bueno, ya escuchaste al viejo, vestite.-Comenzo a ponerse su uniforme, una extraña camisa color celeste nunca antes vista en su vida de chico problemático, además de una corbata azul marina. Abajo tenía un pantalón color negro y unos zapatos del mismo color.-Parezco policía.

ㅡSolo los policías de Estados Unidos son así, Iván.-Rodrigo tenia el mismo uniforme, solo que en vez de ponerse el pantalón, se puso un short de arriba de la rodilla en un color azul marino.-Yo elegí el short.

ㅡTe subirán como perras.-Se recosto en la cama.-Me pegaste muy fuerte... Sos un bruto.

ㅡLo siento.-Rió bajito.-

ㅡCon el ambiente homo erotico que hay en estos lugares, todos se te van a apoyar, tené cuidado... Recordá que esta escuela es exclusiva de hombres, quizás cuantos años llevan aquí encerrados, además ya escuchaste, no permiten ver a pibas, o sea que deben estar desesperados por tener sexo, y tus piernas son demasiado lindas, ponete algo más.

ㅡCallate...-Miro sus piernas.-Si son lindas, pero yo se defenderme.

ㅡ¿Ah si?-Se levantó para subirse a la cama de Rodrigo y acercarse a su rostro.-¿Y si yo te robo un beso? no te defendes.

ㅡSi me das un beso te rompo la cara, eso quedo allá en Bahía Blanca...

ㅡAjá, te desesperaste tanto que me hiciste quemar el auto.

-Había una peculiar historia en como habían terminado acá. Un día Rodrigo se metió al auto de la vecina junto con Iván, y dentro el ambiente se calentó un poco, por lo que sus cuerpos reaccionaron y comenzaron un beso muy profundo, el problema llego cuando alguien los vio, solo por la vergüenza que sintieron, salieron, y para desviar la atención, quemaron el auto y se fugaron.-

-Una campana comenzó a sonar, y ellos no le dieron importancia, se quedaron hablando de cosas sin sentido en la cama.-

ㅡ¿Y entonces? solo por ser tu mejor amigo... ¿No me darías un besito?

-La puerta comenzó a sonar, alguien la tocaba de manera desesperada. Abrieron la puerta, dos militares estaban allí, y sin decir ni una sola palabra los tomaron del brazo y los llevaron a una sala llena de otros cadetes.-

ㅡSe que es el primer día de muchos aquí... Y quiero que sepan que desde hoy la vida no será nada fácil, mucho menos para los más problematicos... Por algo que haga uno solo, todos pagaran, esto es el maldito ejército. ¡Y ahora aunque me odien, van a aprender lo que es el trabajo, el rigor y el cansancio!-Hizo una pequeña seña con sus manos y se retiro con los demás militares.-

-Todos los cadetes que anteriormente mantenían una posición rígida, se relajaron y comenzaron a hablar entre ellos, a jugar o a escuchar radio.-

ㅡDisculpa... ¿Quién era ese?-Rodrigo pregunto a un chico alto con músculos.-

ㅡEl es el comandante... Y lo mejor es que le hagas caso en todo, porque sus castigos son duros... Bonitas piernas por cierto.-Sonrió.-

ㅡAy.-Hizo una pequeña mueva de asco y volvió con Iván.-Tenes razón, están desesperados... ¿Podes creer que me dijo bonitas piernas sin ningún tipo de descaro?-Suspiro.-Nadie aquí esta con short.

ㅡTendré que cuidarte... ¡Oigan todos ustedes, manga de inútiles, este chico de aquí no esta solo, y aunque tenga los mejores muslos en los que nos podamos ahogar, no quiero que le toquen ni un solo pelito!

-Todos lo miraron de manera extraña y comenzaron a amenazarlo.-

ㅡMira nuevito, es el primer afeminado que nos llega en los últimos tres años, así que o te quitas del camino o te golpeamos y no te compartimos al afeminado.

ㅡAfeminado sera tu abuelo, el viejo tieso hijo de puta ese.-Murmuro Rodrigo.-¡No soy de nadie, así que déjenme en paz!

ㅡ¡Yo apoyo al afeminado!-Un chico incluso más alto y musculoso que el primero se puso del lado de Rodrigo, era algo moreno, de cabello rubio muy corto y sus ojos eran verdes, era lindo, pero se veía idiota.-Así que no toquen a ninguno de los dos.

-Todos los demás dejaron de hablar y se dieron la vuelta, se veía que este chico era el líder.-

ㅡTranquis, ahora ya no les van a hacer nada... Y vos no sos afeminado, solo usas shorts muy cortos... No es muy recomendable aquí, estos quieren meterla a toda costa... Yo que vos me cuidaría hasta de tu amiguito este.

ㅡ¿Y de vos?

ㅡDe mi no, estoy comprometido, tal vez soy el único que entro aquí por decisión propia... Bien, yo iré a entrenar, si quieren vayan a su habitación, no les dirán ni harán  nada.

ㅡGracias... ¿Cual es tu nombre?

ㅡDavid.

ㅡGracias, David... Vamos Iván, vamos.-Tomo la mano de Iván y se lo llevo a la habitación cerrando con seguro como antes.-Iván, tenemos que salir de aquí... Están completamente desquiciados.

ㅡSi... Hay que escapar de alguna manera... Ya se.

ㅡ¿Ya sabes qué?

ㅡEstoy seguro de que el comandante esta en contra de... No, mejor no.

ㅡ¿Por qué no? ¡decí lo que tenias que decir!

ㅡNo, solo... Preparate porque según este calendario en una hora comienza la primera clase.

ㅡSera un largo día...

Militarizzato. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora