Family﹕ | Twice ﹗

ᯤ﹕06

Empezó a caminar con el arma colgando de sus dedos. Se escucharon ruidos desde el baño, donde había matado a Chaeyoung.

Tiro el arma al suelo y fue hasta el baño. Abrió la puerta.

Allí estaba, Mina, llorando desconsoladamente al lado del cuerpo de la menor. Su pelo estaba despeinado, su cara roja, hinchada, mojada, todo por el llanto, sus ojos estaban rojos, y de estos salían millones de lágrimas, su cuerpo temblaba mientras con sus manos tocaba el cadáver de la que fue su amiga gran parte de su vida.

Mina se acorraló contra la pared al ver a Jeongyeon, solo se acurrucó en ella misma y lloró, dejando a su cuerpo temblar libremente y a sus sollozos ahogados salir.

Antes de que pudiera siquiera hablar Yoo la tomo del pelo y estampó su cabeza contra el lavamanos, la menor lanzo un grito de dolor, seguido de lamentos y súplicas, que a la mayor parecieron no importarle.

Decidio hacer esto hasta que la otra muera.

Las súplicas, los lamentos, lo gritos y los sollozos cesaron, pues ya no había nadie que los produciera, nadie vivo.

Jeongyeon aventó el cuerpo de Mina junto al de Chaeyoung, dejando allí dos cuerpos de dos personas que se amaron incondicionalmente, y peor, amaron a Yoo, ¿Quien imaginaria que ella las estaría matando ahora?

Salió del pequeño baño para darse cuenta de que el arma ya no estaba allí. Empezó a caminar con un único objetivo, encontrar a quien había tomado el arma, aunque ella ya sabía quién era, ya que era la única que quedaba con vida, Park Ji-hyo.

La mayor solo abrió la puerta de la habitación de Park, y allí estaba, era muy obvia para esconderse.

Jihyo tenía el arma, sin embargo, parecía no saber usar una.

- ¡¿Que acabas de hacer?! ¡¿Que mierda acabas de hacer?! ¡Dime! ¡¿Que hiciste?! - Gritó, con odio, Jihyo.

Sin embargo, no recibió una respuesta.

- ¡Acabas de destruir la maldita familia que me tomo siete putos años construir! ¡Acabas de mandar a la mierda toda mí vida! ¡¿Te das cuenta de lo que hiciste?! ¡Estás demente! ¡Eres una loca de mierda! ¡Yo te amaba, las amaba a todas! ¡¿Que se supone que deba hacer yo ahora?!

Jeongyeon sigue sin responder.

- ¡Mierda! ¡¿Por qué no respondes?! ¡¿No te arrepientes de nada, sinvergüenza?!

- No, no me arrepiento - contestó Yoo, después de un tiempo

- ¡¿Cómo puedes?! ¡Explícame porque no entiendo cómo haces para no sentirte arrepentida después de asesinar a tu familia!

Jihyo estaba llorando desconsoladamente, no sabía cómo estaba hablando, estaba llena de sangre, lágrimas, vómito. Su cara estaba hinchada y roja, al igual que sus ojos, su mirada irradiaba odio y dolor. Park tuvo que ver morir a la que fue su familia por 7 años, a sus siete amores, a las siete personas que más amaba, sin embargo, la octava parecía haber enloquecido.

- No lo sé, ¿Ustedes se arrepintieron cuando no se preocuparon en absoluto por mí cuando la empresa me sobreexplotaba? ¿Ustedes se arrepintieron cuando nadie tomo en serio mí ansiedad? ¡No! ¿O si lo hicieron? No parecía, o al menos no hicieron nada al respecto ¿Al menos se dieron cuenta? ¿Fui muy poco obvia? A mí me parece que no, les di a entender de miles de formas y hasta les había contado y explicado todo, ahora ¿Por qué no me ayudaron?

Jihyo no respondió, solo volvió a llorar.

- ¿Que te pasa? ¿No me dijiste que hable? - preguntó Jeongyeon

Ella siguió llorando.

Yoo intenta recuperar su arma acercándose a Park y haciendo un movimiento brusco para obtenerla, sin embargo Jihyo parecía aferrarse a ella, cómo el último recuerdo de su familia.

La mayor se abalanza sobre la otra chica en busca de su arma, golpea sus brazos, su cara y su pecho hasta que consigue quitarle el arma de sus brazos.

Antes de que Jihyo pueda formular una palabra Jeongyeon disparó a su brazo, los gritos inundaron la habitación, Jihyo gritaba de dolor y lloraba a mares, Yoo solo se quedó mirándola fijo, cómo esperando a que haga algo.

Park se agarraba el pecho buscando aire y gritaba en busca de ayuda, obviamente esa ayuda nunca llegó, debido a que Jeongyeon decidió disparar en su pecho repetidas veces antes de que esta pueda seguir gritando.

- Te amé, Jihyo

Los gritos cesaron, el llanto paró y la sangre se dejó de esparcir por la habitación, Park Ji-hyo había muerto, al igual que el resto de las chicas.

¿Quien podría imaginar que está chica con la que tanto compartieron acababa de matar a todas estas chicas? ¿Quien imaginaria que Yoo Jeongyeon mataría a lo que es prácticamente su familia? Nadie, ni ella misma, ella no sabe porque lo hizo, simplemente enloqueció, la forma en la que la empresa la sobrecargaba y no la dejaban vivir su juventud, cómo no les importaba su ansiedad, trabajos extra, todo la agotó.

Hasta su familia.