Criando un bebé en el Apocalipsis

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Li Ran se tocó reflexivamente el estómago y dejó escapar un largo suspiro. La barricada ya había sido instalada. A nadie se le permitía pasar, ya fueran humanos o zombis.

Los dos se miraron consternados.

De repente, un zombi se acercó a ellos.

Afortunadamente, el soldado estaba muy alerta. Rápidamente mató al zombi con un golpe de cuchillo.

Luego, dijo con un tono serio: "¿Qué debemos hacer? ¡No me quedan muchas balas!"

Un grupo de personas rodeó la barricada, incluidos zombis. Desesperadamente querían pasar.

Uno de los zombis atacó a un hombre. Le dio un mordisco a la espalda del hombre. En un instante, el cuerpo del hombre se congeló y comenzó a temblar.

No sintió dolor porque el miedo lo abrumó.

Los ojos del hombre estaban llenos de desesperación. ¡En un ataque de ira, agarró al zombi que lo mordió y lo golpeó!

¡Después de eso, agarró su cabeza con fuerza y ​​la estrelló contra el suelo!

Cuando terminó, el hombre trató de romperse la cabeza, pero tuvo éxito. Empezó a jadear pesadamente y se ahogó en la ira.

Luego, el hombre se levantó lentamente y miró hacia atrás. Sus ojos se encontraron con los de Li Ran y también notó al soldado a su lado.

Corrió hacia ellos de una manera aterradora.

Los ojos de Li Ran se abrieron. ¿Cómo sucumbió el hombre al virus tan rápido? Incluso el niño pequeño no...

Justo cuando Li Ran estaba a punto de alejar al soldado, ¡el hombre corrió detrás de Li Ran!

El hombre abordó a otro zombi que Li Ran no conocía y rugió: "¡Mataré a tantos como pueda! Ya estoy infectado de todos modos. Mi muerte es inevitable..."

Agarró el cuello del zombi y le aplastó la cabeza contra el suelo, tal como lo había hecho antes.

Se podían ver lágrimas cayendo de sus ojos. Todo lo que quería era vivir.

El soldado miró al hombre y agarró el brazo de Li Ran.

Necesitaban retirarse. Aquí solo quedaban unas cien personas. Todos ellos estaban tratando desesperadamente de atravesar la barricada hasta el punto de romper el alambre de púas.

Sin embargo, las personas que ya habían pasado comenzaron a trabajar juntas y comenzaron a construir más barricadas. Se negaron a dejar salir a nadie más y rodearon el lugar.

El soldado entrecerró los ojos.

"Hay dos soldados con armas allí. Si todos los civiles fueran evacuados, podríamos acabar con los zombis en poco tiempo. Pero ahora, parece que los zombis se están mezclando con la multitud".

"¿Sería posible para ti comunicarte con ellos? El problema es la gente de fuera. Se nota con solo una mirada", dijo Li Ran en voz baja mientras fruncía el ceño.

Los dos estaban en una situación muy mala. Sería aún más peligroso si se mudaran a un área llena de gente.

"No me queda mucha energía. ¿Deberíamos ir a otro lugar? Esta es un área de francotiradores, por lo que podríamos lastimarnos accidentalmente. Será difícil acercarse a los otros soldados", dijo el soldado con impaciencia.

Li Ran miró la barricada hecha de alambre de púas. Puede ser difícil para un civil promedio pasar, pero no para un soldado entrenado.

"No te preocupes por mí por ahora. Tienes que matar a los zombis lo antes posible. De lo contrario, incluso el ejército podría ser aniquilado".

"No puedo simplemente dejarte. Si algo sucede, no podrás manejarlo".

El soldado se negó firmemente.

Tenía una misión, que era proteger a Li Ran y esa era su máxima prioridad.

La situación parecía sombría.

"No podemos seguir así. Me esconderé allí y esperaré a que regreses.