Campamento de Ángeles y Demonios

Capítulo 1: El ángel se va de casa

⚠Pequeña advertencia⚠: Pueden haber algunos cambios en las personalidades y aspecto físico de los chicos, además de alguna que otra cosa absurda y sin sentido. 🤣

Pero esto es un fanfic niñx, tómalo o vete al diablo 🤡 😂 

Pido perdón por cualquier falta de ortografía, me dió paja revisarlo. 🤷‍♀️🙇‍♀️

Ahí estaba yo, un ángel de élite perdido en medio de un frondoso y asqueroso bosque y buscando un maldito campamento, famoso por ser un lugar en el cual no podías entrar sin ser invitado.

Llevo caminando aquí alrededor de tres días gracias a mi prontamente ex mejor amigo tonto "Ta Nannakun", quien me indicó que solo siguiera hacia el sur y que por nada del mundo cambiase de rumbo.

Pero tenía un pequeño GRAN problema...

-¡MALDITO SEAS TA IMBECIL CEREBRO DE PAJARO!-

Anteriormente, Ta me dejó un "mapa" con indicaciones "precisas" según sus propias palabras; resulta que su maldito mapa es un dibujo mamarracho que parece haber sido hecho por un niño de 5 años ¡Estúpido Ta!

¿Pero que otra cosa podría hacer más que seguir el camino indicado en ese dibujo todo fofo? Volar definitivamente no era una opción, sería rapidamente descubierto y de nada valdría todo este viaje. ¿Quíen lo diría? un ángel de la realeza prófugo de sus responsabilidades, buscando peligros lejos de casa.

Sin embargo, estar en cualquier lugar es mucho mejor que estar en mi "hogar dulce hogar". Ahora déjenme presentarme; mi nombre es Barcode y soy hijo de uno de los arcángeles mas poderosos e importantes que habita el jodido cielo, hijo del rey para ser preciso, un rey que también es lider de las tropas celestiales. Mi querido padre desea que yo ocupe su lugar, sometiendome a un duro entrenamiento para que algún día sea yo quien dirija ese ejercito y sea la mano derecha de dios, ignorando totalmente lo que yo deseaba y pensaba al respecto.

Eso no era para mi, lo odiaba. Lo que yo queria era libertad, explorar y conocer el mundo, no estar confinado en el cielo gritando ordenes de aquí para allá y entrenando a los ángeles recien reclutados. ¡Ni hablar! si tuviera que hacer eso toda mi vida, me cortaría yo mismo las alas y caéria hasta el fondo del maldito infierno, entonces, cuando le dije a papá que no cumpliría con su demanda; éste rápidamente se enojó y comenzo con su aburrida charla sobre las "responsabilidades de un ángel" y blah, blah, blah. Porsupuesto que yo, como el ángel super responsable que era, me fuí. Huí de casa en cuanto mi padre se distrajo y cambie un poco mi apariencia para que nadie me reconociera, empezando por mi cabello,  mientras que el resto de ángeles tenía el cabello rubio brillante y ojos color plata, los de alto mando y de la realeza tenían el cabello de un color negro tan oscuro como la noche misma, y ojos azules. Ese fué otro detalle a ocultar además de mi cabello, el cual debo decir, me dolio mucho decolorar, encerio ¿cómo es que los humanos hacen eso todo el tiempo? ¿no les duele el cuero cabelludo? ¿no tienen miedo de quedarse calvos? Yo apenas pude aguantarlo y si mi trasero se salva de toda la situacíon en la que me estoy metiendo, ¡juro por dios que no volveré a decolorar mi cabello!

Oculté el color de mis ojos usando los lentes de contacto color plata que Ta me consiguió en el mundo humano, cambié mi túnica de seda blanca por un overol del mismo color y debajo de este una blusa de mangas largas igualmente blanco, finalmente unas zapatillas ¿pueden adivinar el color?y ¡uala! disfraz completo. Sin la aburrida túnica, mi cabello ahora rubio y los ojos color plata, nadie fuera del reino entre las nubes me reconocería, pasaría desapercibido como otro más de los ángelitos de dios.

Volviendo a donde estaba, seguí caminando durante horas en ese oscuro y feo bosque rodeado de niebla, el cual para ser sincero, daba más asco que miedo; y encerio no quiero ni imaginarme lo que acabo de pisar, cerraré los ojos y seguiré como si nada de eso hubiera pasado mientras voy pensando en las mil y un maneras en las que podría matar a Ta cuando le ponga las manos encima.