Y volvió a suceder.
Había pasados unos días desde que había conocido a la chica de ojos rojos y no podia sacármela de mi cabeza.
Todas las veces que me iba a dormir soñaba con ella para cuando despertara olvidara el sueño. «Así que tiene de gusto soñar con algo y luego olvidarlo», pensé.
Pero me vi en la necesidad dejarlo pasar por hoy ya que se me hacia tarde, era el primer día de clase y no quería llegar tarde. Había preparado todo para hoy, para que saliera a la perfección y justamente me dormía.
«Parece que hoy sera un dia estupendo» exclame sarcásticamente.
Me levante de la cama para hacerla y poder dirigirme al baño para asearme y apurarme, con tiempo que ahora era limitado.
«Tratare de lavarme los dientes lo más rápido que pueda» pensé, mientras sacaba mi cepillo y la pasta de diente y comenzaba a cepillarse estos mismos.
«Me pregunto como seran la gente de aquí» pensé.
Aunque había llegado hace no mucho; habían pasado 2 semanas solamente; no había hablado con mucha gente. Los vecinos eran un poco reservado... más bien la gente.
Mamá me había reconfortado diciendo que había averiguado y encontró un equipo de fútbol, un pasatiempo que todavía conservaba y que me ayudaría a hacer amigos.
Así que opte por no preocuparme, con el tiempo todo se daría y sería con antes.... ¿No?.
-¡¡¡Eliam!!! -grito mi madre desde la cocina-. Ya es tarde, o sales del baño ahora mismo o te dejo -grito, amorosamente.
-¡Ya voy! -respondi escupiendo el agua, terminando de lavarme los dientes.
Ya con los dientes limpios, me cambie y me puse el uniforme. Honestamente esto era algo nuevo para mi. En mi anterior escuela usábamos la ropa que quisiéramos y no había tantas reglas... bueno si habían pero no eran seguidas por los alumnos.
Baje las escaleras y me senté es la sala para ir por mis útiles y prepararme.
Apenas mamá me vio, me trajo una hoja en donde venían las reglas de convivencia y reglas. Si así como dije. «Reglas de convivencia», remarque.
-¿Acaso es el siglo XIX? -comente mentalmente pero parece que lo dije en voz alta.
-Muy gracioso Eliam, pero es una escuela privada- comentó mamá.
-¿Privada? -pregunte confuso. Durante toda mi corta vida siempre he ido a la escuela pública.
-Si, el hospital se encargo de arreglar los tramites para anotarte y que tengas un lugar ahí. -Y lo mejor es que es gratis- grito contenta mamá mientras se alejaba.
-¡Qué! -exclame atónito. Dudaba que en un mundo capitalista se me diera la educación privada gratis sin más.
-Así como lo oíste -respondió mamá. Según tu padre tanto el hospital como el colegio es parte de la familia Stoica.
Sabía que después iba a hacer un millón de teorías y especulaciones de porqué todo les pertenecía,pero parecía tan feliz que pudiera ir a jn colegio gratis.
Aunque la verdad... no la culpaba. Todo hasta el hospital y el colegio le pertenecía a esa familia.
Pude seguir indagando en mis pensamientos con esa familia de gran monotributo, a su alcanze pero mama me agarró del brazo para sacarme a afuera; ya que se hacia más tarde.
-¿Y los otros? -pregunte por mis hermanos quien en todo el día no lo había visto.
-Tu hermana empieza la otra semana y tu hermano todavía no tiene los papeles completados -respondió.
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El Color de tus Ojos
VampirosTras el ascenso de su padre, Eliam deberá mudarse a un nuevo hogar en donde le esperaran nuevas aventuras, amistades y mucho más. Sin embargo esas nuevas experiencia se verán interrumpidas por una chica que llamara su atención y robará su corazón c...