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Capitulo 1: César Müller.


Dime qué ésto es un sueño... porqué enserio ansió despertar...


NARRA CÉSAR.

Despertar y darme cuenta de qué no estás aquí... Es lo más doloroso qué me ha pasado...

Extrañó verte fumar en la sala y ver algún documental sobre animales, mientras me dices datos las Hienas o los osos.

Pero lamentablemente ya no estás, y ahora no existe ni tú olor en éste lugar...

Jackeline...

-¿Estás aquí... ?

-... ¿Eh?

La imágen de Alfredo frente a mí me hizo fruncir el ceño, al darme cuenta de qué estaba recién despertando.

-¿Qué mierda... ?-me froté los dedos en las sienes cuando el dolor de cabeza se hizo presente.

-¡César, tienes la junta con el alcalde de Darcius! ¡¿Qué haces tirado en el piso?! ¡Ve a alistarte!-me gritó Alfredo.

Me levanté de... ¿el piso? ¿Estaba tirado en él piso? Aparentemente sí... ¿Qué hacía en el piso? En fin.

Me levanté de el piso, quedando sobre mi pesó, sentado.

-¿Qué tengo qué... ?-le pregunté a Alfredo. Él caminaba de un lado a otro en la sala de el apartamento, ya reconocía dónde me encontraba.

No era capaz de recordar algo o de siquiera ordenar mi mente. Me sentía desubicado y extraño.

-¡La entrevista, por Dios, César!-me grito esté, frustrado por alguna reacción.

-¿Con quién?

Mi mejor amigo se quedó quieto, y puedo jurar haber visto un tik en su ojo izquierdo.

-¡Con. El. Puto. Alcalde! Maldita sea-me volvió a explicar, aún molesto. La vena en su frente era notable y casi parecía querer explotar de rabia, junto con su ceño que poco más y parecía una uniceja...

Espera...

¿La reunión con el alcalde?

Y fue cómo sí tuviera un coete en el culo. Me levanté de golpe de el suelo y miré con los ojos abiertos a Alfredo.

Se me había olvidado la reunión con el alcalde, y de seguro ya eran más de las diez de la mañana.

Me puse muy nervioso y mire a los lados, buscando algo qué ni yo sabía, dejándome llevar por lo nervios.

Tenía la puta entrevista y se me había olvidado, ¡Se me había olvidado! Ésto era importante y sin embargo, se me puto pasó. ¡Maldita sea!

Mi cerebro empezó a andar, y de golpe me fuí a mi habitación mientras me desabrochaba la camisa con nervios.

Sólo a mí sé me olvidaba ésto...

Me bañé, me arregle y le vesti en un tiempo récord, y yá en veinte minutos, estaba en el auto con Alfredo de camino a la alcaldía.

-¿Cómo se te puede olvidar la reunión por la qué, ¡SE SUPONE ESTÁS AQUÍ EN DARCIUS?!

Rodé los ojos pará ignorar a Alfredo, apoyando mi codo de la ventana y viendo por esta a las personas pasar.

ROMANCE IN THE DARK [boyslove]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora