TO CONQUER THE NEVERLAND ||THE PROMISED NEVERLAND FF

LA FUGA DE LA PRISIÓN || CAPÍTULO NUEVE

"¡Buenos días~!" Phil corrió emocionado entre las mesas mientras los demás se preparaban para el desayuno.

"¡Oye, Phil! ¡No corras!"

"¿Esto va aquí?"

"Si, gracias." Miraste la figura de Emma, ​​que miraba a mamá mientras hablaba con los niños más pequeños. "Mark, ¿podrías poner la mesa?"

"¡De acuerdo mamá!" ¿Cómo podía sonreír tan despreocupadamente? ¿Después? Ella debe estar pensando. Era evidente por la mirada de miedo y confusión en su rostro.

Luego miró hacia otro lado y vio a Norman acercándose a ella. "¡Buenos días, Emma!"

Él le sonrió y te diste la vuelta para volver a poner la mesa.

En esta escena, Emma no pudo pronunciar ni una palabra. Ella trató de ahogar un saludo de vuelta, pero no pudo.

Estabas pensando en ayudar a Emma con su actuación, pero luego apartaste el pensamiento. Esa chica recibió un premio Oscar no oficial de los fanáticos por su actuación. Ahora solo necesita usar sus capacidades de aprendizaje al máximo.

Adaptar. Así se sobrevive en lugares como este.

Bueno, así es como sobrevives en cualquier lugar.

"Sonríe, Emma."

—

Ciel, ¿podrías decirme un resumen de lo que saben en este momento? En realidad lo olvidé. Le preguntaste mientras estabas debajo del árbol en el claro, unas horas después de que se llevaran a cabo las pruebas.

<Aviso. Han identificado que el motivo detrás de las circunstancias de vivir en la Casa era todo para mantener su calidad como mercancía; el alimento delicioso, la ropa blanca donde la suciedad puede sobresalir fácilmente y la vida bien regulada. Y como los demonios determinan su calidad como mercancía.>

Eso debe significar que están... escalando lo que está más allá de la cerca en este momento, ¿verdad?

<Sí.>

Sonó el timbre y miraste a Emma y Norman que estaban jadeando desde que se apresuraron a llegar aquí. "¿Eh? Faltan dos niños."

"¿Dónde están Mark y Naila?" Tu preguntaste.

"¡Mamá!" Un niño pequeño con cabello castaño como un hongo corrió hacia la multitud de niños con lágrimas en los ojos.

"¡Mark!" Isabella se arrodilló y le preguntó al niño. "¿Paso algo?"

Él la miró. "¿Qué debo hacer? ¡Me separé de Naila en el bosque!"

"¡Intenté buscar, pero no pude encontrarla!"

Isabella lo sacó. Su supuesto reloj de bolsillo.

Lo abrió y lo dejó así a propósito durante un par de segundos más a propósito. Para asegurarse de que Norman y Emma capten la indirecta.

Miraste al albino. 'Y... él se dio cuenta.'

"Todo irá bien." Ella dijo y tu miraste a tu sonriente cuidadora. "Y/n, te dejo a Mark."

"De acuerdo mamá." Asentiste y te acercaste al niño, quien se acurrucó en tu cintura.

Se puso de pie y se volvió hacia el resto de los niños. "Todos, quédense aquí."

"Mamá..." murmuró Mark.Le acariciaste la cabeza.

"Naila estará bien." Le aseguraste. "Todos sabemos lo buena que es mamá para encontrarnos, ¿verdad?"