2. El chico de la bicicleta

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NARRA PAULINA

EL COMIENZO DE TODO
UN AÑO Y MEDIO ATRÁS...

—Y con ésto, mis queridos amigos. Quiero anunciarles mi ingreso para la candidatura presidencial del país. Muchas gracias a todos por estar aquí.

La sala de conferencias de la empresa de mi padre se llenó de aplausos y vítores después de su gran anuncio a la prensa nacional.

—Señor Meyer ¿Como surgió la idea de ser candidato político? ¿Ya había pensado en eso?

—Señor Meyer ¿Va a colaborar con algún partido en especial?

—Señor Meyer ¿Que pasará con la  fundación Ponder?

Mi padre tenía cientos de cámaras y micrófonos cerca de él bombardeándolo de preguntas acerca de su esperado lanzamiento por la candidatura a la presidencia del país.

Octavio Meyer tiene un amplio currículum que le beneficia como un experimentado candidato al mandato de nuestro gobierno. Estudió programación tecnológica y publicitaria. Tiene una maestría en Recursos publicitarios y varios diplomados más en publicidad, recursos humanos y tecnología.

Tambien conocido como el líder de grupo PONDER, dedicado a la gran industria de publicidad y editorial del pais con más de treinta y cinco años al mando de ella. Ha recibido una cantidad innumerable de reconocimientos por ser una empresa líder en publicidad.

También, creó la fundación "Ponder". La cual ayuda y apoya a cientos de familias de escasos recursos, otorgando becas a estudiantes, apoyo alimentario, vivienda,  personas enfermas y de la tercera edad.

Y por último y no menos importante. Es mi padre. 

Me quedé observando desde el balcón del auditorio como mi padre sabe muy bien lo que hace, sus respuestas congruentes ante las preguntas de la prensa seguramente harán temblar a más de uno de sus rivales.

Este es su momento, es el momento que todos hemos esperado, que nuestro país sea gobernado por un hombre que se preocupa por su gente, por ayudar y dar sin recibir nada a cambio.

Su vista se enfocó en mi y me dedicó un guiño. A lo cual le respondí lanzándole un beso discreto.

Salí del auditorio y caminé por el largo pasillo directo a subir a mi oficina. Subí por el elevador y justo cuando las puertas iban a cerrarse por completo,  una mano alcanzó abrirlas de nuevo para entrar.

—Hola Pau. —Saludó Kenton cortésmente.

—Hola.

—Gracias por parar el ascensor, hermosa. No quería tener que subir seis pisos para llevar a mi oficina. —Inquirió.

—No agradezcas. —Me limité a responder.

Kenton Luna, director del área comercial de grupo PONDER. Un tipo alto, corpulento y de ojos azules que lleva diez años trabajando con mi padre. Se podría decir que es su "mano derecha" , ya que es muy ágil y eficaz en lo que hace. Muy perfecto, según él.

Sus más grandes defectos (que según para él no lo son); es demasiado egocéntrico y seductor.

Efectivamente, este hombre está casi cuarentón y no deja de ir por la vida con sus intentos de ligue con todas.

En lo personal, no puedo soportarlo más de quince segundos porque no para de elogiarme y de hacerme cumplidos.

—¿Tienes algo que hacer, hermosa? Te invito una copa cuando salgas. —Guiñó su ojo.

—Muchas gracias, pero yo paso. No bebo. —Respondí lo más amable que pude.

—Podemos ir por un jugo y subir a los columpios, algo infantil como las cosas que te gustan hacer. —Rió. —Piensalo, princesa. Y te veo al rato.

Sin renunciar a tí ▶️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora