E P Í L O G O

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La mañana de Navidad, Namjoon se levantó después de compartir varios besos largos con Seokjin y abrió la puerta. Por tradición Soobin llamaba para meterse en la cama con Namjoon en las mañanas para acurrucarse y hablar. Tanto Namjoon como Seokjin vestían pijamas y batas y sus espaldas estaban apoyadas en el cabecero cuando oyeron un golpe tímido en la puerta.

—¿Papá?

—Entra Soobin — Namjoon dijo, dando a Seokjin una vacilante mirada rápida. Seokjin sonrió y miró la puerta abrirse lentamente. La cabeza de Soobin apareció por primera vez.

Sus ojos se hicieron enormes al ver a Seokjin en la cama.

—¡Seokjin! estás en la cama con papá —exclamó Soobin, afirmando lo obvio.

—Sí y estamos esperándote — Seokjin sonrió al niño que le había robado su corazón tanto como lo había hecho su padre.

Namjoon abrió los brazos y un pequeño tornado voló por la habitación y se tiró sobre la cama. Soobin se arrastró entre ellos y fue primero a los brazos de su papá y luego a Seokjin para los abrazos matutinos. Situado en la parte superior de las sábanas, Soobin cruzó sus pies y se instaló ahí. Movió la cabeza adelante y atrás tratando de ver a los dos. Finalmente se dio la vuelta sobre su estómago para poder verlos más fácilmente.

—¿Vas a vivir aquí y dormir con papá a partir de ahora? — se preguntó.

—¿Qué pensarías sobre eso? —Preguntó Namjoon.

—¿Quieres a papá? — Soobin preguntó a Seokjin.

Después de la noche que había pasado con Namjoon, Seokjin se sentía valiente y seguro. — Quiero a tu papi mucho y te amo, también. Me encantaría ser parte de tu familia. ¿Crees que hay espacio para mí aquí? —Observó el rostro de Soobin de cerca ya que sabía Namjoon también lo hacía.

—Sí, tú no ocupas mucho espacio. Entonces ¿voy a ser como Jisu en la escuela y tener dos papás? — Soobin miró hacia atrás y adelante entre ellos.

—Por ahora, tienes un papá y a su pareja. Veremos los de los dos papás más tarde —dijo Namjoon. —Y por cierto, me robaste mi turno, jovencito. Ni siquiera le he dicho a Seokjin que lo quiero, también.

—Bueno, díselo papá. Tiene que escuchar eso. Es importante —Soobin era un maestro del eufemismo.

—Ok — Namjoon miró a los ojos de Seokjin, su rostro solemne. —Te quiero y me encantaría que vivieras aquí con Soobin y conmigo. Te necesitamos en nuestras vidas. ¿Quieres?

—Sí, me encantaría —dijo Seokjin, sonriendo a ojos de Namjoon.

Soobin se retorció para sentarse entre ellos. —¿No vas a darle un beso? Sé que eres todo besos papá —Sonaba un poco exasperado con la lentitud de los acontecimientos. Namjoon se inclinó y besó a Seokjin rápidamente y luego agarró a Soobin y lo levantó sobre él, haciéndole cosquillas hasta que sus altas carcajadas hicieron sonreír a ambos.

圣诞老人的东西 [ NamJin ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora