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𝐃aniela desde que tuvo coherencia en su memoria, supo que su vida no iba a ser normal, despues de todo los hijos de los sirvientes no entrenaban duramente como hacia ella, tal vez por mucho tiempo tuvo el anhelo de salir a Jugar con los otros niños, pero su abuelo y su madre siempre le decian que estos estaban por debajo de ella, que ella era superior, cuando paso la tragedia y caida de la liga de las sombras supo que tal vez no eran tan superiores a los demás, su madre prácticamente la abandono en ese orfanato, lo unico bueno y aunque no lo admitiera seria su unico y primer amigo Colin Wilkes Huerfano como ella, y desde aun más pequeño en ese sucio orfanato, volviendo al tiempo presente ella sospechaba que los tiempos que se acercaban iban a ser dificiles.
Después del saludo de la directora de la institución, fueron al salón de segundo grado de primaria, la directora entro primero para hablar con la maestra, cuando Daniela entro, seguido de Wilkes, se quedo sin palabras habia un niño de su misma edad muy bonito y tierno, de ojos azules como el cielo y soñadores como las estrellas, a el lo habia visto una vez cuando en la sala de informacion de la liga abrio el archivo por equivocación de Superman tratando de buscar algo de su padre, supuso que este era familiar cercano o el Hijo de este tenia que acercarse a el desagradablemente si queria empezar a atar cabos con Batman.
La maestra empezo a hablar — Niños, ellos son los dos nuevos estudiantes becados de Becas-Wayne, esperamos los traten bien y como de la familia. — Dijo con una gran sonrisa, que Daniela supuso que le encantaba su profesión, se acerco hacia ellos y les susurro con dulsura que se presentaran, Colin tomo el impulso y se presento.
— ¡Hola! Soy Colin, Colin Wilkes tengo 7 años y espero llevarme bien con todos. — Dijo con una sonrisa radiante el pelirojo, Daniela rodo los ojos cuando sus nuevos compañeros empezaron a susurrar entre ellos, suspiro al ver que le tocaba presentarse.
— Buenos dias, Mi nombre es Daniela al Ghul, y tengo 7 años — Dijo seria y volteando a ver a la profesora esperando que les mostrara sus puestos correspondientes.
La profesora quedo confundida al ver la actitud tan tosca de la niña nunca habia visto hablar a una niña tan tierna de una forma tan fria y seria, sacudio su cabeza y volteo a mirarlos, llevandolos con una sonrisa dulce a sus respectivos puestos.
Con una sonrisa pero pensativa, continuo con su clase, hoy tocaban las multiplicaciones.
— Niños hoy vamos a teorizar a las multiplicaciones, voy a poner unas multiplicaciones en el tablero y al que eliga las pasa a tratar de responder — Copio las multiplicaciones tres faciles y dos difíciles, miro a sus estudiantes y vio a la niña nueva pelinegra y sonrio se veia aburrida. — Daniela, por que no pasas a responder las multiplicaciones.
Daniela que estaba aburrida anotando las multiplicaciones de la Miss, levanto su cabeza al escuchar su nombre y con extrema elegancia se levanto de su puesto y fue a completar las estupidas multiplicacion, encerio se notaba que todos eran unos ineptos.
