Thomas se levantó confundido, mirando al lugar vacío de su cama matrimonial, la cual únicamente a le habían permitido tener en el laberinto, para poder compartirla con su novio Newt.
Tal vez por su gran amistad con el líder, Alby, o simplemente porque era más conveniente dejarlos dormir juntos para que los demás no tengan que escuchar a mitad de la noche los ruidos que hacia Newt cuando se escapaba a la habitación de Thomas.
Pero todos estos pensamientos se esfumaron cuando cayó en cuenta de lo extraño que era que su novio no esté en la habitación tan temprano, ya que no tenía necesidad de trabajar a esas horas, y tampoco era algo que hacía usualmente.
Por esta razón, el morocho comenzó a buscar, tratando de mantener la calma, a su compañero, pensando que seguro había tenido alguna razón para irse, porque según el, tampoco habían peleado, lo que hubiera justificado su ausencia.
Fue lugar por lugar de la aldea, preguntando por su novio, pero, sorprendentemente, nadie sabía dónde estaba, por lo que empezó a preocuparse...
Tiempo después fue a buscar a un último lugar: a la enfermería, supuso que el rubio no estaría allí, pero resaltando el hecho de que Christensen, el médico principal, era muy buen amigo de Newt, tal vez el podría ayudarlo.
Entro a la habitación para encontrarse ni más ni menos que con la cara de su amado, que demostraba una mueca de dolor obvia en su expresión, lo que hizo que al corazón de Thomas le diera un salto.
"Newt...¿qué haces aquí? ¿Estas bien?" preguntó casi en un susurro, ya que aún no lograba ver que era exactamente lo que le pasaba al rubio.
"Tommy, si, lo estoy solo que no quería molestar" dijo haciendo una mueca.
"Primero que nada sabes que no molestas, y luego, no veo que estés muy bien realmente" afirmo.
"Bien, me atrapaste, ayer estaba trabajando en el huerto, y puede que me haya cortado la muñeca" dice Newt.
"Puede que?" inquiero, sabiendo la mentira que se esconde detrás de sus palabras"
"Me corte" confirma. "Con una de las hachas, pero es solo un poco, no tienes de qué preocuparte" dice con el fin de tranquilizarte.
"Llevamos meses saliendo y aún no te entra en esa cabecita el hecho de que siempre voy a preocuparme por ti" digo, mira solo con cariño.
"Lo sé, lo sé, eres el mejor novio del mundo. Nunca fallas en rescatar a tu damisela en apuros, oh que afortunado soy!!" exclama mientras sonríe.
Este maldito, pienso, siempre logra hacerme reír, alejando todos los pensamientos negativos que vienen a mi cabeza.
Aunque vuelvo a caer en la realidad cuando Newt suelta un gritito al sentir el roce del algodón con su piel cortada que Jeff, el médico, le está aplicando.
Esperen, Jeff??!! Acaso siempre estuvo allí, viendo y escuchando y yo no me di cuenta, debo estar demasiado enamorado para no haberlo notado.
"Buenos días Jeff" digo, aún atontado.
"Hola Thomas, apuesto a que no me habías visto, muy ocupado siendo un tórtolo como para apreciar el trabajo que hago por tu noviecito eh" dice en tono de burla.
En cuestión de minutos, mientras los tres charlamos, o mejor dicho, hablamos con Jeff mientras el intenta hacer su trabajo, Newt ya está como nuevo.
Lo que quiere decir que sale corriendo como un niño pequeño, agarrandome de la muñeca, para luego arrastrarme a la habitación, y yo, como el mejor novio del mundo, no puedo negarme.
Y en ese momento, solo por un segundo, que el área no es tan mal lugar para vivir, solo porque está el aquí, conmigo.
