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1 semana después

—¿Tn, ya casi?—preguntó Heeseung afuera de la habitación

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—¿Tn, ya casi?—preguntó Heeseung afuera de la habitación

—Ya casi—dije mientras aguantaba el aire hasta que por fin, pude cerrar mi faja

Hoy era la boda de Jungkook con Ximena y mi vestido de dama de honor no me cerró cuando me lo intente poner, por eso la faja.

Había estado comiendo en exageración los últimos días, ya que como aún tomo mis medicamentos, debo tener una buena alimentación.

—No respiro pero, solo son unas horas—dije mientras soltaba un leve suspiro y tome el vestido de la cama para así ponermelo

Era un lindo vestido largo, color azul pastel con un detalle color negro en la cintura, soy una de las damas principales así que debo entrar en ese vestido aunque sea a la fuerza.

Una vez con el vestido puesto, me dispuse a subir el cierre con total facilidad soltando un suspiro aliviada.

Me senté en mi cama para ponerme los zapatos y una vez lista, tome mi ramillete de dama junto a mi bolso y le quite el seguro a la puerta para así salir y chocar con Heeseung al salir.

—Uh, estás lista—dijo y yo me aparte rápidamente— lista y perfecta—dijo en tono bajo mientras me veía de pies a cabeza

—Vamos, corre—dije mientras tomaba su mano y lo lleve conmigo

—Cuida el departamento, Mimi—dijo Heeseung mientras salíamos y ambos corrimos al ascensor

Está de moda llegar tarde, ¿No?

Una vez dentro del ascensor, Heeseung presionó el botón de la recepción mientras yo terminaba de arreglarme en las paredes de espejo del elevador.

Estaba concentrada poniéndome labial, cuando me percate de la cara de enojo de Heeseung por el espejo, dándome la vuelta y riéndome de su expresión de enojo.

—¿Que pasa?—pregunté mientras reía y el me miró mal

—Llevo una hora y media en tu departamento y no he recibido ni un besito en la mejilla—dijo indignado mientras apartaba la mirada

—Claro que si, te di uno cuando llegaste—dije y el me miró mal

—Solo dime qué me odias y ya—dijo y yo reí

—Dramatico—dije mientras le daba un leve codazo y el me saco la lengua

Seguí poniéndome labial hasta que las puertas del ascensor se abrieron, los dos salimos y yo guarde mis cosas en mi bolso para después tomar la mano de Heeseung quien me esperaba pacientemente y ambos empezamos a caminar.

Tu corazón está a salvo conmigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora