Felix ha estado enamorado de Bangchan por mucho tiempo, pero el mayor nunca lo ha tomado en serio y solo se dedica a ilusionar al menor.
Pero un día un chico nuevo hace que Felix empiece a dudar de sus sentimientos hacia su adorado hyung.
¿Podrá Ban...
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Corrí lo más rápido que pude hacia la casa embrujada, en busca de alguno de mis amigos, necesitaba decirle a alguien lo escuchado y aclarar cualquier duda.
Al llegar a la entrada pude ver a Jeongin tomando agua, me miró preocupado y se acercó.
—¿Hyunjin estás bien? —preguntó—. Te ves pálido.
—Estoy bien... creo —susurré.
—¿Entonces por qué te ves alterado?
—Necesito que vengas conmigo —no dude ni un segundo más y lo tomé de la mano.
Luego ambos nos escabullimos por un pasillo y subimos hasta la segunda planta del colegio, la cual estaba cerrada porque el evento principal se realizaba en la primera planta.
—Ya es costumbre tuya el asustarme con tus silencios hyung —suspiró Jeongin mientras se apoyaba en un barandal—. Ya dime lo que te tiene alterado.
—Lo siento —suspiré—. Pero lo que ocurre es que escuché a Minju y a Heejin hablando de lo mucho que la consumía la culpa, luego mencionaron a Felix y Minju dijo que debían pensar algo para que Changbin no fuese a perjudicar a Heejin.
—¿Tu crees que...? —susurró casi en un hilo de voz Jeongin.
—Realmente no sé, pero siento que es demasiado obvio.
—Siempre supe que Changbin no me daba buena espina, pero creo que es mejor que lo averigüemos y planeemos que hacer.
—Una cosa a nuestro favor es que Bangchan y Felix aún se gustan, también que Chan accedió a conquistar a Felix.
—¿En serio? —me miró Jeongin con una amplia sonrisa y yo asentí—. ¡Es asombroso! Tienen todo mi apoyo.
—Gracias Innie —sonreí yo también y lo abracé, luego ambos bajamos juntos nuevamente a la casa embrujada.
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FELIX
Ya era hora de desarmar la casa embrujada y eso me hacia muy feliz porque ya me sentía muy cansado y mis pies dolían un poco.
