Capítulo 0

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—"En aquel tiempo..." — se escucha dentro del recinto. Las bocinas perfectamente colocadas juegan con la acústica de tal manera que todos los feligreses sienten e internalizan las sagradas palabras del pasaje bíblico.

—Ese chico es tan lindo... —, murmura una joven al lado de otra mientras observaba al muchacho dar la segunda lectura de la liturgia, —¿ya viste sus ojos? Son como de un azul verdoso...

—Sii —, le contesta la otra muchacha, mirando al joven igual —la otra vez en la salida... — iba a proseguir con el parloteo de no ser porque un muchacho al lado de ella carraspeó. Le observó un momento de arriba abajo, cambiando su expresión a una de disgusto, murmurando, ya casi llegando a un susurro para su amiga:— ¿y este qué... y está tatuado... parece delincuente... cómo nos movemos de aquí?

El muchacho solo bufó, esas chiquillas eran molestas cuando se refería a alguno de los chicos, solo iban ahí para lujuriarlos, ¿no que era una santa misa? Él les prestaba más atención a lo que fuera que estuvieran diciendo sobre el Santo Padre, que ellas u otro de los tipitos que también llegaban ahí.

En todo este momento su vista se ha intercalado entre Chifuyu -justo el joven del que hablaban las chicas al lado suyo, eso es sin ninguna duda, porque todas las tipitas hacían lo mismo-, quién concentrado, está terminando de hablar, y Keisuke, quién está sentado al centro del altar prestándole atención, junto con los otros monaguillos, de los cuales, falta uno.

—Ay no —. Murmuró ahora, saliendo lentamente de la nave central, y sacando su celular para marcar un número en específico.

Corre entre las veredas y callejones que se sabe de memoria como atajos para llegar a la iglesia

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Corre entre las veredas y callejones que se sabe de memoria como atajos para llegar a la iglesia. No desayunó y probablemente se desmayaría en plena homilía o quién sabe en qué parte estén para cuando llegue.

Te dije que debías acostarte temprano —, le hablaron desde la nada, o para cualquier otro sería la nada, ya que no está físicamente presente en estos instantes. —Ahora estás llegando tarde y nos viene persiguiendo un tipo... ¿seguro no quieres que-?

—¡Caaaaállate Kenchin no puedo pensar así! — sigue corriendo en un intento vano de llegar a la iglesia, quizá así el otro tipo deje de perseguirle, pero sabe que le regañarán por ello.

Mikey — le vuelven a llamar.

—¿Queeé? — pregunta esta vez, sin dejar de correr, cuando de repente suena 'Highway to Hell' desde el bolsillo de su pantalón, sabe de quién es el número apenas escucha el ringtone. —Ay no... — contesta el celular. — Alóuu...

<<— ¿Mikey? ¿Dónde están? Estás tarde >>

—Todo bien, ¿y tú? ¿Qué tal Tora? ¿Escuchaste de nuevo a gente babear por los chicos?

Del otro lado de la línea se tardaron en responder. Un bufido sonó antes.

<<—Mikey, es en serio si Chifuyu no te ve por lo menos al final de la misa, va a patearme por no haberte ido a buscar, y ni pensar el regaño de Ken >>.

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⏰ Última actualización: May 09, 2023 ⏰

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