Capítulo VI: Buena mentirosa

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-  ____, hola — dijo Seb cuando abrió la puerta de su apartamento — escucha, yo — lo tomé de las mejillas para besarlo efusivamente.

-  Hablamos luego — le dije, él asintió y envolvió mi cintura para alzarme y meterme a su apartamento cerrando la puerta detrás de nosotros, me colocó sobre la mesa, me quitó el suéter y sujetador para besar mis senos con fiereza, jadeé fuerte, masajeaba mis senos a la par que le daba un pequeño mordisco a uno de mis pezones, lo empujé levemente para quitarle la camiseta, besé su cuello, mis manos se deslizaban por su abdomen, envolvió mis piernas a sus caderas y colocó sus manos debajo de mi trasero para alzarme, me dejó sobre la cama, desabrochó mis pantalones para bajarlos, seguidamente de mis bragas dejando besos por lo largo de mis piernas, se quitó los pantalones y entró en mí, gemí, observé sus ojos azules, los cuales me observaban fijamente mientras me embestía, "ya me tienes impregnado en tu cuerpo y cada vez que estés con él pensarás en mí, en todo lo que hicimos", se repitieron las palabras de Chris en mi mente y ya no pude seguir disfrutando la compañía de Seb.

-  Muñeca, ¿quieres seguir? — preguntó, seguro notó algo en mi expresión facial, asentí y lo volví a besar, tú amas a Seb, recuérdalo, me dije, él apoyo sus manos en los laterales de mi cintura para hacer más profundas sus entradas, mis uñas se clavaron en su espalda — te amo — dijo contra mi oído.

-  Yo también — le respondí, me dio una pequeña sonrisa y siguió embistiéndome hasta que llegamos al orgasmo juntos.

Después de ello, acordamos en que no habrían más equivocaciones por parte de ninguno, decidí darle una oportunidad porque de cierta forma yo también me equivoqué, quería decírselo solo que no sabía cómo y si él podría perdonarme.

Acompañé a Seb a filmar su serie, estuvimos tres meses fuera de New York, nuestra relación volvió a ser como antes, estaba segura de que lo amaba y él a mí, éramos felices nuevamente, pero habían momentos de silencio en los cuales volvía a pensar en Chris, aún podía sentir sus manos en mi piel, lo sentía en mí, pensaba en nuestros días juntos, en lo fácil que era hablar con él. Guardaba con recelo las fotos que tomé durante esos días, Seb a veces tenía que grabar en la madrugada así que me quedaba sola en silencio junto a una copa de vino y observaba cada foto, yo sabía lo que había detrás de cada una. Ya no sabía nada de él, no hablamos para nada, no publicaba nada en sus redes, a veces quería dejar todo esto de lado y llamarlo, extrañaba que fuéramos amigos, conversar y reír juntos.

Pasaron dos meses, Seb y yo estábamos de vuelta en New York, ahora vivíamos juntos, seguía sin saber de Chris de manera personal, podía actualizarme por las noticias, él también había estado filmando una serie. Tenía tantas emociones reprimidas, tantos pensamientos que callar en mi mente, así que hice lo más sensato, busqué ayuda profesional, necesitaba alguien profesional y neutral que me escuchara.

THE ONES (Chris Evans & Sebastian Stan)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora