¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
EL FIN DEL MUNDO, algo que solamente se veía en películas, Violet solía bromear con sus primas sobre el fin del mundo y en el como llegarían robots a conquistarlo. Nunca se espero que ese día llegaría, pero en vez de robots los muertos regresarían de sus tumbas para acabar con la humanidad.
— Violet. — la llamó su tío sacándola de sus pensamientos. — ¿Te gustaría acompañarme al bosque?
La propuesta de Hershel la hizo dudar, Violet le temía con todo su ser a los infectados, ella no podía ni verlos porque cuando lo hacía sentía como se paralizaba y no se podía mover. Incluso pensar en esas cosas la ponía físicamente mal. Violet creía que había una cura para todo eso, es por eso que ella siempre acompañaba a su tío al bosque para atrapar a algunos y encerrarlos en el granero hasta que encuentren la cura para lo que ella creía que era una enfermedad.
— Claro... — susurró dudosa. Si bien Violet no quería ir, ella no dejaría que su tío salga solo al bosque, el era un hombre ya algo mayor y no podía hacer un trabajo así por su cuenta.
Después de recolectar las cosas necesarias ambos se dirigieron al bosque, Hershel había atrapado a un enfermo bajo la red. — Violet, yo me quedaré con este aquí, adéntrate más al bosque a ver si encuentras algún otro. — la mujer solo asintió e hizo lo que su tío le indicó.
Al caminar su respiración era agitada, tan agitada que se escuchaba como si estuviera respirando en tu oído. Un gemido de infectados se escuchó, pero al levantar la vista Violet no veía de donde provenía el sonido. Volteó a sus lados y no había señal de ninguno, hasta que por detrás de ella sintió como la empujaban al suelo.
Violet ahogó un grito al ver lo cerca que estaba el infectado de ella, con su brazo derecho intentó empujarlo de su cabeza pero el infectado la mordió en este. Esta vez Violet soltó un grito tan fuerte que se escuchó hasta la granja Greene. Hershel llegó y con la red atrapó al monstruo alejándolo de Violet.
La mujer estaba paralizada observando su brazo, chorros inmensos sangre brotaban de este. Con desesperación la mujer intentaba limpiarse esa sangre, pero aunque pasara su mano repetidas veces sobre la herida la sangre volvía a salir. Violet soltó un grito de frustración y enojo, el dolor de la mordida cada vez se hacía más fuerte.
— Hija, levántate... — le susurró Hershel intentando levantarla del suelo pero Violet lo empujó.
— ¡NO! — las lágrimas caían de sus ojos. — ¡ME CONVERTIRÉ EN ESAS COSAS Y TE LASTIMARÉ!
— Te llevaré a casa por mientras, ven... — el hombre la tomó del hombro y la levantó, mientras que con la otra mano sostenía al infectado que luchaba por escapar de la red. Hershel se sentía sumamente culpable por el estado de la chica, si el no la hubiera mandado a adentrarse en el bosque nada de esto hubiera sucedido.
Violet al levantarse sintió como si sus piernas fueran de gelatina y volvió a caer al suelo. Las lágrimas no paraban de salir. ¿Por qué ella? Se preguntaba. Lo único que la mujer quería en ese momento era convertirse, ya no quería estar con el sufrimiento y la angustia, ella solo quería irse.
Su tío la volvió a levantar del suelo, esta vez pasando el brazo de la chica por su hombro para evitar que cayera, el brazo de la herida estaba libre y mientras caminaban Violet solo se dedicaba a verlo. La mujer se encontraba en un estado de shock, no podía dejar de ver su brazo y la sangre que caía de el.
— Dios mío... — escuchó a Maggie susurrar con sorpresa y llevarse una mano a su boca, Maggie no creía lo que veía, no quería hacerlo, su prima había sido mordida por esas cosas y en cualquier momento se convertiría. La Greene ayudó a su padre con su prima mientras sus ojos se llenaban de lagrimas.
Los Greene dejaron a la chica en su habitación sentándola en la cama, la mujer no hablaba, no pestañeaba y sus ojos solo estaban en la mordida de su brazo, si no fuera por su respiración ellos pensarían que estaba muerta.
Hershel propuso la idea de encerrar a Violet en su habitación mientras se convertía, para ya después encerrarla en el granero con los otros infectados. Los demás Greene, con mucha dificultad aceptaron, dejando así sola a la mujer en su habitación.
Ella solo se sentó en el suelo esperando a que su momento llegara, pero horas pasaban y ella seguía igual, los presentes se preguntaban porqué tardaba tanto, pero supusieron que para cada persona era diferente. Violet estaba ya harta, ya quería convertirse en esas cosas y dejar de estar con la desesperación, también optó por acabar con su vida, pero luego recordó que si hacía eso era como si ella se estuviera condenando al infierno.
Un día pasó y Violet seguía siendo ella misma, ahora los Greene se asustaron, ¿Por que Violet no se había convertido si ya había pasado un día? La mujer no lo creía, el dolor de su brazo se había ido y ella en ningún momento sintió fiebre, para ese punto la fiebre ya la habría matado.
Y finalmente otro día pasó, ahí fue cuando se dieron cuenta que algo andaba mal, Violet no se había convertido y no mostraba señales de hacerlo. La mujer se encontraba sumamente sorprendida, ¿Por que no se podía convertir? Y ahí fue cuando otra pregunta entró a su mente, ¿Acaso era inmune? Pero, ¿Por qué? Las preguntas de su mente le daban dolor de cabeza y más porque no tenía una respuesta.
Violet Walker Greene era inmune al virus zombie, el porqué no se sabe, o al menos no ahora. Violet era inmune a convertirse en esos monstruos y eso le traería demasiados problemas a lo largo de su vida.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
