extra

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Kihyun entra a la habitación y se deja deleitar por aquella exquisita colonia varonil, no sabía exactamente si olía a mandarina o a madera, pero le gustaba. Siempre molestaba a Hyungwon mintiendo que odiaba esa colonia y eso hacia que el contrario la usará más seguido. Sonríe de lado, siempre funcionaba.

Se ha sentado en la orilla de la cama y ha dejado su postre sobre su mesa de noche, aquella tarde-noche de viernes estaba dispuesto a descansar después de una larga semana de trabajo, ni siquiera tiene planes de visitar el club de golf. Incluso tenía pensado en incluir a Hyungwon en su noche de películas pero pareciera que el pelinegro tiene algo más que hacer...

—¿Vas a salir?— pregunta curioso, ya sabe la respuesta, solo quiere confirmarlo. Hyungwon arregla los botones de su camisa y su cuello, Kihyun muerde su labio nervioso, mentiría si dijera que aquel torpe con el que estaba casado no era atractivo.

—Ajá— responde Hyungwon sin importancia.

Kihyun observa curioso como peina su cabello ahora un poco largo, recuerda haberle dicho una vez que lucía bien con el cabello corto, así que Hyungwon decidió llevarlo largo.

Porque así eran.

Kihyun podría decir blanco y Hyungwon diría negro.

El pelinegro coloca un par de anillos entre sus dedos, espera pasarla bien esa noche...

—No olvides llevar tu llave, no voy a bajar a abrirte en la madrugada — amenaza Kihyun. Hyungwon asiente. —Ah y no me vayas a despertar...— le advierte.

Sabía que Kihyun no tenía ningún plan para ese viernes cuando lo vió entrar a la habitación por el reflejo del espejo de cuerpo completo que el castaño insistió en comprar.

Vestía un short negro desgastado y una playera blanca demasiado larga para ser del castaño. Hyungwon alza una ceja confundido, ¿Acaso era suya o la lavadora le jugó una mala partida a Kihyun?

—¿No tienes planes?— pregunta. Kihyun asiente.

—Oh sí, tengo una cita con Andrew Garfield y todas sus películas — bromea Kihyun, Hyungwon rueda los ojos mientras se dirige al baño.

Del otro lado del colchón vibra el celular de su cónyuge, Kihyun muerde su labio nervioso y mira de reojo si el pelinegro sigue cepillando sus dientes, ya sabe su rutina dental así que sabe que va a tardar y cuando menos lo espera ya tiene el celular entre sus manos leyendo aquella notificación.

Jeonghan
Tranquilo
Lo haras bien está noche.
Nos vemos ahí, con cuidado

Kihyun muerde su labio dudoso, ¿Era el mismo Jeonghan de la universidad? El que Hyungwon juraba que era un intenso y que lo incomodaba...

Cuando escucha la perilla girar avienta el aparato a donde estaba y disimula buscar algo en el televisor...

—Te veo más tarde— ni siquiera puede decirle que vaya con cuidado pues Hyungwon solo toma sus llaves y su celular tan rápido como puede y desaparece de ahí.

Kihyun muerde su labio ansioso, habían acordado no meterse en la vida del otro a pesar de que legalmente y ante la ley de Dios son un matrimonio pero, ¿En serio no iba a decirle a dónde iba? ¿Y si le pasaba algo? Bufa molesto buscando acurrucarse en la cama, al menos sabía con quién iba a estar.

🖤

Hyungwon no se sentía así de bien desde hace mucho.

Así de vivo.

No como esa noche que había vuelto a ser DJ como en sus tiempos de la universidad. Al estar sobre aquel escenario con sus audífonos puestos y mezclando sus canciones favoritas de EMD sentía que podía sacar ese otro yo que quizás le daba miedo mostrar, era como si ser DJ fuese su alterego...

bad liar » hyungki [one shot + extra] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora