Capítulo 13

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La creación del portal fantasma iba rápido gracias a la habilidad de duplicado y los conocimientos de ambos. Si seguían a ese paso, Danny estaba seguro que pronto podría volver a casa.

Finalmente podría volver a casa a relajarse como un chico de su edad normal y pensar en los exámenes para ingresar a la universidad en la qué conseguir su título y entrar a N.A.S.A. Sus planes sobre el futuro lo motivaban a seguir trabajando con Vlad en el portal.

Hablando de Vlad... Después de encontarle sobre Dan, que era igual que abrirse y contarle su peor temor, las cosas habían cambiado entre ellos. El ambiente y trato entre ellos se había suavizado; si antes tenía sus reservas sobre el mayor esa compresión y escucha que le dió aquella tarde hizo que desaparecieran por completo.

Ahora miraba a Vlad con otra perspectiva encontrándose con que era más que un arrogante fantasma. El sentimiento de odio que sentía por él estaba desvaneciéndose y era reemplazado por otros que aún no era capaz de descifrar o aún no quería descifrarlos.

Sacudió la cabeza tratando de concentrarse en lo que debía hacer, no debía distraerse de su meta: salir de esa mansión.

Se acercó a la mesa de trabajo que habían ensamblado con la intención de tomar la caja de material sobre ella.

―¡Ah! ―Exclamó sorprendido al ver cómo la caja empezaba a levitar sobre la mesa para después volcar todo el material sobre la mesa haciendo ruido y llamando la atención del otro halfa.

―¿Qué ocurre? ―Preguntó mientras se quitaba la máscara para soldar.

Vlad se acercó a la mesa para ver cómo Dani se hacía visible en su forma humana.

―¿Qué haces? ―Preguntó el peliblanco arqueando una ceja.

―Nada. ―Respondió casualmente mientras salía de la mesa. ―Solo vine a saludar.

Danny no pudo evitar la sensación de paramnesia, al parecer Dani nunca dejaría sus viejos hábitos de aparecer de la nada.

―¿Y cómo va el portal? ―Preguntó la clon. ―¿Pronto podremos dejar este lugar?

―Aún estamos trabajando en el. ―Respondió Vlad mirándole con cierta intriga. ―¿No se supone que deberías estar distrayendo al escritorio, querida?

Danielle desvió la mirada, avergonzada o algo parecido.

―Eso hacia pero al parecer exagere con mi actuación de que no entendía nada y... ―Soltó un suspiro hastiado. ―Dijo que era más fácil enseñarle a un mono que a mí y se fue indignado. No sé si eso fue un éxito o un fracaso rotundo.

―Mientras no nos moleste es una victoria. ―Agregó Danny dándole una sonrisa.

El halfa se giró para retomar su trabajo pero aún sentía la mirada insistente de la joven en su espalda. La ignoró esperando que se fuera pero al ver que eso no sucedía suspiró y miró a la chica.

―¿Hay algo que necesites? ―Preguntó con calma.

―Bueno, en realidad no pero quiero ayudar con el portal para que avancemos más rápido. ―El joven la miro exceptico por lo que se apresuró a agregar: ―¡Puedo asistirte en tareas! Por favor... Estoy aburrida, quiero sentirme útil.

Danny miró a la chica con ternura, ella quería ayudarles a salir pero antes de que pudiera hablar, un fuerte rugido hizo retumbar las paredes de la biblioteca tirando algunos libros a causa de las vibraciones.

―¿Esa fue Dora? ―Preguntó Danielle con el asombro plasmado en su rostro.

Daniel se llevó una mano a la frente mientras asentía con cansancio. Efectivamente era Dora usando su rugido de dragón fantasma y escuchaba muy molesta.

Apuesta InfalibleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora