𝐏𝐚𝐬𝐢ó𝐧 𝐝𝐞 𝐠𝐚𝐯𝐢𝐥𝐚𝐧𝐞𝐬 [𝐒𝐚𝐫𝐚&𝐅𝐫𝐚𝐧𝐜𝐨]

30. Cumpleaños de Sara (+18)

-¡Que hombre tan guapo! - Dice Sara terminando de ponerle los tenis a su hijo

-¡Le amo ma Sali! - Responde Andrés abriendo sus brazos para abrazar a la castaña

Sarita recibió el abrazo con una gran sonrisa - Eres lo más lindo en mi vida y no solo en la mía sino también en la de tu papá, gracias por existir

-Gracias a ti por ser parte de la nuestra - Agradece Franco mientras se acerca y la abraza por la espalda

-¿Cómo te fue mi amor? - Pregunta mientras los dos se acomodan en la cama junto a Andrés

-Bien amor, terminé con todo lo que tenía pendiente - Responde

-Entonces es hora de hacer ejercicio - Dice mientras se va poniendo de pie para cargar a su hijo

-¿Andrés irá con nosotros? - Pregunta poniéndose de pie

-Pues claro, Andy necesita conectar con la naturaleza, con las cosas simples de la vida - Responde Sarita

-Tienes toda la razón, antes de que nos vayamos quiero darte algo que he estado haciendo desde hace un tiempo - Dice Franco - Pero creo que es mejor que te sientes - Dice dirigiéndose al armario

Sarita obedeció y se sentó junto a Andrés en la cama esperando a Franco - ¿De qué se trata?

-Es un secreto que hoy quiero compartir con ambos - Responde mientras se sienta al lado de la castaña y le entrega una caja mediana

Con sumo cuidado la destapó y saco lo que parecía un libro, con sumo cuidado retiró el papel que lo cubría y sus ojos se aguaron al leer “Embarazo de falta de purga”, sonrío entre nostálgica y emocionada al ver la primera hoja con la dedicatoria “No estuve los últimos meses a tu lado físicamente pero no me perdí ni un momento, porque tú eres el mayor regalo que Dios me dió, te ama papá”.

Empezó a ojear cada página y le fue imposible no llorar, las ecografías, cada foto, cada exámen,  hasta las facturas de cada detalle que se le compró al pequeño estaban ahí, Sarita sintió su corazón estrujarse al encontrar las fotos que ella le había enviando durante su ausencia, tenían una pequeña descripción junto a la fecha en que habían llegado, cada página fue acariciada con mucho amor y cada lágrima fue limpiada por los pulgares de Franco.

-Está hermoso - Dijo finalmente - Eres un lindo

-¿Crees que le guste? - Pregunto

-Le va a encantar - Respondió viendo cómo su hijo ponía sus pequeñas manos sobre el objeto y sonreía

-Amor, antes de que nos vayamos quisiera saber si no te gustaría pasar los últimos días del mes en San Isidro? Sé que Gabriela se muestra tranquila ante todo pero si a mí me dolió a ella le debió doler el doble haberse perdido tu cumpleaños hace un año - Comenta el ojiazul recogiendo el libro

-Por mí no hay ningún problema, cuando regresemos alistó la maleta, ¿Te parece? - Responde mientras alza a su hijo

(....)

Abrazo con mucha fuerza aquella carta que Sarita le había dejado, tenía muchas emociones encontradas y un corazón destrozado, había perdido lo más valioso que tenía en la vida y ahora no sabía qué hacer, sin Sarita y sin Andrés cerca, su vida perdía el rumbo, decidió empezar a recoger cada una de sus cosas porque no podía seguir en aquel lugar, lo único que quería era morirse si eso se podía.

Buscó una maleta, abrió el closet y empezó a sacar sus pertenencias, a medida que fue empacando y que el armario se fue quedando vacío encontró algunas prendas de la castaña, prendas que debido al color se confundieron con las de él y teniendo en cuenta el estado en que ella estuvo se le pasó llevarselas, las acercó a su nariz y se impregnó del olor a flores y esa loción que tanto le gustaba que Sarita usará.