La chica del apartamento 512 | Nuviari | Nuvia_OuO x AriGameplays

°~10~°

-Ya estoy lista, disculpa si te hice esperar- decía mientras me acercaba a Abril para darle un beso en la mejilla.

Solo tomó mi mano sin decir nada.

-Nos vemos más tarde, mamá.

-Hasta luego.

-Hasta luego señora.

Salimos del departamento y caminamos juntas por el tan conocido pasillo. Con nuestras manos entrelazadas como lo había imaginado hace mucho. Ya estaba acostumbrada a su tacto, a diferencia que la primera vez que las unimos. Estábamos tan nerviosas esa noche después del cine que a los pocos minutos teníamos escondidas las manos dentro de nuestros bolsillos.

Desde que empecé a salir con Abril, todas las personas que me molestaban tanto, se esfumaron. Las pocas veces que veía a ese viejo rabo verde o la chica de mi piso, me encontraba con Abril. No se atrevían a dirigirme la palabra, supongo que era por la chica que caminaba a mi lado casi siempre.

Una vez fuera del ascensor y del edificio, nos dirigimos a esa camioneta negra donde subí la vez que nos conocimos.

Abril había comentado que su madre quería conocerme, una vez le habló de mí por teléfono. Apuesto a que no esperaba un "Buenísimo, podemos ir mañana" como respuesta mía. Ese comentario lo había hecho la semana pasada y la razón por la cual su madre tuvo que esperar para conocerme es que ella vivía a tres horas de aquí, así que esperamos hasta mi día libre y también que su tío tenía que prestarle la camioneta para poder ir a visitarla.

-Pon algo de música, Abril- le pedí haciendo un ligero puchero 15 minutos después de que el auto empezara a rodar.-Toma mi celular, y reproduce música tú, tengo las manos ocupadas- de su bolsillo sacaba su móvil y me lo dio sin dejar de ver el pavimento.

Después de buscar en Spotify una playlist adecuada para el viaje que tendríamos, me relajé en el asiento del copiloto. Durante todo el trayecto me la pasé cantando las canciones pegadizas que salían del reproductor. Abril, por su parte, solo se reía y me escuchaba desafinar.

-Llegamos- se estacionó frente a una casa de un piso, con un verde jardín delantero

---------------------------

¿En serio te pusiste a llorar porque te tomaron una foto con Barney y no con Mickey Mouse?- preguntaba viendo una fotografía donde se veía a una Abril de 6 años aproximadamente. Estaba llorando al lado de una persona disfrazada de un dinosauro morado.

-Mamá ¿Tenías que enseñarle las fotos? 

-Oh , algún día el tendría que verlas- la madre de Abril reía mientras acomodaba un mechón  detrás de su oreja.

La señora había sido muy amable desde que entramos a su casa. Nos recibió con una sonrisa y un abrazo muy cálido. Me impresionó el gran parecido que ella y Abril tenían.

 Era muy alegre, podías sentir su animo con tan solo ver sus ojos.

-No has cambiado mucho, Abril- con mi dedo índice le di un ligero golpecito en la punta de su nariz; ella respondió arrugándola, adorable.

-Habrá un festival en la plaza ¿Por qué no van ahí antes de regresar?-Pregunto la madre de Abril 

-¿Quieres ir?- me preguntó.

-Claro.

Al salir de su casa, caminábamos por las calles tomadas de la mano. Algunas personas saludaban a Abril y ella hacía lo mismo.

-¿Esa chica es su novia?- preguntó un niño rubio con anteojos. Se había parado frente a nosotras haciendo que nos detengamos.

-Sí.

-Hola - lo salude con una sonrisa

-Me llamo Millaray

-¡Axo! ¿Qué haces aquí? Auron te está buscan... -una chica rubia que llegó corriendo paro de repente al ver a Abril

-tu... - dijo secamente.

-Biyin- se miraron.

Esas miradas que se dan dos luchadores profesionales antes de empezar a golpearse.

-¿Por fin tienes novia?-preguntó con sorna

- Es una suerte ¿No lo crees?- sus ojos cayeron encima mío

-¿Cómo es que te conquistó?

-Bueno... no es que ella.. -

me paré, queriendo explicarle nuestra cómica historia.

-No necesita saberlo- tomó de mi mano

-Nos vemos, Biyin-dio dos golpecitos encima de su pecho y se alejó, yo solo meneé mi mano de lado a lado caminando con Abril.

-¿Quién era esa chica?-le pregunte con curiosidad.

-Nadie importante.

-¿Es tu amiga? -la mire de reojo.

-Ni nos llevamos bien. -dijo sin más.

Caminamos una cuadra más, llegando a la plaza. Donde se veía todo tipo de vendedores. Se veían manzanas acarameladas, algodones de azúcar, palomitas de maíz, helados, rollos de canela y entre muchas otras cosas más.

En el centro de la plaza se encontraba un escenario armado, una chica anunciaba que en unos minutos empezarían con un pequeño concierto.

-Toma- Abril me tendió una manzana acaramelada.

La recibí dándole una gran mordida.

-Gracias. -le sonrei.

Nos sentamos en una banca mientras degustamos del dulce.

Podía ver que le pasaban un micrófono a la chica que hace unos minutos anunció el inicio del recital. Mientras le daba las últimas mordidas a la manzana, tirando la varilla al tacho de basura. la música empezó a sonar.

-¡Esa canción! ¡Esa canción!- me paré de golpe.

-¿Qué pasa con esa canción?- me preguntó

.-Es mi canción favorita, Abril- la jalé

-Tenemos que bailarla.

-No sé bailar, Millaray. -dijo mirándome un poco apenada.

-Solo muévete con el ritmo de la música.

Junté nuestras manos y empecé a mover mis pies.

Abril se veía confundida, desconociendo totalmente del género, pero intentaba seguir mis pisadas. A los pocos segundos, más personas se unieron a nosotras bailando al compás del dos por cuatro.

Aproximadamente tres minutos disfrutando de la melodía. No podía dejar de sonreír.

Al finalizar la canción, mis brazos envolvieron fuertemente a Abril

Mis labios se dirigieron a su mejilla y besé su piel con un sentimiento tan profundo, pero tan profundo que sentía que mi corazón estallaría en cualquier momento.

Llevaba mucho tiempo sin sentirme así.

-Abril - mi frente reposaba sobre su hombro derecho

-Te quiero mucho- dije desde lo más profundo de mi ser.

Ella nos separó y me miró a los ojos. E

sos ojos ahora tenían un brillo, una chispa que antes no había visto.

-También yo, Millaray - sus labios se curvaron ligeramente. Su rostro mostraba una sonrisa, la sonrisa más bella.Mis labios que antes besaron su mejilla ahora estaban sobre los suyos. Ese había sido nuestro primer beso. Mi corazón no podía estar más feliz, yo estaba feliz.

F I N