-Hoy, hace un año, nos desvanecidos como dos almas perdidas en el vasto universo, abandonados por el mundo de la manera más desgarradora. Recuerdo lo fácil que fue para ti dejarme ir, y cómo lloré al liberarte, superando la idea de ser tu todo.
Hoy se conmemora el día en que coexistimos y nos lastimamos mutuamente. Se materializó aquello que juramos que nunca sucedería, como la marea que llega a la orilla de un mundo sin fin. Ahora estamos en paz, demostrando quiénes somos realmente y cumpliendo las promesas que nos hicimos en su momento.
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Fuiste el anhelo que tanto anhelaba, el que conquistó mi corazón con su primera mirada. Hoy te contemplo como un extraño, a pesar de haber compartido tanto y haber dedicado cada precioso instante de mi existencia. Soporté cada herida y lágrima derramada durante incontables días, horas, segundos y meses. Fuiste mi maestro en la existencia del amor y en la lección de saber abandonar lo que amamos.
