Congelación desde el Punto de Vista de Dimitri.

Capítulo 13

Vampire Academy (POV Dimitri) (TRADUCCIÓN) por LizzieMaría85

Descargo responsabilidad lamentablemente no tengo los derechos de autor material esos pertenecen a Richelle Mead.

Está trama está escrita por Gigi 256.

Capítulo 13

Se escuchaban gritos desde cada parte de la habitación. Me levanté, agradecido de que mi altura extra me permitiera vigilar a Tasha mientras se defendía de las acusaciones. La mayoría gritaba que estaba equivocada, que estaba loca. Algunos habían llegado tan lejos como para sugerir que ella había estado conspirando con los Strigoi para terminar con nuestras dos razas. Ninguna de las cosas de las que la acusaban eran diferente de lo que ya le habían dicho antes. Una vez que quedó claro que los guardianes no iban a detenerla ni arrestarla, estuve listo para irme. Sabía que el Moroi que estaba atacándola verbalmente no iniciaría un altercado físico. La no violencia entre Moroi estaba tan arraigada, que era muy raro ver que alguna vez se dieran un puñetazo. Se consideraba salvaje, algo por debajo de ellos, reservado para los incivilizados, para los dhampirs, su preciado recurso.

Toda la reunión me disgustaba.

-Será mejor que se vayan. Nada útil va a suceder ahora. -El comentario fue dirigido tanto a Rose como a Mason, pero era para mí también. Empecé a caminar, necesitaba alejarme de esta locura antes de que sacara lo peor de mí. Pude escuchar al par ponerse de pie.

-Adelántate, quiero verificar algo, -le dijo Mason.

-Buena suerte, -le deseó Rose ya que se quedaría en el caos.

Atravesé la puerta, salí al pasillo y me apoyé contra la pared para controlar mi mente. Ya era bastante malo que la gente estuviera muriendo y que no tuviéramos forma de anticipar o detener los ataques, pero el consejo de gobierno de los Moroi, las únicas personas que tenían el poder de decidir cómo se manejaban nuestras vidas, estaban luchando entre ellos. ¿Esta era la tribuna desde la que Tasha había decidido hablar?

Respiré profundamente, recordándome a mí mismo que al menos debería estar agradecido de que su arrebato hubiera distraído efectivamente a todos de la atroz idea de obligar a las dhampirs de las comunas a prestar servicio junto con los muchachos que no tenían la suficiente preparación.

Podía oír suaves pasos, solo audibles porque estaba tan acostumbrado a ellos, viniendo detrás de mí en la sala vacía. Habían pasado días desde que le había dirigido más de dos palabras, pero parecían años. Sentí que anhelaba su conversación, no solo como una distracción de todo lo demás, sino por la frescura mental y emocional que parecía proporcionarme. También sentí un ligero anhelo de algo más con ella, algo un poco más físico, pero saqué esa idea de mi mente.

-¿No deberías estar ahí dentro protegiendo a Tasha? Antes de que la multitud le haga algo, tendrá muchos problemas por usar la magia de esa manera.

Me volví hacia el sonido áspero de su voz. Aparentemente todavía no estábamos en los mejores términos-. Ella puede cuidarse sola.

-Sí, sí, porque ella es una gran luchadora fanática de la magia ofensiva y del karate, entiendo todo eso. -Rodó sus ojos antes de cruzar sus brazos en una pose defensiva-. Es sólo que pensaba que como vas a ser su guardián y todo...

-¿Dónde has oído eso? -La interrumpí bruscamente, alarmado por lo que acababa de decir. Si iba a aceptar la oferta de Tasha, quería ser yo quien se lo dijera a Rose. Quería ser yo quién le explicara por qué me iba. Quería asegurarme de que se hicieran los arreglos necesarios tanto para su educación como para la protección de Lissa antes de irme. Yo había querido arreglar las cosas entre nosotros, de alguna manera. Todo eso se había basado en la idea de sí me iba a ir, algo de lo que aún no estaba seguro.