CHISMES

1. Triángulo Amoroso

                                                                       Historia contada por mi amiga.

Hace varios años, yo tenía un mejor amigo llamado Óscar. 

Un día el me dijo que yo le gustaba, pero él a mí no, entonces me distancié un poco de él.

Se lo conté a Miguel, su mejor amigo, y a partir de ahí empezamos a hablar bastante. Óscar, se dio cuenta y pensó que Miguel y yo estábamos saliendo.

Nos hizo gracia y le intentamos poner celoso, bromeando de que éramos novios.

Óscar se enfado con Miguel y conmigo, y se distanció aún más. 

Miguel y yo seguíamos hablando pero poco después empecé a sentir cosas por él.

Óscar y yo ya nos habíamos reconciliado, pero ellos dos no. Yo ya no le gustaba.

Le conté a mi mejor amigo lo que sentía por Miguel. 

Miguel y yo cada vez estábamos más y más juntos hasta el punto de estas todo el día el uno con el otro. 

También le conté a mis amigas y ellas me dieron varios consejos, ya que tenían más experiencia en estas cosa que yo.

                                                                                      _

Era ya el día antes de mi graduación y salí con mis amigos a dar una vuelta. Miguel estaba también. 

Mis amigos sabían de que a mi me gustaba Miguel y decidieron salir corriendo y dejarnos solos.

Yo quería matarles pero era un plan de Miguel, me besó y me pidió salir.

No me lo podía creer. Tenía novio

                                                                                     _   

Pasó el verano y no nos vimos casi nada. Estuve prácticamente con Óscar.

Yo pensé que ya no me quería porque él se fue distanciando de mí y me fui de viaje con una amiga.

Allí me enamoré de un chico alto, moreno, guapo y divertido, se llamaba Pablo, y nos liamos pero tuve que volver a mi pueblo.

Mi amiga le contó a Miguel de que a mi me había echado novio y ahí la cagué por completo. 

Miguel estaba pasando por un mal momento y por eso no me hablaba.

 Él me había comprado unas flores y un collar pero al enterase de lo de Pablo se enfadó tanto que dejó de hablarme.

Dos meses después me tuve que mudar pero sorprendentemente me instalé en el mismo pueblo que mi lío. 

Al final no acabó tan mal para mí, estoy saliendo con un chico guapísimo que es cero celoso.

 Aunque no me he olvidado de Miguel.