[ HUMANO DESAGRADABLE ] || POSEIDON × SASAKI ||

《MIRADAS》

04

Lü bu solo se reía de Kojiro, burlándose de cómo se había desmayado delante de los Dioses por su gran habilidad de poder comerse hasta los metales si así lo deseaba. Era realmente vergonzoso.

-¡Ay Dios!, si tan solo te hubieras visto ¡Jajajaja!-Estaba por arrancarle esa sonrisa, de eso estaba seguro.

-¡Ya vasta!-Con enojo le grito, pero nisiquera fue suficiente, se seguía riendo a carcajadas como si no hubiese un mañana.

Jack solo intentaba no reírse, puesto que respetaba mucho a sasaki y por lo tanto se sentía mal burlarse de él, pero admite haber soltado que otra carcajada.

-Ya vasta lü bu, Sasaki debe de sentirse mal todavía, necesita descansar.-Ayudó al Espadachín.

-No te preocupes Jack, me siento de maravillas además, el día esta hermoso para ir a entrenar... solo que un mocoso atrevido lo esta malgastando.-Esta vez fue Sasaki quien lo terminó humillando.

-¡Eh! Viejo mal gastado...-Eso último lo dijo con un gruñido, que apenas se pudo escuchar.

Sasaki suspiro con un apenas cansancio. Derrepente la puerta de aquella "enfermería" por si se puede interpretar así, dejo ver a un chico bastante grande, se parecía mucho a Lü bu.

-¡Oh! Raiden ¿que te trae por acá?-Pregunto Jack con una sonrisa.

-Nada, quería informarles que Qin se fue a su imperio, a resolver unas cuantas cosas, me dijo que quizás regresaría en unas cuantas semanas.

-Mm... que pena, ya me estaba callendo bien.-Dijo sasaki mientras se paraba de aquella camilla.

-Pues a mi no, su actitud parece ser la de un niño.-resoplando respondió
lü bu.

-Bueno, bueno. Ya dejen de discutir, yo por mientras voy a hacer algunas cosas pendientes ¡Adiós!-Jack salio como una bala de aquella habitación.

-Bueno, yo igual. Y Raiden gracias por informarnos sobre lo de Qin.-Con eso dicho se fue, dejando a los dos grandulones hablando.

Se fue caminando por los pasillos del aquel palacio o castillo, ignorando las miradas de seres místicos y cósmicos.
Intentaba no concentrarse mucho en eso después de todo era algo "normal" ya que era un humanos a diferencia de ellos.

Pero, la vergüenza no tardo en llegar al pensar que abra pensado los Dioses y el chico Poseidon por aquel escaldado que el mismo había armado, se había humillado de una forma tan desastrosa.

No sabia dado cuenta que ya estaba al frente de su habitación, lo que le llamo la atención fue una carta con un estampado Azul, no tenía nombre, pero decidió tomarla y entrar de una buena vez.

-Mm... que extraño, no recuerdo haberle escribido a alguien.-Se sentó en la cama y con delicadeza habrio la carta. Tenia unos bonitos diseños muy decorativos en la parte de atrás de lo escrito.-vamos a ver...