La víbora y el mito.

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-¡¿QUE MIERDA?!.

La luz natural del hermoso sol apuntaba directamente a su cara, alguien se había atrevido a abrir la ventana.

-¡Mamá! ¡¿Se puede saber que haces?!.

Una Jihyo completamente despeinada y tratando de cubrirse los ojos había salido de entre las sábanas para despedazar a quien hubiera osado a despertarla. Le empresaria agarró un almohadón para tirarselo a su madre, pero la señora Park lo esquivo con habilidad.

-No contrato a los chicos musculosos para que me entrenen en vano, hija mía - le explicó, esquivando el segundo almohadón.

-¡Pero, mamá! Tenemos.

¿Tenemos?.

-Ya es hora de despertarse, Ji. Es la una y el almuerzo va a estar listo dentro de poco - anuncio con una voz melódica la mujer.

-Mamá, no tenemos quince años para que nos vengas a despertar para ir al colegio.... - vaya a saber por qué la pelinegra hablaba en plural. La cara de desconcierto de la pelinegra mayor hablo por si sola.

-¿Tenemos sueño? ¿A despertarlas? ¿A ti y a quien más? ¿Acaso dormiste con alguien, Jihyo? Tu padre no le va a gustar nada - levantó su ceja mostrando que era una habilidad que se traspasaba de generación en generación.

Jihyo frunció su ceño.

-Espera un momento... - giro su cabeza rápidamente inspeccionando la habitación en la que estaba - Yo no me acosté en esta cama, me acosté en la del cuarto de invitados con.... con Momo.... ¡Momo! - salto de la cama más rápido de lo que su madre en su vida la había visto hacerlo.

-Si hubiera sabido que Momo iba a hacer que te levantarás rápido, la hubiera levantado a ella primero - le dijo su madre aguantando la risa.

-No es gracioso mamá - protesto Jihyo, buscando en su maleta algo para ponerse - Esa maldita mapache tanta siempre se sale con la suya, le advertí que no me cambiara de cama.

Por lo poco que había visto, el día iba a estar hermoso para disfrutarlo en la piscina, así que tomó su traje de baño color negro, que era su preferido y dejaba mucha piel al aire, porque iba a hacer sufrir a Momo por desobedecerla una vez más. Se metió al baño para ducharse y cambiarse. Su madre la siguió, pero se quedó del otro lado.

Al parecer, Haneul iba a pasarse el día entero con su ceja levantada.

-No sabía que dormían juntas - fue una pregunta disfrazada de afirmación. La señora Park sintió ruidos en el baño y espero paciente a qué su hija saliera a responderle.

-No lo hacemos - contesto apenas salió - Es decir, si dormimos en la misma cama, pero solo dormimos y generalmente nos separa una montaña de almohadones - explico todo lo que podía sin referirse al miembro de la castaña mientras cubría el traje de baño con unos pantalones cortos y una sudadera blanca.

-¿Y anoche no lo hicieron? - Haneul agitó su cabeza ante su mala elección de palabras - Es decir, ¿Anoche no durmieron juntas? Porque tú estás en tu habitación y ella....

Jihyo se tapo su cara con sus propias manos y se tiró suspirando en su cama.

-Es..... es complicado - dijo.

-Jihyo.... - su madre quería ayudarla verdaderamente.

-Es muy complicado - repitió - Todo con Momo parece costarme el doble - agrego, abriéndose a su madre - Anoche antes de los fuegos artificiales hablamos.... - entre otras cosas que su madre no necesitaba saber - Y la sentí más cerca que nunca, mamá, pero a la vez....

-A la vez muy lejos - completo Haneul, logrando que su hija le diera la razón.

-Despues entre Nayeon y sus dramas alcohólicos, Mina y su llanto inconsolable, el resto de los invitados, fue imposible que siguiéramos hablando y la perdí de vista nuevamente - contó - No la encontré hasta que papá me dijo que la había visto entrar a la casa.

No soy para ti (adaptación Mohyo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora