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Roier era el primero al encontrar su tren, esperaba a los demás sentado de lado de la ventanilla, esto le hacía felíz, pero le traía nostalgia, pues era difícil olvidar su pasado, sabia que estaban sus amigos con él, pero aún extrañaba a los viejos amigos, aún que el lo negara siempre pensaba en ellos

Paso los minutos viendo su teléfono, hablando con Mariana y Aldo, mensajeando con Spreen y Quackity sobre la emoción que tenía desde que recibió la invitación, cuando estaba justo por guardar su teléfono en su mochila encontró el viejo teléfono, Aldo lo había guardado cuando fue por sus cosas

-Qué hace esto aquí de nuevo?

Tomo el teléfono y lo desbloqueo, abrió todos los mensajes y leyó conversaciones viejas con su grupo de amigos, pequeñas lágrimas rodaron por sus mejillas

Entro al chat de Natalan con miedo y mucha intriga

👤 NATALAN:

Roi, perdón no quería lastimarte ⁸°²⁸

Solo contesta y hablemos de esto, dónde estás? ⁸°³⁰

Roier, quiero arreglar las cosas, pasamos por mucho juntos ⁸°³⁶

Solo quiero saber si estás bien... ¹⁰°⁴⁸

Perdóname, te necesito aquí, a mi lado ¹°²⁰

Al terminar de leer aquellos mensajes, sus sentimientos estaban a flor de piel y lo consumían poco a poco recordándole todo lo que había pasado hasta el día donde se fue

Consumido por los recuerdos empezó a ver su galería, estaba repleta de recuerdos felices: La hermandad peruana, la boda de Puvlo y Late, la construcción de Tepito, los edificios de "Infonavit", el bar de Orión, entre otras cosas...

Esto solo dibujo una gran sonrisa en su rostro, sabia que ir a esta isla no sería igual a Chafaland, pero podría iniciar una nueva comunidad, empezar a vivir con otros desde 0

Buscando más a fondo encontró una carpeta de imágenes de nombre: Nat!
La cuál por obvias razones estaba repleta de fotos de Natalan, su rostro, sus manos, su cuerpo, incluso sus ojos

-Te extraño pendejo... -Susurro con un nudo en la garganta

-Con quien hablas? Pareces loco

Rápidamente Roier se limpio las lágrimas y paso saliva

Spreen se había aparecido sin hacer ruido alguno y tomo asiento al lado de Roier

-La ezquisofrenia amigo, ya sabes

Bromeo mientras volvía a guardar el teléfono viejo

-Si, lo común

Ambos rieron y empezaron a charlar ignorando a quienes entraban

Entre carcajadas y sonrisas Roier ya no veía a Spreen, veía a Natalan...

El tren ya estaba en marcha desde hace unas horas

-Tengo que ir al baño... -Dijo cabizbajo

-Bien, apura que creo ya casi llegamos

De camino al baño pudo ver el hermoso paisaje que le brindaba el viaje y una calma recorrió su cuerpo

En el baño se quedó mirando el espejo un buen rato

-Necesito saber que paso con ellos... Aceptar que los extraño no estaría mal

Tomo su teléfono y empezó a buscar en todas las redes...

Para su suerte los encontró a todos, bueno, si a todos se refiere a unos 7

๑๑☆.Arcilla.☆๑๑|| Donde viven las historias. Descúbrelo ahora