LILITH:
Estoy muy cansada, casi no he dormido, el insomnio me come viva, quiero hablar con Evan, porque realmente siento que nos hemos estado comportando como niños pequeños, por el hecho de como me porte en primer lugar, y a demás porque no estuvo bien lo que hicimos, estuvo todo mal, y realmente necesitamos entregar ese trabajo, la entrega es esta semana, y la verdad, lo he estado viendo, o viendo la manera de acercarme a el, y no puedo, las manos me sudan, y las piernas me tiemblan, lo cual, me hace sentir como una idiota, no puedo concentrarme en absolutamente nada, y eso esta mal para mí pequeño cuerpo, y mi pequeño corazón, que al principio creyó que podría tener una buena amistad con Evan, pero ese momento, el momento de sexo, lo arruinó por completo nuestra oportunidad de ser buenos amigos, aunque no se que va a pasar después, no se que vaya a pasar en un futuro.
Lastimosamente, mi mente no deshace de Evan, estoy pensando cada momento en el, no porque me guste, si no que tengo todo el tiempo pequeños momentos del sexo en mi cabeza, y eso me está matando.
El día de hoy, iré a la escuela, y estoy decidida a que hoy hablaré con el, para que podamos hacer el trabajo, pero evitando en cualquier momento, de volver a acostarme con el.
Mientras bajaba hacia la escuela, lo vi ahí parado, donde siempre, con sus audífonos puestos, sus brazos cruzados, y con cara de malo. Suspiré profundo y me acerqué.
- Hola, Evan.
Él me miró de pies a cabeza, y se quitó sus audífonos, parecía sorprendido.
- Hola, Lilith...
Me quedé unos segundos mirándolo.
- ¿Necesitas algo? -contesto algo grosero-
- Lo siento -dije- no queria molestarte, solo quería comentarte que el trabajo que teníamos que hacer, se entrega en esta semana, necesitamos hacerlo, solo quería decirte que si te parece si lo hacemos, pero para evitarnos cualquier otra situación, ¿Lo hacemos en la biblioteca? Si te parece, si no, lo haré yo sola, sin problema, solo creo que estamos actuando como niños pequeños. Debemos ser maduros e ignorar lo que sucedió, y hacer el trabajo.Me miró sorprendido, y sin mucha emoción respondió.
- Bien, haremos el trabajo. Te veo a las 2:30, en la biblioteca.
Asentí, y me quedé parada a su lado, en silencio, un silencio demasiado incómodo.
EVAN:
Tengo que ver a Lilith hoy en la biblioteca, es una estupidez hacer el trabajo ahí pero ella tiene razón: evitaremos cualquier otra situación y podremos, finalmente, terminar ese estúpido trabajo de una vez por todas. De igual manera, será después de clases así que de momento no me preocuparé, no será necesario si no hasta la tarde...
Estoy aburridisimo, hermano, ya me quiero ir a casa pero lastimosamente aun me quedan otras dos clases y... puta madre, tengo que ir a la biblioteca también con Lilith... No quiero ir, sinceramente, pero tenemos que terminar ese trabajo.
No importa, solo será hoy y finalmente me podré deshacer de ella. Quedamos muy raros desde que nos acostamos y aunque lo habíamos, realmente sigo muy confundido... Fue muy delicioso, coge increíble. Pero no sé si realmente quiero repetirlo. Es decir, si quiero pero sucederá lo mismo una y otra vez, será incómodo y luego confuso y estaré así de nuevo.
A la mierda, que se joda, no volveré tan siquiera a tocarla o besarla... Pero es que esos labios, y ese cuerpo. Hermano, ella es muy bonita y sus ojos brillan cuando le estoy metiendo los dedos o cuando acaricio sus pechos... O cuando comienza a gemir al momento de besar su cuello y pasar mi lengua por sus hombros hasta llegar a su espalda...
Es una gran chica, pero también una puta muy buena en el sexo y eso me hace quererla penetrar nuevamente y... Ya, Evan, cálmate... Solo estás empeorando la situación. Además, es imposible que vuelva a suceder. Jamás se acostarán de nuevo y solo te quedarás con la ilusión y esperanza de volver a cogerte a esa niña... Para, ya detener y mejor piensa en otras cosas, hermano.
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Dile si al cielo... 110 años
Novela JuvenilLilith y Evan. Dos historias diferentes, momentos diferentes, ¿Coincidencia o destino? Quizá el destino, los une de una manera. Del odio al amor. A veces uno no se espera que ames a la persona que más solías odiar en el mundo. El amor llega cuando...