Homofóbica -Chaelisa- (EDITANDO)

34 -En el avión-

Lisa

Besé su cuello con desesperación mientras tomaba sus manos y las colocaba arriba de su cabeza dejando mejor acceso a su cuello ya húmedo por mis besos.

La rubia no puso alguna resistencia al sentir el cálido y dulce aroma del perfume de la tailandesa.

Rs: Lisa p-para _ sollozo la rubia mientras trataba de romper el agarre de Lisa_

Ls: Que pasa si no quiero _ dijo la más alta, susurrando en su oído_

-gritare -solto sin pensar la rubia-

Sus palabras se callaron cuando Lisa deslizó su lengua por sus cálidos y regordetes labios.

Sus palabras se reemplazaron por frenéticos jadeos.

Las manos de la tailandesa quitaron el agarre de las manos de Rosé e inconscientemente bajaron hasta su falda acariciando su entre pierna.

Coloco su rodilla en el centro de Rosé haciendo presión mientras miraba y anhelaba la cara de excitación de la mayor.

Rs: n-no podemos l-l-lis?! -lo último lo gimio cerca del oído de Lisa-
Ls: porque sigues provocandome- acaricio el hombro de Rosé suavemente haciendo que su piel se erizara-

Rs: n-no comprendo Q-que tratas de decir-me -jadeaba-
Ls: porque usas cosas tan cortas

Mi lengua recorrió todo su cuello hasta llegar a su oído y susurrar en el.

Ls: no sabes cuanto deceo cogerte y tomarte fuertemente mientras me suplicas por más pero -hizo una pausa- veo que ahora no tienes ganas, y... respeto eso 

Dejo de presionar su intimidad con su rodilla y se alejó de ella saliendo de cubículo.

Rosé

Como se atreve a dejarme así!!!!

Salí de aquel baño lo más rápido posible y caminé hasta mi asiento, ahí estaba ella. Toda calmada y supuestamente dormida.

Me senté y me quedé mirandola por unos minutos. Como puede ser tan hermosa, cada rasgo en su cara es perfecto.

Mi mirada bajo por sus labios, eran tan perfectos rosados y regordetes con un sabor realmente reconfortante que hacía que quisiera cada vez más de ellos.

Ls: si quieres besarme solo hazlo- susurro aún con los ojos cerrados-

Las mejillas de la neozelandesa se sonrojaron automáticamente y esto causó un pequeño golpe de parte de ella hacia lisa.

Ls: auch- se quejó la menor-
Rs: no te quiero besar - giró su cara y se acomodó para dormir-

Lisa rápidamente tomó el mentón de Rosé acercándose a sus labios y los beso colocando su mano en el cuello de la chica para profundizarlo a lo que la neozelandesa no se negó.