Susurros

...primer susurro...

– Patético, cobarde... Todo a tu alrededor es un caos ¿ y que haces ? Sonreír ? ... ¿ Crees que sonreír te libra de esa oscuridad que sientes ?
No dejaras de ser inútil, seguirás siendo una carga, mira como todos se esfuerzan y mírate tu...

– No es verdad ... No soy lo que dices... No tengo por qué compararme con los demás.

– Piensa en él ¿ eres útil ? Dime eres valiente, ves todo lo que los demás soportan, lo has escuchado de primera mano, te han confiado que tan agobiados están ¿ y tú qué haces ? Sonreír. Patética.

– yo... No sé que hacer...

– solo estorbas.

– siempre tienes razón.

– deja que ese sentimiento fluya...

– no sería más cobarde si dejo que fluya?...

– pero ya no serías un estorbó, les quitarás una carga de encima.

– pero...

– ¿ Quieres seguir siendo inútil, estorbando en sus vidas, siendo débil ?

– yo no lo sé... Creo que no está bien.

– y dime qué es lo que crees que está bien, seguir estorbando ?

–  yo no tengo el valor.

– hasta para dejar de existir eres cobarde ¿ Que crees que te espera en un futuro ? No lo pienses tanto y déjate llenar de ese sentimiento.

...Todo se volvió oscuro...

– vamos sonríe, nadie debe notar o siquiera sospechar lo que planeas hacer, siempre has Sido buena engañando con esa sonrisa, así que hazlo, será la última vez que lo hagas, esfuérzate por una vez en tu patética existencia.

– ya estoy cansada ... ¿ Por qué me pasa esto a mi ?

– es tu culpa, siempre guardaste tus sentimientos solo para ti, decidiste cargar con eso tú sola, y te diste el lujo de escuchar los problemas de los demás y también cargarlos, es tu recompensa por ser estúpida...

– entonces al final fui yo quien se condenó... Siempre estando ahí para los demás, en lugar de estar pará mi.

– es lo que decidiste, sin importar como te sintieras siempre sonreiste, al final es tu culpa.

– entonces soy valiente...

– no te equivoques, solo fuiste una cobarde que se oculto de la realidad detras de una sonrisa.

– este sentimiento... Me trae paz e inquietud... Pero creo que es lo mejor ya no seré más un estorbó... Mi alma al fin va a descansar... Ya no puedo sentirme culpable...

– al fin eres valiente... maldita cobarde...

– entonces pondré fin a mi vida, les daré una última sonrisa antes de partir y no regresar jamás.

– cobarde eso es lo que eres, piensas que muriendo vas a solucionar todo, ¿ que crees que van a pensar de ti ? ¿ crees que no les va doler ?

– no hay vuelta atrás, la oscuridad me consumió, no puedo sentir ... Ya no importa si fui valiente o si fui una cobarde.

– ¿ que ganas muriendo ? No lo vas a intentar ¿ Verdad ?
.
.
.