꧂✭𝓓𝓮𝓼𝓮𝓸𝓼 𝓐 𝓕𝓵𝓸𝓻 𝓓𝓮 𝓟𝓲𝓮𝓵✭꧂

Nick Wilde

Judy se repuso de sus sueño el teléfono no dejaba de sonar y termino por levantarla, miro el número y se extrañó muchísimo era casi las 3 de la mañana no entendí por qué Nick le marcaria a esa hora y tantas veces seguidas, contesto con mucha incredulidad.

-Hola Nick ¿qué pasa?-

-Señorita Juddy- era una voz que no conocía al teléfono.

-Si con ella, ¿sucede algo quien habla?- esto no le terminaba de gustar, la persona al teléfono le comento lo que sucedía y ella paso su mano por su cara de la molestia.

-No se preocupe ya mismo voy para allá- mientras anotaba la dirección que le daban.

Fue al baño y se lavó la cara rápidamente, tomo lo primero que escogió de su poco y simple armario un jean y una camisilla de tiras y salió al lugar indicado.

.

.

.

-Señor por favor- le insistía el pobre barman a Nick.

-Me estás diciendo ¿que no puedes* hic* servirme otro trago?- el zorro golpeo la mesa- ¿Qué clase de servicio dan en este Bar? Haaa,- lo retaba estaba totalmente borracho.

-Ya basta Nick- una voz seria le dijo, su cola reacciono instintivamente erizándose pues sabía de quien era esa chillona voz, volteo con ese gesto se ser atrapado.

-Pero si es mi amiga Zanahorias- Exclamo.

-Nos vamos a Casa Nick- la seriedad en el tono de Judy evidenciaba su desagrado ante esta situación, se acercó a la barra y le pregunto al barman un oso si aún debían algo, este negó y ella procedido a llevárselo de ese lugar.

Nick tenía su brazo rodeando el cuello de Judy pues tambaleaba, salieron del lugar y tomaron un taxi.

Lo llevo a su departamento y lo tiro como pudo en la cama del cuarto de visitas, hace unos meses Judy cedió ante la insistencia de Nick y se mudó a un lugar más grande, con un cuarto extra que terminó usando Nick en muchas ocasiones como esta.

Judy Le quito a Nick los zapatos y las medias, noto que su camisa estaba manchada procedió a despojarlo de ella también, dejando el descubierto su hermosa piel canela- naranja tan propia de los zorros, Nick media cerca de 1.70 m, su bello cabello naranja liso y sus hermosos ojos verdes acompañados de sus gestos picaros y coquetos lo hacían realmente muy atractivo.

Ella por el contrario media 1.50 m, la estatura promedio de la raza de los conejos, pero su piel era pálida casi gris y unos grandísimos ojos violeta un color poco común incluso entre su raza, no tenía brazos fuertes por su contextura delgada en la parte superior, pero si piernas gruesas y caderas pronunciadas que le daban una atrayente figura.

Se sentó al borde de la cama y observo, sabía que seguramente se tratada de otra discusión con su novia lo que lo llevo a ese estado, ella mordió sus labios, si tan solo fuera tan valiente como todos creían Nick no estuviera pasando por esto, lo amaba como nunca creyó en su vida sentirse por alguien, pero era su compañero su amigo y sobre todo otra raza.

No había indicios de parejas internacionales, porque en la historia las pocas conocidas nunca pudieron engendrar hijos, los ADN de las especies en su evolución se separó tanto que no se mezclaban, todos tenían el mismo nivel de desarrollo y rasgos humanos pero mantenían sus orejas, colas y la punta de su nariz siempre era sombreada de acuerdo al color de la raza, rosada en el caso de Judy y negra en el caso de Nick.

Nick se movió en la cama buscando acomodo, y quedo dándole la espalda, músculos definidos a la vista de Judy, lo deseaba, era como una llama ardiente que la consumía cada vez más, quería sentir su piel, permitirle entrar en ella, besar sus labios y perderse en el calor de su cuerpo, pero no era capaz aun sabiendo que él deseaba lo mismo.