CAPÍTULO 7

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Sunoo estaba preocupado

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Sunoo estaba preocupado.

Mientras trazaba con un lápiz sobre la tela, no podía borrar los pensamientos de su cabeza que le estaban atormentando.

Había regresado a Corea para visitar a sus padres en el pequeño descanso de verano, permitiéndoles saber que la estaba pasando de maravilla y que cada vez faltaba menos para terminar la universidad. Por supuesto que no mencionó el hecho de que era costurero, su padre estaría decepcionado y ya tenía bastante miedo de su reacción cuando le mencionara que estaba saliendo con alguien.

Con un hombre.

Imaginarlo lo llevó a girar su cabeza hacia su pareja; Heeseung estaba ajustando su corbata con la mirada en su reflejo en el espejo. Su corazón no pudo evitar latir con fuerza al darse cuenta de lo hogareño que se sentía estar con él. El pensamiento persistió mientras le ayudaba a ajustar la tela alrededor de su cuello y le dedicó una sonrisa cálida.

Entonces el mayor rodearía su cintura con sus brazos, dejando dulces besos sobre su mejilla con suaves susurros en su oído que le profesaban amor eterno.

Y todo se sentía bien, como debería ser.

—Sigues preocupado, puedo verlo en tu rostro —murmuró al separarse, solo un poco—. ¿Todavía no se resuelve el problema entre Riki y Jake?

Otra de las cosas que amaba del hombre frente a él, era la capacidad que tenía para leerlo fácilmente. Si no quería hablar o le costaba expresar lo que quería decir, Heeseung encontraba la manera de entenderlo.

Cuando se fue a casa de sus padres, las cosas entre sus dos amigos estaban bien. Seguían siendo los mismos par de cabeza hueca que había conocido, sin embargo, al volver, la distancia entre ellos fue perceptible en el primer segundo. No cuestionó nada porque los conocía a la perfección, sabía que hablarían con él si fuese necesario y podrían resolverlo, ya que, no era la primera vez que tenían un malentendido.

La decepción fue enorme cuando, después de dos semanas, seguían sin dirigirse la palabra.

Y era difícil, porque los sentía distantes de él también, incluso si no terminaba de comprender lo que ocurría. Se habían apartado de su lado sin siquiera darle una explicación.

No quiso hacer más grande el problema y esperar, ¿pero cuánto más? Había entendido que quizás no era tan cercano en su vida como quiso creer. Que cuando Riki volvió del campamento (en realidad, lo echaron), ahora tenía más amigos y ya no eran solo ellos dos contra el mundo.

Amaba a Heeseung. Estaba tan agradecido de que la vida lo haya puesto en su camino. Lo conoció en un mal momento, pero se volvió parte indispensable de él. Sunghoon y Jongseong también. Incluso estaba agradecido con Jaeyun por calmar las ganas de salir a explorar el mundo que Riki a menudo solía tener. Pensaba que él era quien lo conocía mejor que nadie, pero cuando se dio cuenta de la notoria conexión entre el japonés y el australiano, aceptó que quizás nunca pudo comprender del todo a su amigo.

ENTRE PÉTALOS Y HOJAS DE PAPEL © ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora