¿Tú Número?

~eight~

Un joven despertó después de una larga noche, noche en la que bebió con un atractivo chico y veían Merlina

Se levantó con cuidado para no despertar a su compañero, quién seguía durmiendo, tomó el teléfono más cercano que tenía y lo prendió para revisar la hora

-"El jefe me matará" -dijo internamente cuando vio que llegaba con horas de retraso al trabajo-

Busco su teléfono y vio que esté tenía varias notificaciones, unas cuantas de su jefe preocupado por él y otras de su compañero de trabajo, Slime, quién esté parecía a una persona cualquiera haciendo un hilo en Twitter cancelando a algún famoso

Se colocó su túnica de trabajo y bajó hasta la cocina para hacerle un pequeño desayuno, aprovechando que iba a llegar más tarde de lo que ya estaba, ¿Para qué el apuro? Tampoco quería llegar tan tarde así que le hizo algo básico pero decente. Al terminar el desayuno de su amigo, lo colocó encima de la mesa y dejó una pequeña nota antes de salir

-¡#49, joder! ¡Me tenías muy preocupado, creí que uno de estos terroristas te habían hecho algo!

-disculpe jefe. Simplemente me quedé hasta tarde con un amigo y mí alarma no me despertó, lo lamentó, no volverá a suceder -hablo con algo de pena, sin quitarle la mirada al suelo, pues se veía incapaz de verlo a los ojos-

-no te disculpes, lo bueno es que estás sano y salvo, lejos de esos delincuentes -respondio con calma mientras apoyaba su mano en el hombro del empleado-

-si...

-Aquí estás ¿¡Qué te pasó que llegaste tarde, Michael!? ¿¡Sabés que tuve a aguantar al jefe yo solo!? -se abalanzó hacía el recién llegado para luego apegarse a su brazo como un slime en el pelo-

-ouch, me duele -hablo su jefe, quién estaba a su lado-

-espere jefe, le estoy reclamando -levando su dedo índice hacia el contrario, sin darle mucha importancia a él-

-#16, ¿Tu no deberías estar en la oficina?

-¿Cuál ofic-? ¡Tiene razón jefe! ¿¡Que hago aquí!?

Y así, el muchacho salió corriendo devuelta a su trabajo

-me cae bien dieciséis, es un chico muy energético, me trata como un amigo y no como una autoridad -cambio su expresión rápidamente por una alegre-

-jefe ¿Usted suele salir con sus amigos últimamente? -pregunto el chico ya más calmado-

-jaja, qué dices, claro que no, tengo muy poco tiempo libre, sobretodo ahora que empezamos a tener delincuentes en el pueblo -respondio al mismo tiempo que su expresión volvía a ser la misma de siempre-

-pues, creo que debería ponerle unas horas menos al trabajó, es humano y necesita divertirse también, no sé arrepentirá, pasar tiempo con sus hijos y...

-mis hijos, cómo los extraño, pero tengo que hacer todo esto para protegerlos

-¿Cómo?

-tengo una idea de quién puede ser el culpable del asesinato de tus compañeros -dijo mientras colocaba una mano en su mentón-

-¿Qué? ¿Q-quienes? -derrepente, sus nervios aumentaron, tenía miedo de que puedan atrapar al muchacho que se encontraba en su casa, a él y a su familia-

-bueno... Había un hermoso jovencito en el pueblo, era un muy buen amigo mío, pero yo tenía otros pensamientos sobre él, no estoy seguro si él sentiría lo mismo pero -hizo una pausa para tomar un largo suspiro y siguió- Un día yo no tenía otra opción más que traicionar lo, él quería ser presidente de Karmaland, pero tuve una visión, este chico era muy amable e inocente con todos, por lo que serían capaces de usarlo para beneficio propio. No quería que eso sucediera, así que me sin pensarlo dos veces postulé para presidente -hablo con cierta melancolía, recordando la expresión de su amado en esos momentos-

-Entonces, usted solo estaba protegiendo al chico, ¿Verdad? -pregunto nervioso-

-si. Realmente quería su seguridad, pero él se enojó mucho al ver que gane las votaciones, recuerdo su mirada cuando me reclamó todo después, pero sobretodo... Recuerdo lo que me dijo...

-¿Qué le dijo?

-que matará a todo lo que amo primero, y luego acabará conmigo

Al contrario de le heló la sangre al momento de escuchar esa frase, teniendo en cuanta que ya estaban ejecutando uno que otro de esos objetivos que tenía el líder de la rebelión

-¿Y qué hará al respecto si es el causante? -volvio a cuestionar preocupado-

-bueno, no tengo de otra que encerrarlo, él se está volviendo un peligro para el pueblo, es capaz de cualquier cosa este jovencito -volteo a ver a su compañero con angustia- ¿Quieres ayudarme?

-¿Qué puedo hacer yo? -estaba intrigado por su nueva misión-

-¿Serías capaz de unirte a su rebelión y traer información?

-¿Qué? Uhm... No lo sé, ¿Qué pasa si me descubren?

-bueno... En ese caso contrataremos a alguien para que también nos ayude, además, ganarías un gran reconocimiento si me ayudan en esto

En chico se quedó pensando por unos momentos. Por un lado, estaría más cerca del hermoso joven que robo su corazón y salvo su vida y por otro lado, estaría haciendo lo mismo que su jefe hizo con su enamorado y no quería que las cosas terminen mal o peor, al final, ellos eran familia y podían compartir actitudes similares, además que ya le agarro bastante cariño a ese terrorista

-no lo sé, ¿Me dejaría pensarlo? -elevó su mirada con cansancio, mucho que procesar en tan poco tiempo-

-claro que sí, tu cuando tengas tu decisión ven y dime, ¿De acuerdo?

-si jefe, yo lo mantendré informado

-bien, cuídate por favor

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