El fin de sublime (I)...

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[Punto de vista Reo]

"Joder" gemí molesto cuando me vi obligado a despertarme por la alarma del reloj en la mesita de noche de Dora. Era molesto como el infierno... Tuve que esforzarme para no hacer estallar esa maldita cosa en pedazos.

"¡A la mierda!" Dora se despertó y maldijo en voz alta con molestia. Dora se apartó de mis brazos mientras refunfuñaba y apagó la alarma. Usó un poco más de fuerza de la necesaria, tan pronto como terminó, volvió a su posición anterior y la atraje a mis brazos... por sus expresiones faciales, estaba claro lo que quería.

"Quédate así... no necesitamos levantarnos" murmuró Dora y me acercó aún más a ella.

"No es que me queje, pero ¿no tienes entrenamiento hoy?" Le pregunté en un tono confundido, mis manos serpentearon alrededor de ella y comencé a acariciarle la espalda con cariño.

Le gustó, se retorció un poco y trató de acercarme aún más a ella. "Sí, pero hoy solo tengo clases de teoría y no empiezan hasta el mediodía" dijo Dora en un tono bajo y contento y permaneció inmóvil en mis brazos.

Mis pensamientos se dirigieron inmediatamente hacia la última noche... Debo decir que realmente extrañé a Dora. Las primeras tres veces, tuvimos sexo, sexo caliente, humeante, hambriento, alucinante... luego los dos volvimos a la habitación y después de eso, hicimos el amor, completamente sensual y apasionado. Los dos lo disfrutamos bastante...

"Entonces, ¿cómo va tu entrenamiento?" Le pregunté a Dora que tarareaba un poco mientras pensaba.

"Es bueno, estoy en la parte superior de la tanda. Espero que siga siendo así..." terminó Dora y comenzó a pasar sus manos por mi cabello.

"...Ahora, cállate y déjame abrazarte" Dora me reprendió con un tono fingido e indignado.

"Claro, mi señora" respondí con una sonrisa y me acosté allí sin decir nada mientras acariciaba su espalda. Los dos pasamos toda la mañana en completo silencio, acostados en la cama. Estábamos completamente contentos con eso... después de todo, nos teníamos el uno al otro en nuestros brazos.

Ni siquiera nos dimos cuenta de lo rápido que pasó el tiempo, era casi mediodía, lo que significaba que Dora necesitaba prepararse. Después de lo de anoche, necesitaba una buena y larga ducha, después de todo, los dos olíamos a sexo. Afortunadamente, el chupetón que le hice a Dora estaba cerca de su hombro y no tendrá problemas para ocultarlo, pero yo no tuve tanta suerte. El chupetón que me hizo era imposible de esconder sin un pañuelo...

Gracias a Dios por los amuletos de glamour, no sé qué hubiera hecho sin ellos. A pesar de que nos dimos una ducha juntos, no fuimos más allá de algunas caricias y caricias. Dora tenía que asistir a sus clases y sería muy malo que saliera de su habitación caminando rara.

"Te extrañaré" dijo Dora en un tono afectuoso, estaba triste porque tuve que irme, su cabello era un delatado, a diferencia de sus colores brillantes habituales, su cabello era castaño claro.

"Yo también te voy a extrañar. No te preocupes, trataré de criar siempre que sea posible. Después de unos días, estaré casi libre" le dije a Dora y me incliné y sellé sus labios con los míos. Después, un beso largo y apasionado nos separó a los dos... y la abracé.

"Adiós, mantente a salvo", le susurré al oído y me alejé de ella.

"Estaré esperando, adiós" dijo Dora y me saludó con la mano, con eso, me Aparecí de regreso a nuestra habitación en Elysium.

La habitación estaba completamente vacía, las chicas estaban ocupadas con sus propias cosas. Fleur estaba entrenando a Jean, Rumi estaba entrenando a Ororo, Nemuri estaba fuera por un negocio en Nueva York, ayer por la mañana dijo que encontró un grupo interesante y que quería invertir en ellos. Momo estaba ocupada en su laboratorio, solo Dios sabe lo que estaba haciendo junto con Natasha y bueno... Luna era Luna, debe haber llevado a Attila a caminar... sí, sé que debería ser 'deslizarse o deslizarse' pero Luna insiste en que es un paseo

La Epopeya de Leviathan 3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora