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[Punto de vista Reo]

Durante el beso, nuestras manos no se quedaron ociosas... mi mano derecha acariciaba su espalda mientras que con mi mano izquierda acariciaba sus deliciosos muslos. Por un segundo mi mano derecha se separó de su espalda y apunté hacia la solapa de la tienda... Sabía que las otras chicas sabían lo que iba a pasar en mi tienda pero eso no significaba que las iba a torturar con nuestra actividad.

Después de estar satisfecho con las protecciones silenciadoras alrededor de la tienda que acabo de lanzar, mis manos volvieron a explorar el cuerpo de Natasha. Esta vez mi mano no fue por su espalda... comencé a acariciar su vientre plano... su piel se sentía realmente tersa y suave. Las manos de Natasha no estaban ociosas... su mano derecha estaba enroscada alrededor de mi cuello... a veces me acariciaba la cara mientras que a veces me acariciaba el pelo.

Mientras su otra mano estaba en mi trasero... desde que empezamos a besarnos, su mano no se apartó de mi trasero. Aunque no queríamos separarnos el uno del otro... teníamos que hacerlo. Había descubierto que podía vivir sin aire, pero me incomodaba mucho porque desde que renací estaba acostumbrada a respirar pero ya no lo necesitaba.

Pero ese no fue el caso con Natasha... sí, ella podría vivir debido a su casi inmortalidad pero definitivamente se desmayaría debido a la falta de aire y ninguno de nosotros estaba de humor para eso. "Parece que realmente te gusta mi trasero" dije mientras besaba su mandíbula... aunque no era una pregunta... más como una declaración.

"Sí, tienes un lindo trasero", dijo Natasha en un tono ronco. Sé que como hombre debería estar ofendido, pero no lo hice... esta no era la primera vez que alguien decía que mi trasero era lindo y que no me importaba tanto...

"Pero tu trasero puede llamarse perfección" dije y mi mano izquierda finalmente tocó su trasero por primera vez. Natasha gimió en mis oídos... Lo encontré realmente tentador. Desafortunadamente, ya estaba duro o me habría puesto duro solo con sus gemidos.

Empecé a frotar su trasero... finalmente su mano derecha dejó mi cara y lentamente se deslizó hacia abajo mientras acariciaba mi pecho y abdominales. Después de una pequeña pausa, su mano finalmente llegó a mi entrepierna. Empezó a acariciar mi eje y las bolas con su mano derecha mientras su otra mano todavía me tocaba el culo.

Mi mano izquierda estaba explorando la perfección... lo que Natasha parecía llamar su culo mientras mi mano derecha se deslizaba lentamente por debajo de su parte superior. Llevaba un sujetador deportivo debajo de la parte superior, pero eso no me impidió acariciar y manosear sus maravillosas tetas.

A pesar de que el resto de la ropa nos molestaba, ninguno de los dos podía quitárnosla porque no queríamos separarnos. Después de unos segundos de manoseos y manoseos, el cuerpo de Natasha se arqueó hacia atrás. "No te detengas... estoy cerca... tan cerca" gimió Natasha en puro éxtasis. Continué acariciando su cuerpo y finalmente alcanzó su clímax, después de unos segundos más.

Decidí darle a Natasha un pequeño descanso para que pudiera recuperar el aliento. Estuvo bien solo después de unos segundos... podría tener algo que ver con su factor de curación regenerativo. Natasha me sonrió y se incorporó... con un rápido movimiento se quitó la blusa junto con el sostén dejando al descubierto sus maravillosos senos.

"Son hermosos", dije con asombro y Natasha sonrió con picardía cuando escuchó mi cumplido. Natasha inmediatamente se inclinó a mi lado una vez más... se aseguró de que sus tetas estuvieran a mi alcance.

"¿Por qué no me muestras cuánto los aprecias?" Natasha me preguntó astutamente... No necesitaba que me lo dijeran de nuevo y mis manos alcanzaron sus suaves senos... Lentamente le di una lamida a su teta derecha. Natasha gimió y tiró de mi cabeza hacia su pecho. Su mano izquierda finalmente dejó el culo y se deslizó dentro de mis bóxers. Agarró mi eje y comenzó a bombearlo lenta y suavemente... la acumulación era casi insoportable ahora...

La Epopeya de Leviathan 3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora