1892
Las llamas de fuego incontrolables soltaban un humo grisáceo dejando nubes anaranjadas del fuego intenso en la oscura noche. En la que se escucharon desde lejos, los últimos gritos de dolor de James, el hijo de Elijah Knight, el admirable y honrado sheriff de la ciudad.
Elijah estaba paralizado viendo como su casa se quemaba con mucha impotencia y rabia por dentro debido a que el no pudo haber estado ahí para salvar a su hijo y sacarlo de la casa a tiempo. Sus memorias se empezaron a borrarse. Posiblemente de por vida. Su rostro, sudado y entristecido, mostraba preocupación e infelicidad. Su vida empezó a desmoronarse.
Finalmente, de la casa, no quedo nada. Solo escombros, cenizas y las flamantes llamas que se iban apagando poco a poco. Las brasas se elevaban por el viento, dejando un ambiente extremadamente sofocante. Cayó de rodillas al suelo y observaba el ambiente en que estaba, oscuro estaba anaranjado y había un grupo de gente entristecida mirándolo. Incluyendo un par de oficiales con los que trabaja y su jefe. El no paraba de llorar. Sus manos golpeadas por los golpes que le dio al suelo, ardían en el suelo. No tenía consuelo. Ni siquiera el de su mujer. Estaba con otro.
***
7 Años más tarde
Era una noche con tormenta estruendosa en la que el sheriff estaba en su despacho de madera clara y una pequeña ventana en la que se escuchaba el rebote de gotas de la lluvia.La sala estaba en la penumbra con la luz proveniente del pasillo que traspasaba la ventana de la puerta y una vela con la llama casi por apagarse con la cera derretida.
Tenía una botella de vidrio de whisky Jack Daniels. O lo que quedaba de ella. Sentado con un cigarrillo casi terminado en la mano en su escritorio de la comisaría con cara pálida y con señas de que durmió poco y nada. Y el humo gris dejando un olor rancio en la sala.
El escritorio estaba desordenado, papeles por doquier, algunos tirados en el piso y otros derramados por el whisky en la mesa y un teléfono en el centro y la vela en la esquina izquierda.
El comisario Gunn aparece en la puerta y golpea con la mano. Parecía no estar bien
Elijah le hace la seña con el dedo índice para que pase.
Gunn entra y mueve la mano para quitar el humo del cigarrillo.
—¡Elijah! Ven urgente conmigo afuera— dijo el comisario Gunn Intranquilo —Apúrate— exclamó más alterado de lo común.
—¿Qué ha sucedido, Comisario?— respondió un poco menos despierto y con la botella de whisky en la mano, apuntó de tomársela del pico como si nada le importase.
No parecía algo bueno, sino algo terriblemente horrendo por la preocupación que mostraba Gunn en su rostro.
—Me informaron que hubo un crimen en una casa cerca de aquí. ¡Hay testigos que dicen que fue aterrador!- exclamo exaltado —Dijeron que el que lo cometió tenía máscara de cerdo real hecha a mano— añadió —Es la única maldita pista que tenemos por ahora— apoyo sus manos en el escritorio, se le notaban las venas y las arrugas en ellas. Estaba viejo. Estaba extremadamente nervioso.
—¡Diablos!— —Iré ahora con usted ahora mismo- —Agarraré mi arma por si acaso— dijo con la idea de que podía matar al mencionado ya en la escena de crimen.
—No será necesaria el arma—
—La llevare en mi bolsillo escondida— —La llevare igual—
—Bueno, está bien. Ponte abrigo que hace frío afuera—
Salieron del despacho hacia el exterior húmedo por la reciente tormenta. El suelo estaba resbaloso con bastante barro y suciedad.
Caminaron hacia sus caballos que estaban atados, los desataron y acomodaron todo y se dirigieron hacia allá.
Tras ir a galope 20 minutos llegaron por una zona pantanosa oscura y de altos árboles que parecían sombras de gigantes a la escena del crimen.
Entraron a la choza con las ropas que tenían puestas empapadas y era terrible el olor del ambiente, les hacía mal al olfato porque estaban cerca de los pantanos densos y la zona demasiada espesa en plena oscuridad y Entonces sacaron los faroles de luz y los encendieron.
Era una casa de madera oxidada al lado del pantano que parecía que se iba a derrumbar en cualquier momento por vientos así de fuertes.
Vieron que no aparentaba nada bien, habían muchas cosas tiradas en el suelo, como comida y objetos de cocina y botellas rotas en la mesa de la cocina.
Sentían olores de algo podrido de había una habitación sin puerta. Parecía la habitación de donde dormían.
Se metieron ahí y vieron dos cadáveres, uno de un hombre y otro de una mujer. Estaban mutilados. El cuerpo del hombre muerto tenía las entrañas salidas. Y la cabeza perforada con una estaca de madera oxidada. El cuerpo de la dama tenía el cuello cortado y sangre por todos lados. La sangre marrón oscura estaba seca en el colchón. Parecía una futura pareja, ya que en la mesa de luz había una foto de esas dos víctimas en su posible casamiento.
—Diablos— Exclamo Elijah poniendo la mano en la nariz para taparse y sentir menos el olor pero era bastante fuerte.
La pared tenía 2 textos escritos con sangre de las víctimas en la madera que decía
«CADA GOTA DE SANGRE ES UNA OBRA DE ARTE» «EL CAOS ES MI ÚNICO GUÍA»En la escena Elijah sentía nervios y sentía y que había alguien más además de Gunn y él.
—Demonios, está pesadilla valió doble y quien carajos se digna a hacer esto!— dijo alterado Gunn
—Debemos resolver esto y así evitar más víctimas inocentes— expresó con mucha rabia y enojo Elijah —Me recuerda a...— le empieza a salir lágrimas lentamente hasta el punto de sollozar, silenciosamente al principio pero no se contuvo.
—Por favor, Elijah, deja de culparte por el pasado y ayudémonos mutuamente a resolver esto— —Deja de culparte por cosas que ya pasaron y debes estar aquí y ahora—
—Vayámonos de aquí— —¡¡Este maldito olor me está matando!!—
Se fueron ambos en sus caballos de nuevo a la ciudad con los faroles de luz en la mano observando el oscuro y hostil ambiente en el que estaban. Les parecía que alguien desde un lugar del pantano o alrededores los observaba alguien desde lejos.
Al volver a la ciudad se quedaron en la comisaría ordenando un poco el desorden. En la ciudad no había tanta gente pero había un poco, no parecía del todo feliz, por supuesto, pero tenían como una extraña forma de comportamiento en el camino, parecían preocupados y sorprendidos que ellos hayan vuelto tras varias horas afuera.
Elijah saca un cigarro de la caja de su bolsillo y lo enciende. Sale afuera a fumarlo para no dejar olor a sucio en la recién limpia comisaría.
Gunn en cambio, se sienta en su escritorio y saca un libro, parece un diario y saca un bolígrafo y empieza a escribir en ella. «Hoy fue un día muy intenso tras haber ido a una cabaña en medio de un pantano donde vive "Don Nadie", una zona hostil y deshabitada. Es una zona pesquera pero no hay mucho más que eso»
El reloj de la comisaría suena al marcar las 12:00 del día siguiente y se oye un fuerte disparo de revólver a lo lejos...¡BANG!..¡BANG!...un segundo disparo y luego se escuchan aterradores gritos que por eco retumban en la silenciosa y atormentada ciudad.

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LA BARBARIE DEL ENMASCARADO
Mystery / ThrillerEn la oscura y agitada Norteamérica de finales del siglo XIX, un asesino serial aterroriza la ciudad y sus alrededores. Su modus operandi es siniestro: actúa únicamente durante la noche, mientras que durante el día se oculta tras una apariencia norm...