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Me gustaría poder decir que después de aquella "cita" junto con el gran golpe propinado en el perfilado rostro de Trevor, las cosas entre nosotros cambiaron o por lo menos tomaron algún rumbo hacía el camino a ser "amigos", o bueno intentamos ser ...

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Me gustaría poder decir que después de aquella "cita" junto con el gran golpe propinado en el perfilado rostro de Trevor, las cosas entre nosotros cambiaron o por lo menos tomaron algún rumbo hacía el camino a ser "amigos", o bueno intentamos ser amables entre nosotros, pero no fue así, gracias a mí y la inevitable urgencia de evitarlo en todo momento que podía, entramos en  la Av. "Despreciable" con esquina en "Piérdete, idiota".

Sentía la necesidad de externar lo que había sucedido, por qué si algo puedo asegurarles es que mi pecho no es bodega y no podía guardar más lo que un simple bote con jabón para burbujas y el acercamiento de Trevor había causado en mi. Así que hablé con la única persona que me ayudaría. Cameron. Porque acá entre nos, ella tenia todo un doctorado con especialidad en el sexo masculino y todo lo que conlleva el comportamiento de esa especie.

¿La solución? Acompañarla en una caminata mañanera, puede que eso no resolvería mis problemas pero ya no podía  quedarme encerrada en casa. Y sí, por alguna razón acepte la idea en su momento, pero lo que no me dijo es que tendría que levantarme a las 5:00 am para ir a correr y ver juntas el amanecer.

Hubiera preferido ahogar mis problemas en comida y una dosis completa de The Vampire Diaries.

Damon Salvatore era todo lo que estaba bien en este mundo.

—Mueve esas piernas de pollo, que un hermoso día nos espera.

—No vuelvo a contarte sobre mis problemas no-amorosos... maldita sea.

—Recibes lo que das, y planeo darte una larga vida llena de salud y prosperidad. 

—Llegas 18 años tarde, no sé si lo sabes pero...— recordé las clases de atletismo, tome aire por la nariz y después sacarlo lentamente por mi boca— tengo Cáncer, así que no creo tener una vida larga.

—Todo es mental, Nydi, piensa positivo.

—Dile eso a mis pulmones, creo que en cualquier momento escupiré uno.

Nos detuvimos luego de completar otra vuelta trotando (más bien Cameron trotaba, yo fingía hacerlo cada que volteaba a verme), en el Central Park.

Odiaba admitirlo, pero Cam tenia razón, este era un hermoso amanecer, el reflejo de los rayos del sol en el lago,  lo hacia ver cómo toda una postal. Digna de recordar.

—Entonces, cuéntale a la tía Cam, ¿qué pasó con el sexy profesor de arte?

Me deje caer en la banca frente a un pequeño lago dejando que el aire fresco de la mañana golpeara mi rostro sudado.

—Llegó a casa pidiendo que saldara el favor por haberme llevado a casa, fuimos a jugar básquetbol y termine golpeándolo en el rostro —resumí lo mejor posible tratando de no olvidar nada.

—¿Tú? ¿fuiste a jugar básquet?— carraspeó su garganta, aguantando la risa.

—¿De todo lo que dije, eso fue lo único que te importa?

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⏰ Última actualización: May 29, 2023 ⏰

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