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Felicidad, ¿Qué o quién te produce felicidad?

Él tenía la respuesta clara; su hermana. Después de la muerte de sus padres cuando ambos tenían 11 años, ellos se tuvieron el uno al otro como soporte. Recorrieron varios hogares de acogida hasta que cumplieron 18 y siguieron sus vidas uno al lado del otro, siempre juntos.

Así fue hasta el 12 de septiembre del 2019, cuando su hermana desapareció sin dejar rastro alguno.

La policía decía que estaban trabajando en su caso, que estaban haciendo todo lo posible por encontrar al menos alguna señal de donde se podría encontrar. Pero nada, nunca hubo respuesta alguna y luego de haber pasado dos años ellos se olvidaron de su querida hermana.

Cuando luego en las noticias apareció una chica de 19 que había desaparecido y luego de 5 meses la encontraron, lo supo. Ellos no trabajaron lo suficientemente duro para encontrar a su hermana solo porque no les pasó dinero bajo la mesa, como esos padres de la chica de 19 años habían hecho.

Enfureció, pero lo peor aún no había llegado.

El 16 de enero del 2022 recibió una llamada. Llamada en donde informaban que habían encontrado el cuerpo de una joven de aproximadamente 24 años en un arroyo.

Su corazón palpitaba rápido con la esperanza de que la chica sin vida que se encontraba enfrente suyo cubierta con una sábana en una camilla de la morgue, no fuera su hermana, su respiración estaba agitada a la espera de que levantaran ese pedazo de tela, y comprobar que no fuera su hermana.

Pero cuando se alzó y vio su rostro magullado, su corazón se oprimió y cayó al suelo sintiendo un dolor quemando todas sus entrañas, dolía tanto que no podía respirar bien. No podía ser, no podía ser su hermana.

Se levantó como pudo y fue directo a donde su hermana para sostenerla entre sus brazos, abrazándola mientras rogaba que abriera los ojos y le mostrará su sonrisa hermosa. Su dolor salió en forma de gritos desconsolados y lágrimas que parecían no tener fin.

Para cuando se realizó el respectivo funeral, sus ojos apagados estaban fijos en la imagen de su hermana con una sonrisa. Recordaba ese día, fue meses antes de su desaparición cuando ambos fueron al parque de diversiones y ella lo había animado a subirse a uno de esos juegos mecánicos que él tanto tenía miedo. Sonrió ante la nostalgia, y sus ojos rojos con ojeras comenzaron a producir lágrimas una vez más.

Luego de 5 días, creía que moriría gracias a que no estaba durmiendo bien y tampoco comía de forma correcta. Eso fue hasta que después de 2 semanas de la muerte de su hermana hubo una noticia en especial, que convirtió su tristeza en ira.

“Se encontró que el grupo mafioso Katsu, del cual Mori Katsumoto es líder, fue responsable de la desaparición y fallecimiento de la joven de 24 años...”

Cuando escuchó el nombre de su hermana, las palabras que salían del televisor comenzaron a ser como un zumbido ensordecedor en sus oídos, sus ojos desenfocando las imágenes que se reproducían en el aparato, sus manos apretadas en puños tan fuertes que pudo sentir como sus uñas se enterraban bajo su piel hasta sacar sangre. No supo cuando de sus ojos comenzaron a salir lagrimas, lagrimas de tristeza que en el pasar de un segundo se volvieron de enojo.

Agarró el jarrón que se encontraba frente suyo en la pequeña mesa y lo tiró hacia el televisor, rompiendo al instante la pantalla y con eso callando todo sonido que salía de el.

— Mori… Katsumoto — saboreó lentamente en susurros el nombre con ira invadiendo su cuerpo por completo. Jamás olvidaría ese nombre. — Voy a acabar contigo, es una promesa.

Se levantó caminando hacia su oficina con pasos pesados, votó todas las cosas que se encontraban encima del escritorio y colocó su laptop encima de esta sentándose en la silla frente al escritorio, primero empezaría por investigar.

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⏰ Última actualización: May 28, 2023 ⏰

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Lágrimas de sangre || Hyunmin • knowminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora