fake boyfriends ━━━━ rinsagi

Capítulo 4

Isagi llegó a casa de Nagi siendo traído por Rin. No quería ir a su casa puesto que tal vez un montón de reporteros estarían afuera esperándolo para hacerle un sin fin de preguntas que, sinceramente, ahora mismo no le apetecía responder, sumando a qué si veían que llegaba con Rin probablemente la situación iba a empeorar, por lo que decidió refugiarse en la casa de su manager.

Tocó la puerta varias veces siendo sorpresivamente recibido por Barou, su guardaespaldas. El mayor lo recibió con una mala cara y lo único que pudo hacer fue tragar saliva.

— ¿Puedo pasar? — preguntó tímidamente.

— No lo sé. ¿Puedes? — respondió inmediatamente.

— Ja... Con permiso — se hizo a un lado entrando al interior del hogar ajeno.

Camino sin voltear hasta la sala de estar donde suponía se encontraba Nagi. Y efectivamente, el más alto estaba recostado en el mueble con su celular en mano posiblemente jugando un juego en él.

— Hola Nagi — le saludó.

— Oh, hola Isagi — le respondió.

El peliazul le sonrió y giro un poco la cabeza encontrándose con Barou fulminandolos a ambos con la mirada y los brazos cruzados, Nagi siguió como si nada pero Isagi trago en seco.

— Nagi, ¿podrías por favor decirle a Isagi lo que querías? — sugirió el contrario.

— Ah si — dejó su celular a un lado para estirarse — Felicidades por tu relación con Rin — apretó su hombro.

Un sonrojó se apoderó de la cara de Yoichi mientras bajaba la mirada para que no le vieran.

— ¿¡Qué!? ¿No le vas a preguntar cómo ni cuándo fue o sucedió? — regañó indignado.

— Pero si eso no me incumbe — hizo un puchero y medio cerró los ojos, cansado.

Barou rodó los ojos — ¿Isagi, por qué no nos dijiste? Se supone que somos tus amigos más allá de tus empleados — cruzó los brazos molestó.

— Bueno sobre eso... — estuvo a punto de decirles la verdad pero recordó la condición de no decirle a nadie sobre su relación falsa — Llevamos poco tiempo de salir, queríamos estar seguros de que fuera algo formal para poder presentarnos como novios pero la prensa nos atrapó y ahora llegamos hasta aquí — mintió pero no sabía si eso era suficiente para convencer al contrario.

El otro suspiro — Bien, si no nos quieres contar la verdad no pasa nada, tus razones tendrás — se encogió de hombros y se sentó al lado de Nagi.

— Si. Lo único malo de todo esto es que voy a tener más trabajo de lo normal, que fastidio — se quejó el peliblanco.

Isagi pudo sentirse tranquilo, tenía la suerte de tenerlos a ellos dos al cuidado de él y su carrera, aunque ahora mismo se preguntaba cómo le iría a Rin con Aryu y Oliver, ya que estos dos eran todo lo contrario a Nagi y Barou. Alejó los malos pensamientos de su cabeza y revisó su celular viendo que no tenía ni un mensaje o una llamada de su CEO, Ego, se le hizo extraño ya que el mayor solía ser un poco histérico en lo que a su carrera musical respecta. Iba a guardar el móvil hasta que una llamada entrante lo impidió, nervioso levantó el teléfono pensando que se trataba de Ego pero grande fue su sorpresa al ver el nombre de Bachira en la pantalla.

— ¿Bueno? — contestó inmediatamente.

— ¡Isagi Yoichi! — gritó su amigo haciendo que alejara el celular de su oído.

— Auch, ¿qué pasa?

— ¿Todavía tienes el descaro de preguntar? ¿Dónde estás? Chigiri y yo vamos para allá.